Ahora Eres Mía

El Castigo De Snape

Hermione nunca llegaba tarde al Gran comedor desde que paso lo del trol en primer año, sin duda estaba actuando más rara de lo que ya era, o eso era lo que pensaba Ron, se sentó junto a sus amigos mientras la miraban extrañados de su tardanza.

Un rato más tarde, apareció Malfoy, que se sentó junto con Crabbe, Goyle, Theo y Pansy.

-¿Dónde estabas Draquito?- pregunto Pansy mientras lo miraba- el castigo de Snape ha sido muy injusto, fue la sangre sucia la que arruino la poción que teníais que hacer.

Al oír aquella palabra con la que se dirigía Pansy a su castaña, le dieron ganas de lanzarla lejos de la mesa de Slytherin con un "Depulso", pero se tuvo que contener, pues la relación que mantenía con la Gryffindor era un secreto.

En algunas ocasiones durante la cena, Hermione y Draco se miraban disimuladamente, el rubio sabia lo mucho que a la leona le gustaba la forma en como mordía la manzana, así que eso mismo hizo, cogió una manzana y la mordió mientras miraba a aquellos ojos chocolate, que no le quitaba la vista mientras se mordía el labio.

"Otra vez mordiéndose el labio..."- pensó el Slytherin, quien con disimulo le guiño un ojo.

Hermione por su parte solo soltó una risa mientras agachaba la cabeza.

-¿Estas bien Hermione?- pregunto un Ron mientras colocaba su mano en la espalda de la chica- parece que tienes fiebre, estas roja.

Harry la miraba preocupado.

-Ron tiene razón Hermione, deberías descansar, después de todo, Snape te castigo por culpa de Malfoy- decía Harry mientras se giraba para mirar al rubio, quien le hizo una mueca de burla- es un imbécil.

Mientras tanto, el rubio de ojos grises no podía dejar de darle vueltas a la cabeza, Hermione, una Gryffindor, una Sangre sucia, había logrado desesperarlo hace apenas unas horas.

"Flashback"

-Hermione... no me hagas esto...-pidió Draco mientras era torturado por aquella leona- para...

Hermione solo se reía, pues según ella le explico, no estaba haciendo nada, solamente estaba cogiendo los frascos que Snape le pidió llevar junto con Draco, lo que le ocurría al rubio es que a veces Hermione se tenía que subir a una escalera para según ella coger los botes que estuvieran más arriba.

"Ya, claro, y una mierda..."- pensó el rubio después de oír aquella escusa malísima.

Maldecía a Snape por castigarlo junto a la castaña, quien por no haberle hecho caso, hizo explotar el caldero con la poción, Hermione era muy terca, no quería admitir que Draco era mejor en pociones y por eso le tuvo que llevar la contraria en uno de los ingredientes.

-Puedes usar el hechizo Accio o Wingardium Leviosa para cogerlos desde abajo sabes...- tragaba saliva con fuerza, mientras no podía evitar echar un vistazo por debajo de la falda mientras ella estaba subida a las escaleras buscando los frascos.

Hermione notaba un par de ojos gélidos clavados en ella, lo que hizo que se empezase a sentir húmeda, pues sabía exactamente donde estaban esos ojos ahora mismo.

-Malfoy, ¿me están mirando debajo de la falda?- preguntaba mientras revisaba los botes y leía la descripción en el libro.

Draco soltó una pequeña risa, le había descubierto pero él seguía mirando.

-Claro que no Granger...- decía mientras se deleitaba la vista con aquellas nalgas que veía desde abajo- ¿Cómo se te ocurre semejante perversidad?

La castaña solo bufo con una sonrisa mientras iba bajando un poco más, pues la pócima estaba más abajo.

Draco por su parte solo se pasaba la lengua por sus labios, que se habían quedado secos, se subió a la escalera quedándose detrás de ella, la cual se asustó.

-Draco, bájate, te puedes caer- Hermione estaba contra la escalera y el pecho de Malfoy- es peligroso... baja, ya.- ordeno la castaña, pues temía que por un más movimiento Draco se cayese.

Por parte del rubio, solo hubo un silencio mientras pegaba su cuerpo al de ella.

-Debería castigarte por ser así de pervertida- acariciaba los muslos de la castaña debajo de su falda- y más aún cuando sabes que me encantan estas braguitas de encaje verdes- le comentaba cerca del oído mientras deslizaba su mano por ellas- se notan muy frágiles... ¿Qué pasaría si tirase con fuerza?- las agarraba y tiraba poco a poco.

Hermione que lo noto agarro la mano de Draco que estaba tirando de sus braguitas y lo miro a los ojos.

-Ni-Se-Te-Ocurra...- sujetaba con fuerza la mano del rubio mientras lo miraba a los ojos.

En ese momento, que Draco no aparto la vista de los ojos chocolate de Hermione, soltó su braguitas y dirigió su mano hacia su intimidad, pero volvía a ser detenido por ella.

-Hermione...- se acercaba a sus labios- siempre me estas provocando, siempre...

La leona solo pudo embozar una sonrisa, le gustaba ver a Draco así.

-Lo siento mi serpiente- rozo su nariz con la de Draco- tenemos que ir a ver a Snape, ya encontré las pociones que nos mandó a buscar gracias a ti.

El rubio se separó de ella bajando las escaleras poco a poco, para luego sujetarla a ella por la cintura y bajarla sin que tuviera que ver como su maravilloso trasero se contoneaba a cada escalón bajado.

Hermione le agradeció la ayuda, cogió las pociones y el libro.

-Bien, vámonos- comentaba Draco mientras salían de la sala donde Snape tenía guardadas las pociones.

-Si- contesto la castaña mientras salían.

Mientras caminaban compartían algunas risas, pero pronto tendrían que disimular llevarse mal de nuevo, Hermione y Draco se disculparon con Snape quien rebajo 10 puntos a Gryffindor gracias a que Hermione no quiso seguir los consejos de Draco, mientras que a él le daban 10 puntos para la casa de Slytherin.

Después de la charla, la castaña estaba molesta.

-Hermione...- hablo molesto Draco- no puedes estar enfadada conmigo porque le hayan quitado puntos a tu casa, te recuerdo que fue culpa tuya por no aceptar que yo tenía razón en la poción- se quejaba del comportamiento, Hermione seguía sin hablarle, hasta que el rubio se cansó de la actitud infantil de Hermione- ¿Sabes? Enfádate, me da igual.

La castaña se detuvo.

-Lo siento Draco- se disculpaba arrepentida- tenías razón y yo aun así lo he fastidiado, casi... casi causo que salgas herido cuando exploto el caldero...

El rubio se giró, agarro el rostro de Hermione y junto sus labios con los de ella.

-Quiero que te olvides de ese accidente, no pasó nada grabe gracias a Merlín- la volvió a besar.

Se dirigieron al Gran Comedor cogidos de la mano, pero al llegar a la entrada tuvieron que soltarse.

-Lo de siempre ¿no?- miro a Draco- primero entro yo y unos minutos después tú.

El rubio solo asintió.

Hermione le dio un beso rápido con un te quiero de seguido, y paso al Gran Comedor.

Por otra parte el rubio estaba empezando a cansarse de estar fingiendo siempre que se odiaban, la amaba con todo su corazón, ella lo sabía y aun así...

"Fin FlashBack"