SAY YOU LOVE ME. (Neji Hyuuga)

✨Inconsciente.✨

Kata.

Hace unos días que fue la muerte del Hokage y todos volvieron a sus vidas normales, o la mayoría, Konohamaru es el más afectado con todo esto, y no quiero no pensar en cómo reaccionara cuando alguien más tomé el lugar de Hokage.

Salí de la casa comenzando a caminar por la aldea para buscar algo entretenido para hacer.

— Hola, papá. — Me acerqué al verlo recargado en la pared fuera de un puesto de Dangos acompañado de Kurenai y Asuma. — Oh... ¿están en una cita? — Ambos se sonrojaron.

— ¿Que haces por aquí? — Me crucé de brazos ante la pregunta de Kakashi.

— Yo vivo por aquí. — Solté un suspiro. — Estoy buscando a Ero-Sennin.

— Has pasado mucho tiempo con el y Naruto. — Asentí.

— Es entretenido estar con ambos, y divertido. — Mi padre soltó un suspiro y note que observaba a unas personas dentro del local de Dangos.

— Kakashi. — Sasuke apareció acercándose a nosotros. — Kata. — Me observó con una pequeña sonrisa.

— Hola, Sasuke. — Le sonreí. — ¿Que haces aquí?

— Tu padre me llamó. — Regrese mi mirada al nombrado.

— Oh, que bien. — Mi padre me sonrió y puso una de sus manos en mi cabeza.

— ¿Por qué está aquí tan temprano? Es algo raro en usted. — Solté una leve risa y apoye mi brazo en uno de sus hombros.

— Bueno, es que me encontré algo. — Sasuke observó el local y entonces me di cuenta que ya no hay nadie.

Kurenai y Asuma se fueron a toda prisa.

— Mejor vayamos a otro lado. — Opinó Sasuke.

— Yo tengo que irme. — Mi padre se acercó.

— Te veo para cenar. — Se puso a mi altura.

— De acuerdo. — Bese su mejilla y me aleje de ellos comenzando un paseo por la aldea.

🐾🐾🐾🐾🐾🐾🐾🐾🐾🐾🐾🐾🐾🐾

— ¿En busca del nuevo Hokage? — Pregunté confundida por lo que me dijo Naruto.

— Sí, el sabio pervertido dice que es una mujer muy bonita y fuerte. — Observé al tío Jiraiya al comprender de quien habla Naruto.

— ¿Buscarás a la tía Tsunade? — Asintió con una sonrisa.

— ¿La conoces? — Pregunto Naruto sorprendido.

— Sí, ella me enseño lo poco que se de ninjutsu médico. — Explique. — De cualquier forma, les deseo mucho éxito y no se metan en problemas. — Les advertí señalando a ambos.

— ¿Por qué no vienes? — Sugirió el tío Jiraiya.

— No puedo, mi padre y yo cenaremos juntos. — Le dije con una sonrisa. — Pero espero que puedan encontrarla y volver pronto.

— Ya verás que sí. — Aseguró Naruto.

— Trataremos de encontrarla lo más pronto posible. — Abrace al Ero-Sennin.

— Suerte. — Me acerque a Naruto y lo abrace. — ¡Aprovecha estos días para entrenar!

— ¡Claro que sí, Kata-chan! — Me sonrió seguro.

Nos despedimos en la entrada de la aldea y después ellos partieron a su viaje mientras yo caminó por la aldea.

Me detuve observando los rostros de los Hokages y caminé con dirección a la sima de ellos. Un par de minutos después estaba ya sentada sobre el rostro del cuarto Hokage donde me mantuve tal vez dos horas observando la aldea.

— Agh, una tonta. — Me gire un poco para ver quién habló.

— Oh, una perdedora. — Dije en dirección a Noriko quién está acompañada de Neji.

— ¿Que haces aquí? — Pregunto Neji cruzado de brazos.

— Solo estoy aburrida. — Dije encogiendome de hombros. — Así que si me disculpan, dormiré un rato.

Me acosté colocando mis brazos detrás de mi cabeza para usarlos de almohada y cerré los ojos, pero al cerrarlos se escucharon unos pasos apresurados.

— ¡Kata-chan! — Un gritó muy familiar me hizo abrir los ojos.

Me puse de pie al mismo tiempo en que Kiba se detiene de golpe frente a mi con Akamaru sobre su cabeza.

— Kiba, ¿Que sucede? — Kiba se movió un poco nervioso y entonces Akamaru soltó un ladrido.

— Tu padre se enfrentó contra unos intrusos. — Lo mire confundida.

— ¿Que pasó? — Pregunté.

— Tu padre no despierta. — Mis ojos se abrieron de más. — Está en tu casa con los demás senseis. — Salí corriendo del lugar con dirección a casa.

Entre abriendo la puerta de golpe y subiendo las escaleras con rapidez. Al abrir su habitación me detuve observando a mi padre acostado en su cama inconsciente.

— ¿Que ocurrió? — Pregunté a sus tres amigos presentes mientras me acerco para poner mi mano sobre el pecho de mi padre.

— Tuvo una pelea contra Itachi Uchiha, no ha despertado desde entonces. — Solté un suspiro con mis manos temblando.

— ¿Por qué no me avisaron antes? — Traté de calmarme. — ¿Que hacía Itachi aquí?

— Vinó con un compañero suyo... A buscarte a ti y a Naruto. — Forme una leve mueca.

— Buscan a los zorros. — Murmuré comprendiendo todo. — El tío Jiraiya fue en busca de la tía Tsunade, si logran traerla, ella podrá atenderlo. — Sujete la mano de mi padre.

De pronto llegó Sasuke y comenzó a preguntar porque mi padre estaba dormido y porque había Jounins en la habitación hasta que entro otro preguntando si de verdad había vuelto Itachi enfrentándose con mi padre y buscándome a mi y a Naruto lo que provocó que Sasuke saliera en busca del paradero de Naruto.