Un Fictober Con Mucha Tinta (KnB)

Día 25: Collar

Pareja: KagaAo. 

.

Desde su posición, sentía una molesta que no podía esconderla. El ver a Kagami y a Himuro, quién supuestamente es su hermano y que ambos portaran esas cadenas con anillos que demostraban dicha hermandad que decían tener, lo molestaba de sobremanera. 

Más bien se sentía celoso, aunque eso no pensaba mostrárselo a su estúpido alfa, aunque ya se estaba molestando de más de verlo últimamente con Himuro Tatsuya que, aunque fuera otro alfa, no le caía muy bien la cercanía que tenía con el pelirrojo. 

—¿A qué viene esa cara? —preguntó Taiga a su omega cuando llegaron a casa al verlo con el ceño fruncido más que de costumbre. 

—¿Mi cara? Es la de siempre —respondió, yendo hasta la cocina a buscar algo de comida. Llevaba una semana sintiéndose con hambre a todas horas, por lo que se sacó del congelador un bote de helado de vainilla. 

—¿Y ahora? ¿Por qué más antipático que de costumbre? Además, puedo notar en tu aroma cómo estás molesto por algo, que te inquieta —lo atrajo hasta él para abrazarlo por la cintura—. A ver, cuéntame, ¿qué es lo que te pasa? 

—Esto me pasa —tomó con su mano derecha la cadena dónde colgaba el anillo en discordia—. Me molesta que te lleves tan bien con Himuro, que si Bro por aquí, Bro por allá, y sobre todo, que tengáis esta cosa en común, ni que fuerais novios o algo —dijo de corrida, ya molesto con la situación, y ya que su estúpido alfa había preguntado, ya por fin había estallado. 

Las extrañas cejas de Kagami se elevaron, mirándolo con una seriedad forzada hasta que no pudo aguantar más y empezó a reírse a carcajadas. Eso terminó de enfurecer al moreno más aún. 

—¿Por qué mierdas te ríes? ¿Te hace gracia? 

—Es que, ¿en serio estás celoso de Tatsuya? Pero si es cómo mi hermano, así es cómo nos vemos. Además, te recuerdo que está saliendo con Izuki-senpai. 

—Ya lo sé, pero ¿por qué tenéis que llevar ese anillo como si fuera una ofrenda de amor mutuo? —otra carcajada por parte del pelirrojo desesperó más aún a Daiki—. ¡Que no te rías, alfa desgraciado! 

—Es que como te dije, sólo somos casi hermanos, y tenemos este anillo en común porque es algo importante para nosotros, fue cuando nos conocimos en América, nos hicimos amigos y a la vez rivales en el básket —explicó abrazando más fuerte a su omega. 

—¡Pero me molesta! Conmigo no tienes nada en común —refunfuñó haciendo un lindo puchero que enterneció a Taiga. 

—Creo yo que sí tenemos algo en común, o al menos sí lo tendremos —los orbes azules lo miraron con curiosidad, porque no sabía a lo que se refería su pareja—. Y eso sí que es lo más importante y mejor del mundo. 

—El qué, ¿la marca? 

—¿Te estás haciendo el que no entiendes porque te he estropeado la sorpresa o es que de verdad no entiendes lo que estoy hablando? 

—¿Qué sorpresa, qué dices? —otra cucharada de helado de vainilla. 

—¿En serio no te has dado cuenta? —señaló la mitad del helado que quedaba en el recipiente—. ¿Por qué estás comiendo ese helado? 

—Pues porque se me ha apetecido —se silenció de golpe, y Taiga lo miró sonriendo—. Espera... no, no puede ser... —fue corriendo a observar su calendario, dándose cuenta que su celo debería haberle llegado hace una semana—. Es... es...

—Vamos a tener un cachorro, dime tú si eso no es más importante que un simple collar. Me había dado cuenta hacía unos días, ya que tu aroma ahora está mezclado y no precisamente con el mío, pero no comenté nada porque estaba esperando a que me lo dijeras a modo de sorpresa. 

—Yo... yo no me había dado cuenta, si ni siquiera me había percatado que mi celo no me llegó —confesó aún sorprendido por tal revelación. 

Sí, eso sin duda era lo mejor del mundo, y ahora sí que iba a estar unido a Kagami no sólo por la marca que portaba en su cuello, sino también porque una personita que crecía en su interior era de los dos. 

Al diablo con el collar que llevaban Taiga y Himuro, ¡era un hijo! Iban a tener un hijo, y no podía estar más feliz. 

Eso sí, cuando su hijo Taiki llegó al mundo, Kagami se presentó con una pequeña cadenita con el nombre de este.