《1 3》

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-Bien, aquí estamos -la voz simpática del muchacho que no guiaba me quitó de mis pensamientos-. Acomoda tus obras como quieras, en unos instantes abriremos las puertas para la gente. -asentí a sus palabras al mismo tiempo que dejaba mis cuadros sobre la mesa del estante. El amigable chico dijo un par de cosas más a las cuales no presté atención debido a que mi querida cabeza estaba extrañada por otra cosa.

¿A qué se refería con ayudante?

Me pregunté esto una y otra vez hasta que me cansé de pensar, y me molesté por no entender las cosas. O sea, yo casi nunca entiendo nada, pero ahora me molestaba porque estoy en una ocasión importante, en un lugar lleno de personas que solo ayudan a que esté aún más nervioso de lo que imaginé. Cualquier fallo que pudiera cometer me puede llevar a una posible vergonzosa escena donde soy yo el protagonista y los secundarios se ríen de mí mientras me deshago en pena y me derrito de la vergüenza.

¿Se nota mucho que estoy todavía muy nervioso? Chan me dijo una vez que cuando me encuentro así suelo exagerar las cosas y decir palabras dramáticas como si fuera a morir.

¡Pero es que podría morir aquí en cualquier instante! Esto está siendo muy difícil y ni siquiera empezó.

-Y si necesitas ayuda, ya sabes dónde encontrarme -Parpadeé unas cuantas veces y asentí, cayendo en cuenta de que no había escuchado nada de lo que el chico dijo-. Perfecto, pásala bien, hasta luego. -Su amable sonrisa me quitó un dos por ciento de nerviosismo, y le saludé moviendo mi mano igualmente con las comisuras levantadas. Que agradable sujeto.

Di media vuelta con intensiones de comentarle a HyunJin sobre eso y me topé con éste viendo al muchacho fijamente con los ojos entre cerrados. No sabía descifrar qué expresaba su rostro, solo me llamaba la atención de que no fuera el mismo de siempre.

Cuando abrí mi boca para decir algo el contrario dio vuelta su cuerpo y fue a dejar los cuadros en la mesa y algunos debajo ésta, acompañado de, ahora, la expresión indiferente. O tal vez más seria. O pensativa.

Es tan difícil entender su cara, maldita sea. Seguro debe ser algo de la gente guapa.

Lo vi acomodar mis cuadros. Tomaba uno, lo cambiaba con otro o lo dejaba en un lugar diferente. Se quedaba en frente viendo las obras y volvía a acomodarlas, llevaba algunas hacia atrás y traía al frente las pequeñas. Era divertido, parecía estar demasiado concentrado y que realmente quisiera que estuvieran perfecto.

-Así está bien -le dije, deteniendo su mano que buscaba tomar otro cuadro. Le regalé una pequeña sonrisa antes de alejarme para ir detrás del estante-. Ven. -le hice una seña con la mano, indicando que imitara mi acción.

¿De verdad ver a HyunJin acomodando los cuadros de forma adorable fue suficiente para quitarte el diez por ciento de tu nerviosismo, Lee?

Sí, absolutamente.

Me agaché para revisar los cuadros que se encontraban debajo de la mesa hasta que una pregunta me dejó la cabeza en blanco.

-¿No te diste cuenta como te insinuaba ése tipo?

¿Ése tipo? ¿quién?

Me levanté viéndolo desconcertado y giré mi rostro y busqué a "ése tipo" con la mirada. Veía solo a los demás invitados en sus puestos, acomodándose o simplemente charlando. Entonces me giré otra vez hacia HyunJin con la mirada confundida.

-¿Tú realmente no lo entiendes? - soltó luego de resoplar, a lo que solo negué con lentitud, intentando comprender a lo que se refería- El chico, el que nos guió hacia aquí y se despidió de ti hace unos minutos. Ése.

Recalculando quedó mi cerebro ante sus palabras y mi boca soltó un pequeño 'ah' inconsciente. Pronto caí en cuenta a lo que se refería y mi cara empezó a arder levemente; y ante esto, llevé mis manos a ella para intentar cubrirla.

Volví a ver al menor, listo para reclamar explicaciones, hasta que la voz de una mujer sonó en los megáfonos que se encontraban colgados en los faroles y otros lugares.

-Oh, ya va a iniciar. -Y el maldito se atrevió a cambiar de tema, no puede ser.

-"y esperamos que se diviertan mucho" -una última frase y el mensaje acabó, comenzando a sonar música de donde anteriormente la voz había hablado.

En un parpadeo, en los puestos de en frente y los que se encontraban a mi lado comenzaron a aparecer visitantes y gente que no participaba en el evento. Con las manos empezando a sudar, respiré hondo al sentir mi corazón latir. Volvió mi nerviosismo por estar aquí, habiendo sido elegido entre los mejores artistas de la ciudad.

Esto es un gran logro para mí, ahora que me doy cuenta.

-Este cuadro es ideal para decorar habitaciones pequeñas, no ocupa mucho lugar además de que es muy bonito -escuché a Hwang hablar y me di vuelta, viéndolo ofrecerle uno de mis trabajos que se encontraba en frente a unas muchachas que miraban curiosas-. ¿Que les parece?

Ambas chicas se miraron y murmuraron algo entre ellas, volteando luego de reírse tal vez de sus comentarios. Y yo solo podía observar al menor que portaba una sonrisa amable y hablaba de mis obras utilizando palabras que podrían convencer a cualquiera de comprarlas.

-Me llevaré éste -sentenció una de las jóvenes, sacando de su mochila su billetera, buscando el dinero-, y éste, por favor. -agregó, sonriendole a HyunJin.

Desde que las vi están con esa sonrisa boba, ¿qué necesidad de verlo así?

Entonces algo cruzó por mi cabeza. Mi compañero acaba de vender no uno, sino dos cuadros a unas muchachas que probablemente solo pasaban a mirar. Y si logra hacer que el próximo cliente compre alguno, ¡sería un genio vendiendo! Porque ya he estado en otras exposiciones y es bastante complicado lograr que la gente compre tu mercancía.

Tener a HyunJin conmigo no solo me ayuda a no estar tan nervioso, sino que también puede garantizarme volver a casa con pocas cosas. Tal vez no ha sido tan mala idea traerlo.

Bueno... hoy será una larga mañana.

[🍬]

Tal vez los próximos capítulos sean un poco más cortos, me esforzaré por traer nuevas actualizaciones. Gracias por esperarme.

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