Esclava de su propio destino

💙Parte 38

Maraton 1/3

Mi mente quedó en blanco al ver como Oliver beso a Carla, ella se percata de mi presencia.

- Buenas noches mi nombre es Carla - ella sonríe y me extiende la mano.

- Un gusto conocerte Carla - una línea dura se forma en mis labios al tocar su mano maldita pagaras por todo lo que me hiciste, cada humillación me fijo en su rostro aunque este con la máscara, no cambiado nada su melena café destaca más sus ojos verdes brillan al ver a Oliver .

- Disfruten de la fiesta. - dicho eso me retiro.

Siento una sensacion extraña al ver semejante traición , salgo al jardín para respirar, su esposa es Carla, como pudo ser tan asqueroso los dos cuanto los odio.

Se fuerte ellos pagaran todo.

- Estas bien.- miró al dueño de la voz es Franko.

- Si - digo con voz dura.

- Tu eres la chica que estaba bailando con mi amigo.

- Si ahora déjame ir.

- No.- alzó el seño.

- Disculpa - digo entre dientes, sin decir nada mas me retiro furiosa.

- ¿Por qué nos miras con mucho odio?.

- Imaginaciones suyas - digo divertida.

- No, quien eres - dice agarrando mi brazo.

- ¡Me sueltas ahora desgraciado! - grito furiosa.

- Tu....

- En tu puta vida vuelvas hacer eso - digo furiosa y me dirijo a la fiesta, me encuentro con Travis el cual está conversando con Carlos el encargado de las finanzas de su empresa .

- Lucía donde estabas - dice preocupado.

- Salí por un poco aire y Abby - digo mientras la busco por la gente.

- Esta bailando - suelta mientras toma una copa de vino, cuando la encuentro está sonriendo mientras un chico le da vueltas mientras baila.

- Travis no sigas bebiendo, no te quiero perder también - el me sonríe.

- Solo tome unas tres - musita divertido.

- Eso es mucho - lo fulmino con la mirada.

- Eres gracioso, ahora me dejas ir donde mi hermana- escucho que dice Abby al chico, los dos se acercan a nosotros.

- Muy buenas noches señorita y señor - dice el joven estrechando mi mano, Jackson sonríe al verme lo miro seria, me fijo en su cabello castaño oscuro, sigue igual de joven que hace cinco años, sus ojos color marrón se dirigen a Abby la mira con ternura como me miraba antes de destruir mi vida.

- Buenas noches - digo cortante, me acerco a Abby.

-Alejate de el - ella me mira y asiente.

- Chicas ya falta poco para que sea las 10:00pm prepárate Lucía.

- Si, espero no dañar ese momento - susurro con voz baja, desde mi lugar veo la mesa donde ellos están sentados, Carla le sonríe a Oliver el cual le da un beso profundo toca su mano con ternura y acaricia su cabello, desvió la mirada ya que Oliver me pillo mirándolo.

- Adivina que pasó hoy, me encontré con un chico esta mañana era lindo y creo que esta aquí.

- Lo has visto - chilla Abby.

- Si está en ese mesa - señala mesa en la que se encuentran ellos, Miro que es Franko el supuesto chico que conoció hoy.

- Vamos Stella, tu eres mejor que eso - digo mientras bebo un vaso de vino blanco.

- Lucía es en serio ninguno de esos galanes te llama la atención.

- No además tienen dueñas.

- Dejala Stella ella sólo tiene ojos para Stefan - las dos sueltan una carcajada.

- Stefan ¿dónde estará? - susurro lo necesito pienso.

- Dijo que le disculpes su vuelo se retraso además su trabajo no lo permite.- me pongo analizar las cosas el dijo que no me preocupé, Maldición esta haciendo mi trabajo pienso.

- Tendré que hablar con él - Siento alguien me observa, miro quien es me encuentro con los ojos azules de Oliver mirándome, nuestra mirada se encuentra, Cuanto te ame tratare de olvidar cada recuerdo y lo que sentía por ti ahora sólo queda odio, dolor y sobre todo un corazón roto.

Desvío la mirada al escuchar mi celular sonar.

- Señorita Bastille

- Stefan - ruedo los ojos.

- Me disculpas por no ir a esa presentación.

- No te perdono - Hablo enojada.

- Por que se que me quieres cerca, no te preocupes cuando llegue a España voy a rentar una suite solo para los dos.

- Tan chistoso, estoy enfadada contigo por mentir.

- En que te he mentido, siempre dije que te amo - dice con voz dura, al escuchar esas palabras me quedo paralizada, nunca me dijo eso.

- No...he yo digo por el trabajo no tienes por que hacer lo que me toca.

- Aaaa Eso era - escucho su voz nerviosa.

- Quiero ayudarte Lucía, pronto estaré ahí además necesito contarte algo - una parte de mi se tranquiliza al no escucharlo mencionar lo anterior, pero la otra parte quiere hablar de lo que dijo.

- Ok, me tengo que ir

- Una cosa mas secuestre a nuestro hijo.

- ¡Que! Estas con Ryan - escucho su vocecita decirme mamá sonrió, es lo único bueno que tuve entre tanta oscuridad.

- Sabía que escuchar su voz te alegraría la noche - dice Stefan.

- Escuche tu voz muy apagada, y se que al escuchar la voz de Ryan te sacaría una sonrisa - musita

- Gracias, no sabes cuanto me hace falta un abrazo en este momento pero ahora me siento mejor.

- Te quiero - dice antes de colgarse, miro al vacío por un instante.

- Tu debes ser la nueva dueña de Bastille - al escuchar la voz de Rocío, toda la calma que tenia hace unos minutos se desvanece.

- Quien sabe - ella me mira, todo lo que me hizo aparece en mi mente.

- Si no eres tu es la pelirroja o la castaña - dice señalando a Stella y Abby.

- No es de tu importancia -digo con calma.

- Calma solo quería saber quién es la nueva dueña de Bastille.

- En unos minutos lo sabrás es una sorpresa querida - digo divertida.

- ¿Qué es tan gracioso?.

- Pues que el pasado regresa siempre.- la miro con superioridad sus ojos reflejan confusión.

- Qué quieres decirme

- Esta noche su peor pesadilla regresa- dicho eso me alejo, Hay Rocío si supieras todo lo que te tengo preparado no solo a ti si no a todos.

Falta cinco minutos para que descubran quién está detrás de esta máscara, y me encontraré con todos ellos, espere tantos años para ver sus rostros y hacerles pagar cada lagrima que derrame.

- Muy buenas noches con todos como lo prometido es deuda es hora de presentar a la futura dueña de esta prestigiosa Empresa lastima no soy yo si no ella - dice Stella señalando nuestra mesa, Abby me sonríe.

- vamos es hora - susurra, por otro lado Travis me extiende la mano.

- Es hora de brillar Lucía - Musita Travis al dejarme junto a Stella.

Dedicado a todos las personas que leen esta hermosa historia una disculpa por no publicar però mi país estaba en una mala situación así en serio gracias por la espera.

Dedicado a las personas que lucharon por nuestros derechos en el Paro Nacional Ecuador.