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Marinette

Estaba cansada de lo injusto que era esto. Llevaba años teniendo una doble vida, mintiendole a los que me rodean y formando estrategias para inventar una personalidad que todos fuesen capaces de de creer. No podía ser yo misma ni con mis padres ni con mi mejor amiga.

Todo era un secreto, en unos días cumplía dieciocho años y al parecer todo seguiría igual. Mis responsabilidades habían aumentado tanto que ya no podía ser la presidenta de la clase, siendo Alya mi sucesora. Solía entrenar con el maestro Fu para ser guardiana, pero él había sugerido que nos diéramos un descanso.

—¿Entonces sí lo harás?

Tikki flotó a mi lado preocupada.

—Sí, siempre tengo que acatar todo, así no sea de mi agrado, y no es que esté renegando de mis labores como Ladybug, pero por una ocasión me gustaría hacer algo como una chica normal y olvidarme de mi doble identidad — dije subiendo hasta mi pequeño balcón.

—Pero tus padr...

—¡Tikki, transformame!

Sin embargo, no la dejé completar lo que estaba diciendo, estaba consciente de que mis padres me castigaron y que no era la primera vez que me escapaba de casa, pero si era la primera vez que los desobedecia por un acto personal y egoísta como era irme a una fogata de universitarios.

—¡Marinette! — Luka se levantó de una piedra que estaba alrededor de la fogata.

—Hola — sonreí un poco cohibida por el ambiente con el que me había topado.

—¿Llegaste sola? — preguntó preocupado —. Mari, me hubieras avisado y yo con gusto te una a recoger, no quiero que te suceda algo malo por venir tu sola a estar horas — Luka acarició mis hombros.

—N-No... Bueno sí, pero no sucedió nada malo — respondí.

—No lo vuelvas a hacer por favor — me miro preocupado y triste.

—Lo prometo.

— Ven, vamos a sentarnos — me encaminó hasta el grupo de chicos que se reían mientras escuchaban una fuerte música que no era de mi agrado —. Tienes frío?

Luka analizó mi atuendo y mi forma temblorosa de andar, entonces asumió que mi short de randa junto con mi blusa de tirantes estaba causandome problemas con el clima y pudo ser cierto, además que con el miedo que sentía me estaba arrepintiendo de haber venido.

—U-Un poco... Con la fogata me calentaré— contesté, pero Luka colocó su chaqueta sobre mis hombros y yo sonreí conmovida.

—Conservala esta noche — sonrió —. No quiero que te enfermes.

—A quien trajiste Luka? — logramos escuchar a una de las chicas que parecía ser la novia del uno de los amigos de Luka.

—OH, trajiste a otra vez a Marinette — respondió otro chico que ya no recordaba si lo había visto en la fiesta anterior.

— Sí — sonrió Luka y cruzó un brazo por mi cintura encaminandome hasta la piedra donde él se había sentado antes.

✵Por ella Otra vez✵[Marichat / Lukanette]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora