26-.Noche perfecta...

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NARRA FRANCISCO....

Ya casi acababa mi café, pero Estefania aun tenia la mitad del suyo. Todo era silencio, un lindo y raro silencio, hasta que Estefania pregunto algo que al principio no entendí, que al principio fue raro, pero después pude comprender y saber a que se refería.

-¿Como eres en realidad?-pregunta Estefania-.

-¿A que te refieres?-pregunto confundido-.

-¿Que es lo que te gusta de verdad?, ¿que piensas?, ¿que quieres en la vida?, no lo se, ¿quien eres?

-Soy como soy. No estoy fingiendo ser diferente con nadie... A veces soy serio, frió, otras veces, no. Depende de quien seas y como seas para que me conozcas o no.

-¿A que te refieres?

-Con los cuerpos huecos, de tus amigos-digo refiriéndome a Carmen, Ana, Eduardo y su circulo de populares-Soy seco, no me interesa que sepan algo de mi, y a ellos no les importa tampoco saber algo de mi.

-Oh, vale.

-¿Por que?, ¿acaso tu eres diferente? Me refiero, ¿finges ser alguien?

-Tu y yo sabemos bien la respuesta de esa pregunta-dice Estefania con la mirada vacía-.

-¿Y por que lo haces?, ¿por que finges?

-No lo se, es que... Durante toda mi vida me enseñaron que debía ser única, linda, adorable, perfecta, y toda mi vida intente ser eso. Inteste ser especial por tanto tiempo que ahora ya no se quien soy, no se que me gusta, que no me gusta. Lo único que se es que esta no soy yo y no quiero ser lo.

-Bueno, ahora sabes que no quieres ser. Solo te falta saber que, o quien quieres ser.

-Ese es el problema, quiero ser yo, pero no se como ser lo.

-Muy bien, entonces hay que hacer algo.

Le di un gran sorbo a mi café, busque dinero para pagarlo, lo deje en la mesa, me levante y me lleve a Estefania de ahí.

Salimos y la guié hasta su coche.

-Hay que conseguirte un estilo, un estilo que te guste, algo con lo que te sientas cómoda-dije mientras entraba al coche-.

-Bien, suena bien. Hay un lugar en donde Carmen, Ana y yo siempre íbamos para conseguir nueva ropa, a ellas les encantaba ese lugar. Vamos.

Estefania iba a comenzar a conducir pero yo la detuve tomándola de el brazo.

-Dijiste ''a ellas les encantaba ese lugar'', quiero un lugar que a ti te encante.

-Es que no conozco ninguno, e pasado la mayor parte de mi vida con ellas.

-Bueno, entonces vamos al centro de tienda en tienda. Tengo todo el tiempo de hoy, y también mañana, si quieres.

Estefania y yo pasamos mucho tiempo en el centro, de tienda en tienda, de tienda en tienda. Probando nuevo estilo para ella, nueva ropa, zapatos, maquillaje, un cambio total, o al menos eso quería Estefania.

Regrese a mi casa a las ocho de la noche, no había nadie y estaba hablando por Facebook con Azael. Azael decidió ir a mi casa, al principio solo decía que no y que era una mala idea, pero Azael me intentaba convencer diciéndome que entraría por mi ventana, solo se necesitaba subir al árbol que estaba cerca de ella y con cuidado entrar, también decía que tal vez no llegarían Daniela ni Armando, y que no importaba si mañana no íbamos a la preparatoria. Al final termine cediendo y le dije que si, que si llegara a mi casa.

No tardo mucho y llego Azael, se acostó a mi lado y estábamos escuchando música desde su celular.

Todo esta tranquilo, relajado, perfecto, hermoso, es simplemente uno de los mejores momentos, porque a pesar de que no hacemos nada divertido ni emocionante estoy junto a el, y eso, eso es lo mejor que puede hacer.

Azael comenzó a acariciar mi mejilla con su mano mientras me veía a los ojos.

-Te amo-susurro suavemente Azael, tan suave y bajo que casi no se escucho nada-.

-También yo te amo-conteste cerrando los ojos y dejándome llevar por el perfecto momento-.

Al final nos terminamos quedando dormidos, y no, no llegaron Daniela ni Armando, ni tampoco nos preocupamos de ir a la preparatoria.

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-Ya es Octubre-dice Azael buscando comida en mi refrigerador-.

-Lo se, este es mi mes favorito.

-¿Encerio?, genial, también el mio.

-¿Que es lo que te gusta de el mes?

-No lo se, simplemente me gusta. Como tu me gustas, no, mentira, tu me gustas mas-dice Azael sonriendo y cerrando el refrigerador-.

El celular de Azael comenzó a sonar, yo me salí de la cocina y me fui a la sala, me senté en el silo, encendí el televisor y espere a que Azael dejara de hablar por teléfono. Poco tiempo el va a la sala.

-Me tengo que ir-dice Azael-.

-Esta bien....

-Adiós.

Azael sale de mi casa y yo me quedo en el sillón mirando la televisión.

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Las semanas pasaron rápido, yo y Azael continuábamos hablando, nos quedábamos hasta las dos de la mañana hablando, y cuando conseguíamos quedarnos despiertos mas tiempo lo utilizábamos para hablar. Nos dábamos las buenas noches y los buenos días, nos decíamos que nos queríamos y que nos extrañabamos, con Azael todo iba de mejor en mejor. Estefania continuo intentando nuevos estilos, paso de estilo hippie a un estilo emo, después se volvió hipster, al final intento un estilo rockero, había usado tantos estilos que su armario parecía una tienda de disfraces. Y a Daniela y a Armando casi no los veía, llegaban a casa por las noches, normalmente llegaban cuatro o tres veces a la casa, y siempre llegaban borrachos, intentaba no toparme a ninguno de ellos así que a veces estaba en casa de Azael, o en mi habitación.

Henry, Patricia y Juana seguían con sus vidas normales, lo único que cambio es que esta vez ayudaban a Estefania a encontrar un nuevo estilo. A Patrick ya casi no lo veía, era como ver a Daniela o a Armando, la diferencia es que el no llegaba por las noches a mi casa y el no estaba borracho, el llegaba a mi casa por las tardes, a veces, y otras veces solo me avisaba que no podría llegar. Cada vez extrañaba verlo mas tiempo, cada vez extrañaba mas a mi mejor amigo.

Estefania también se volvió mi mejor amiga, resulto que, si dejaba de lado la importancia de lo que decían los demás era una chica libre, expresiva, una chica linda...

Un mundo suicida.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora