Corazón de Verdugo

nueve

-Parece que la vida te sonríe-comentó Bills,mientras golpeaba su oscura garra contra la mesa.

-No me quejo-le dijo la muchacha-Por cierto, aquí esta la cuenta de todo lo que tu asistente a comido durante estos casi dos meses.También por lo que se sirvieron el día de hoy.

Bills tomó el trozo de papel que Kaori le dió y el total a pagar era estratósferico.

-¡Esto es una estafa! ¡Yo no voy a pagar eso!-le gritó el díos poniéndose de pie y golpeando el puño contra la mesa.

-Pero Whis es tu empleado ¿No?

-Asistente-aclaro el ángel algo molesto.

-Lo que seas,has estado viniendo a comer cada semana y necesito que me paguen la cuenta y ya que el dios aquí es Bills y tú un  asistente...Él paga.

-¡Yo no soy responsable de lo que este tragón,se coma! ¡No pagaré eso!-protestó Bills, acercando su rostro al Kaori,pero con una expresión feroz.

-N seas asi. Este es el restaurante de mi hotel y la comida se paga.Ttu asistente me llevará a la banca rota con todo lo que come-le señalo Kaori en un tono más dulce que calmó al dios.

-Yo crei que me estaba invitando-le dijo Whis a Bills cuando esté lo miro con reclamo.

-Te invite la primera vez,pero comenzaste a venir muy seguido-le indicó la muchacha.

-Es que la comida de este lugar es  deliciosa-le dijo Whis con el entusiasmo de un niño y volvió a su plato.

-¡De todas formas no pagaré esto! Soy un díos,los mortales me deben demostraciones de gratitud como lo son las comidas gratis-le señaló cruzando los brazos,dando a entender que no abandonaría su postura en ese tema.

-¡Tacaño!

-¡Usurera!

-¡Mezquino! No me pagues sino quieres,pero no vuelvan por aquí-le dijo Kaori bastante  molesta-Desocupen este lugar lo antes posible.

-Eres muy arrogante para hablarme de este modo-le señaló Bills-No te confundas,que hayamos jugado a sostener una relación no te da derecho a dirigirte a mi de esta forma...

Ni siquiera lo escucho,Kaori simplemente dejo la habitación y al dios con la palabra en la boca. Algo que terminó por irritar al dios que salió tras ella,para decirle unas cuantas cosas.

-No lo teme ni un poco y lo trata como a un mortal cualquiera.Es segura de si misma y no obedece a nadie,por eso lo trae así por ella-comentó Whis a nadie en particular-Me preguntó si ella podría llegar a verlo...Para que me molesto,es más fácil apagar el sol.

-¡Kaori! ¡Kaori te estoy hablando!
¡¡Oye mujer deja de ignorarme!!-le gritó y su voz envío una onda de choque que sacudió el pasillo y obligó a muchacha a cubrirse los oídos.

A paso rápido y enérgico caminó hacia ella, para tomarla por el hombro y volterla hacia él. Pensó que ella le reclamaria,pero en lugar de eso tenía la mirada fija en el piso y seguía cubriéndose los oídos. Bills la llamó,pero ella no respondía. Veía fuego,sombra y oía gritos. Cuando volvió de ese trance se encontró con Bills, de frente a ella viéndola con curiosidad y llamándola con insistencia.

-¿Qué te pasó?-le preguntó el dios temiendo que el estado de la muchacha,se debiera a la potencia de su voz.

-Nada...Déjame-le dijo y apartó la mano de Bills de su hombro.

Bills no era para nada fácil de engañar.Si de mentiras se trataba,le eran bastante fáciles de descubrir y desde que Kaori le contó la historia de sus cicatrices, algo le dijo que no le estaba diciendo la verdad. Fue una historia plausible,pero muy lejana a la real. No hizo comentarios entonces y no los haría en ese momento. Bills la miró recargarse contra la pared como,si intentara recobrar el aliento. El dios se le aproximó entonces y apoyando el antebrazo en el muro,por encima de la cabeza de la muchacha, le dió el trozo de papel con la cuenta.

-Te pagaré,pero quiero un descuento-le dijo.

-¿Siempre tienes que ganar?-le pregunto Kaori y Bills se sonrió-Okey tienes tu descuento del diez porciento.

-Eso es muy poco-protestó Bills.

-Es todo y sólo porque me agradas-le dijo la muchacha y salió de debajo del brazo del dios, para seguir su camino.

Bills se sonrió y camino tras ella. No llevaba dinero consigo,pero en alguna ocasión había firmado algo así como un pagaré para ya ni recordaba dónde y menos el motivo,mas penso en hacer algo similar allí y mientras caminaba detrás de ella,algo por lo bajo peculiar,pues él nunca caminaba detrás de alguien,iba respirando la huella aromática de esa mujer, de la que no sabía absolutamente nada. Un olor que sacudía cosas muy guardadas en él y que pensó que nunca volvería a sentir. No lo asustaba sentirlas,tal vez un poco expresarlas y encontrarse otra vez con aquellas palabras. No era la mata del sentimentalismo,pero sentía a su manera y era más diestro en eso de lo que muchos podían imaginar. Pese a ese recelo que su última experiencia le provocó,no temía decirle a esa mujer que se sentia atraído por ella,pero quería saber si era recíproco y Kaori,no le daba señal alguna. Cuando llegaron al lobby del hotel un sujeto se le acercó,con un gigantesco ramo de flores y una caja bajo el brazo. Habló con Kaori y ella le señaló que llevará esa flores a alguna parte. La vio quedarse con un trozo de papel que se fue leyendo hasta llegar al mesón de la recepción.La chica lo dejó sobre el mueble y busco algo en un gabinete sin mucho interés, cuando volvió la vista a Bills, lo encontró leyendo el trozo de papel.

-Me las manda Jerez-le dijo Kaori y Bills se apartó de la nota rápidamente-Cada semana desde que volví aquí. No sé cómo me localizó...También me manda chocolates,joyas,perfumes y hermosas cartas con poemas.

-¿Sí? Debes sentirte halagada de que una diosa se interese en tí-comentó Bills,con ese tono apático que tenía a veces.

-Me sentiría halagada aún si no fuera una diosa la que tiene esos detalles conmigo-le respondió Kaori y le señaló a Bills firmar un papel-Pero es mejor cuando viene de alguien que te importa de la misma forma...

-Supongo que si...-murmuró el dios rascándose la mejilla.

Kaori se desató el cabello y lo peino con la mano desprendiendo su aroma. Inconciente de lo que causaba aquello,en el díos a sus espaldas, Kaori siguió con lo que hacía y cuando se giró a Bills, para darle el recibo,este estaba apoyado en el mesón con una actitud algo coqueta y con un tono de voz ligeramente igual a su actitud le dijo:

-¿Quieres salir conmigo,Kaori?.