D i e c i o c h o

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Todo era color dorado, las mesas plateadas, todo era formal. Jimin me presento algunos de sus amigos, comenzamos a tomar un poco de licor, yo no quería tomar demás pues no quiero hacer cosas de las cuales no estaré consciente al día siguiente...

-¿Quieres bailar?-me pregunta Jimin, mientras grita, pues la música está muy alta.

-¡Claro!-tomo su mano.

Me toma de la cintura, me apega a él y comienza a llevarme al ritmo de la música, me dejó guíar...

-Eres hermosa...-susurra, pero logró escucharlo.

Solo sonrió, no soy consciente de lo que está pasando, así que me dejo llevar.

Con sus manos, moldea mi figura, se siente bien...

-Taehyung...-murmuro

Abro mis ojos y es cuando caigo en razón, me suelto y lo miro...

-Gracias, pero creo que es hora de regresar-sé que me escuchó, él asintió.

Ibamos en camino, yo tenía un nudo en mi garganta. Ya no aguanto estar así, la conexión que siento con ese chico es fuerte y difícil de comprender...

Al llegar, bajo rápido y corro, los que estaban abajo dicen cosas que no logro entender, subo rápido y abro la puerta con fuerza, y es ahí cuando lo veo, está sentado de espalda, no dudó en abrazarlo.

-Tae...-es lo único que logró decir antes de estallar.

No veo su cara, solo lloró...

-Y-yo...-no puedo hablar

Siento como se voltea y me mira.

-Perdoname...-digo para luego ocultar mi cara en su pecho...

-¿Qué?-dice el.

-Tae-me alejo-: Yo no he sido buena, y entiendo que no me quieras y tampoco quieras perdonarme, pero no puedo dejar de pensar en ti, sé que lo que te dije no fue nada agradable...—respire hondo, lo miré

—____, yo—el suspira

—Por favor...—digo muy suave, bajo mi cabeza y gotas caen...

Silencio, eso es lo único que hay, silencio.

—Me duele...—suelta, levantó mi cabeza y lo veo, está por llorar...—: dure mucho buscándote, no lo hice porque solo quería algo pasajero, yo realmente voy enserio, pero tus palabras fueron fuertes...—coloca su mano en su lagrimal y moja sus labios—: Sé que suena exagerado, pero yo realmente te amo...—lloro

Lloré aún más.

Tomé su rostro entre mis manos, me acerque a él y lo besé, sentir de nuevo nuestros labios juntos, me hace sentir completa.

Me toma de la cintura, me siento encima de él, entre el beso sigo sollozando...

—Pequeña...—lo escucho—: te extrañe demasiado —coloca un mechón detrás de mi oreja, sonrió

d e s t i n y; kthDonde viven las historias. Descúbrelo ahora