Capitulo 5

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Narra Natalia 

Ya habían pasado dos semanas de esa noche, no he echo mucho salvo componer, trabajar y quedar con todos que claramente Alba iba y así poco a poco la e ido conociendo más. Ella es de Elche, Valencia, ha venido a Madrid a estudiar Bellas Artes es su sueño desde siempre, tiene una hermana llamada Marina que por lo que habla de ella debe de ser igual de genial que ella. Tiene 21 años y tiene novio, sí lo tiene pero esta en Valencia. Nos contó que a él le costo mucho mentalizarse y que esta enfadado con ella por según él abandonarlo. En mi opinión no entiendo porque se enfada, es su sueño hay que respetarlo. La verdad que durante todo estos días e ido enamorándome más y más de ella hasta tal punto que es en el que estoy ahora que me da vergüenza hablar o estar con ella a solas por el echo de hacer algo gilipollas que nunca falta. 

Hoy es 21 de octubre, lunes por lo que e tenido que ir a trabajar, os preguntareis que hace una chica de 20 años trabajando y no estudiando. Bueno yo vengo de una familia bastante normal con dos hermanos menores, una hermana y un hermano, al cumplir los 18 mis padres me dejaron decidir que hacer con mi vida ya que era mi decisión. Empece la carrera de Audiovisuales, ahí conocí a Miki pero la deje, mi sueño es la música y mis padres nunca me lo han impedido. Por eso trabajo, aparte de mantenerme por mi misma y no por mis padres. Espero algún día sacar un disco o simplemente grabar una canción en un estudio profesional. 

Son las 8 de la mañana cuando salgo de casa con Marta, la llevo a la Universidad en moto, saludo al resto de mis amigos y me voy para no llegar tarde al bar. Al llegar encuentro a Damion en la puerta esperando, me saluda con el choque de puños como siempre y esperamos unos 5 minutos a que venga Manu. En esos minutos de espera hablamos un poco de todo, la bronca con África ya esta solucionada, el tema de Alba le menciona y me pregunta que tal. No se si mentirle o decirle la verdad, opto por la segunda aunque no me suelo abrir pero él me da confianza.

- Pues como quieres que este tío, tiene novio joder - digo y por lo visto por mis ojos aparecen lagrimas ya que las noto caer por mis mejillas. Damion me abraza, dejando que mis lagrimas mojen su chaqueta. 

- Nati tienes que saber que no significa nada que tenga novio puede que le gustes -  asiento a sus palabras sabiendo que no tendrá razón, me seco las lagrimas y justo llega Manu a abrir. 

Nos cuenta que se a dormido por eso llega tarde, Damion y yo nos echamos una mirada, nos reímos sin él entender nada. Los dos pensamos que a pasado la noche con Noe y nuestras sospechas se aclaran cuando una Noemi con prisa entra al bar para darle un beso a Manu antes de abrir la tienda. 

- Claro te has dormido como no - dice Damion con risas y yo le sigo. Manu se pone rojo y se va al almacén. 

La mañana se paso rápida, sin incidentes. Sobre las 5 me llego un mensaje de Marta diciendo que iban a tomar algo y así nos veíamos. Se lo comente a Damion y asintió con la cabeza y seguimos trabajando. Nosotros somos solo 4 camareros entonces hoy descansaban Sara y Pol, mañana tendría el día libre y el miércoles solo vengo por la mañana ya que de tarde entrar los otros. Así nos repartimos mejor pero el día aunque parezca aburrido no lo es, te entretienes hablando con tu compañero o con los clientes sobre todo los señores y señoras mayores que vienen siempre. Ya se saben hasta mi cumpleaños, justo ahora estoy poniendo un café a Elvira, una  señora de 70 años que se conserva muy bien. 

- Hija te vi el sábado estuviste genial - me dice y me da una sonrisa. Bebe del café extra caliente que le acabo de dejar enfrente suya. 

La sonrió en respuesta y me voy corriendo porque Manu me acaba de llamar. La pido disculpas diciéndola que el deber me llama y empiezo a caminar a la barra. Cuando llego me encuentro a mi jefe intentando poner una cerveza. 

- Natalia trae un barril de cerveza anda que se a acabado y esto ya no echa más - me pide bueno más bien me ordena con seriedad pero veo que es porque su padre estaba en la barra. 

- Vale voy - digo ya yendo al almacén. Manu y su padre nunca se han llevado bien, mi jefe quería ser músico pero su padre se negó así que fundo un bar que según su progenitor daba dinero. Su padre viene cada semana un día, solo uno a tomar algo y a criticar a los clientes. El primer día que trabaje aquí y me vio ya me dijo que como Manu me dejaba trabajar con tantos tatuajes que parecía una yonki. No me sorprendió lo más mínimo así que ahora cuando viene su padre nos trata más como sus empleados que como sus amigos. 

Al sacar el barril y cargarlo miro a la puerta porque noto corriente y me encuentro a Alba que me sonríe cuando me ve. Le correspondo a la sonrisa y antes de que me quede embobada mirándola llevo el barril a Manu, quien me lo agradece con una sonrisa y me pide que atienda a la chica que acaba de entrar. Ya se porque lo a echo, el segundo día que vinieron me oyó la conversación con Damion e incluso me dio consejo sobre que hacer, así que le sonrió y asiento. 

Cada vez que daba un paso más hacía la mesa me noto más nerviosa, me quedo de frente a ella y la sonrió.

- Hola, que va a tomar? - bien no me e trabado, celebro en mi interior

- Natalia no me hables de usted anda y ponme una cerveza porfi - me dijo riendo, me reí con ella y fui a por la cerveza. En la barra estaban Damion y Manu, me saludaron y me felicitaron por no haberme puesto muy nerviosa. 

- Venga Nati a por ella - oí que decía Damion, me gire y le saque el dedo pero después le tire un beso, el fingió cogerlo y nos reímos los dos. Deje la cerveza en frente de ella. 

- Gracias - me dijo con su dulce voz - Por cierto sabes cuando van a venir estos ? - me dijo antes de que me fuera. 

- Pues ni idea, Marta me dijo hace una media hora que venían - respondí y le volví a sonreír. - Y ahora si me disculpa la señorita me voy que tengo que trabajar aunque me encantaría quedarme a charlar - dije mientras miraba a Alba beber la cerveza. 

- Cuando se acaba tu turno? - pregunto y justo pasaba Manu que había ido a despedir a su padre a la puerta. 

- En 10 minutos tiene descanso - respondió, le mire sin entender y se fue. 

- Bueno cuando eso vente que me a dicho la Mari que tardara 20 minutos que han tenido un problema - me dijo mientras sacaba la cartera para pagarla cerveza pero fui rápida. 

- No, invita la casa - le dije, estuvimos discutiendo pero Manu me llamo así que me fui a ver que quería. Cuando llegue me dijo que ya tenia el supuesto descanso y que aprovechara para hablar con ella. Así que eso hice, me senté con ella aunque estaba muy nerviosa. 




Tus ojosWhere stories live. Discover now