quince

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Bills volvió a su hogar. Se dió un baño y se fue a dormir con las huellas de las caricias de esa mujer en la piel. No queria volver a verla porque se dió cuenta de que podía llegar a sentir por ella,algo más que una fuerte atracción. Eso era problemático y doloroso. Eso iba en contra de lo que es un díos de la destrucción.En cuanto a Kaori,ella se sintió tranquila y más ligera después de esa noche. Si Bills volvía o no... Lo que él decidiera estaba bien, ella no lo iba a esperar,ni lo contrario.

Pasaron dos meses antes de que Jerez volviera a ver a Kaori. A la diosa le gustaba la muchacha, pero ella le dejó todo muy claro, así que se conformo con una amistad o algo semejante. La joven la invitó a comer y charlaron un rato. La diosa tenía mil y una historias que contar,no se molesto cuando ella le dijo quien era y que hacía,asi que Kaori no se molestoba por tener que oírla por horas. No es que Jerez hablara mucho,era sólo que Kaori hablaba poco y parecía  reacia a referirse a Bills,por suerte la diosa no insistió después de una pregunta referente a él. Al final de la comida les llevaron un postre que le gustaba a Kaori sólo que al probarlo le dió asco y salió corriendo al baño. Tardó bastante en salir y al hacerlo rechazo seguir comiendo.

-¿Estás bien? Te vez algo pálida-le comentó Kaori.

-No es nada...Últimamente no he dormidos bien,por eso estoy cansada y...

Término de cara al piso. Despertó una media hora después acostada en una cama y con Jerez reclinada sobre ella con una expresión muy sería. La diosa le había pedido a Sour que la revisará y este lo hizo,mas prefirió ser ella la que le diera la noticia.

-Estás embarazada querida-le dijo por poco provocándole otro desmayo a la joven-Y el padre es Bills...

Kaori se quedó pasmada con la noticia. La verdad lo venía sospechando hace unas semanas,pero esperaba que fuera un simple retraso en su periodo, mas si Jerez se lo estaba diciendo con esa certeza no había ya duda alguna. Se llevó las manos al vientre tratando de contener la cantidad de sentimientos encontrados que tenia en ese momento y un minuto después, reparó en un detalle de la declaración de la diosa.

-¿Cómo sabes que el padre es Bills?-le pregunto Kaori.

-Sour explícale tú-le dijo Jerez poniendo las manos en sus caderas.

-Es por la energía que emana de su vientre-le dijo el ángel-El señor Bills es un díos que llevaba consigo el hakai y le a transmitido a ese niño ese poder. En palabras simples lo que usted lleva en su vientre es un hakai-shin de nacimiento. Una criatura única y que debemos...

-Suficiente Sour-lo interrumpió Jerez-Será mejor que hables con Bills al respecto y dile que yo guardaré el secreto.

El rostro de Jerez y el ángel del universo dos eran bastante graves. La diosa le dejó un artefacto para que se comunicara con ella en caso de algo y se despidió con tristeza en sus ojos verdes,algo que Kaori atribuyó a los sentimientos que tenia la diosa por ella. Pero en ese momento la muchacha tenia otras cosas en mente como para preocuparse por Jerez y no es que fuera una desconsiderada era sólo que la idea de ser madre le causaba una especie de dicotomía. Por un lado el miedo a la maternidad,por el otro lado lo irónico que le resultaba que ella llevara vida en su vientre siendo una asesina. Porque podría haber dejado de matar, pero eso no cambiaba el hecho de que era una asesina y de que lo sería hasta el último día de su vida. Apenas le cabía en la cabeza la parte más terrible o peligrosa de todo eso y es que esperaba un hijo del dios de la destrucción. Todo eso de los dioses era demasiado abrumador para ella, que era bastante mundana. Lo sublime no tenía cabida en su vida,ella era capaz de todo por una simple trozo de pan así como por un tesoro. Ella disfrutaba de los placeres que brindaba el dinero y el dinero fácil,porque el trabajo honesto le era una pérdida de tiempo. El esfuerzo no valía la recompensa si de trabajo remunerado se trataba. ¿Ella ser madre? Era un mal chiste y el padre ¡por dios! y al exclamar eso se dio una palmada en la cara. ¿Cómo fue tan tonta de sucumbir a ese deseo de su alma maltrecha? Porque el deseo de su alma la llevó a los brazos de ese sujeto y en nada tenía que ver la pasión. Eso vino después. Se miró en el espejo y pensó en ponerle un fin a todo eso,sin embargo,cuando llegó a la clínica,dias después, para pedir clandestinamente que interrumpieran su embarazo,se detuvo.

La vida siempre se la tomó tal como se le presentó. Se adaptó a todo por más terrible que fuera y nunca,ni por una vez, retrocedió.
Ese hijo que llevaba en las entrañas podía ser producto de un arrebato,pero la verdad es que le hacía cierta ilusión fuera el hijo de un antropomorfo o no. Lo cierto es que para ella no había mucha diferencia. Todos los seres eran prácticamente iguales;a todos los podía matar y viceversa. Además ese sujeto de carácter fuerte y cintura más estrechas que la suya le gustaba bastante. Tal vez de haber encontrado a alguien así se hubiera proyectado,pero con él no podía. Era como enamorarse de una tormenta. Ella no reflexionaba mucho así que entró a la clínica y comprobó lo que ya era una certeza;estaba embarazada y estaba bien. Si le decía o no al padre, no estaba muy segura,pero bueno tampoco sabía cómo contactarlo,pero se hacia una idea de como hacerlo. Aunque tal vez,sólo tal vez él podía aparecer por ahí.

-Escúchame Sour,no quiero que hables de esto con ninguno de tus hermanos,menos con Whis-le dijo Jerez a su ángel-Ese problema no tiene que ver con nuestro universo.

-Entiendo...-le respondío Sour.

El dios dormía y Whis tuvo antojo de algo delicioso. Pensó en ir a la tierra,pero entonces cambio de idea y fue a buscar los pastelitos que hacía Kaori. Bills despertó casi al mismo tiempo que Whis dejo el planeta y tuvo un sueño muy extraño que lo dejo algo confundido. Se vio cargando un niño pequeño...

-¡Que tontería! Ni siquiera me gustan los niños-se dijo y volvió su mente a lo importante:llenar su estómago.

Corazón de VerdugoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora