Fictober 2019 ~Bungou Stray Dogs~

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Esta es la historia de un antiguo amor, una promesa que jamás se cumplió, un sentimiento que murio con el paso de los años y un corazón roto que jamás sano.

Jamás olvidaría el día que lo conoció, sus vidas no se unieron esa noche de nieve de hace seis años como el pelirrojo creía, no fue casualidad que se encontraran en esa parada de autobús, todo fue con un propósito que lo llevaría a donde estaba ahora.

Siete años antes

El conflicto cabeza de dragón provocó un verdadero caos social en Yokohama, había escuchado los rumores que giraban en torno al hombre de cabellos blanco que poseía una habilidad que provocaba destrucción a su paso, "La habitación de Draconia" ¿Que implicaba? ¿Que buscaba? eran las interrogantes que deambulaban en su cabeza decidiendo así ver todo con sus propios ojos.

Su vida cambio después de eso, sus planes fueron reemplazados, su objetivo estaba más claro que nunca llegando a la firme conclusión de que el problema de todos los males que azotaban a la humanidad eran los usuarios de habilidad.

Pero eso no fue lo único que se llevó de ese evento catastrófico, ese día lo conoció y se aseguró de investigar todo sobre él.

Su nombre era Nakahara Chuuya, tenía 16 años y fue el antiguo líder de un grupo criminal de adolecentes denominado Sheep y que posteriormente se unió a la Mafia Portuaria; era alguien temperamental, alguien fuerte e impulsivo, producto de una experimentación humana, una víctima más del Gobierno Federal.

En un principio solamente quería utilizarlo, moldear su mente para convertirlo en un arma, una muñeca de porcelana sin vida que solo obedeciera sus órdenes pero mientras más convivía con el mafioso se daba cuenta que se estaba enamorando.

Pero ¿Realmente era amor?

No, nunca lo fue solo fingió para atraerlo a su red.

Le hizo creer que le importaba, que lo amaba, que era lo más preciado en su vida, con eso logró tener todo para completar la primera fase de su plan pero siempre debe de haber un obstáculo en el proceso y ese era Dazai.

No le quedó más opción que abandonarlo, rompiéndole el corazón a sabiendas que eso complicaría todo.

Esa noche solo le dirigió una mirada mientras dormía profundamente en ese cuarto de hotel, acarició su mejilla observando su delgado y pequeño cuerpo desnudo cubierto solo por una ligera sabana blanca así como las delicadas facciones de su rostro, era hermoso pero no iba a admitirlo.

- volveré por ti Chuuya y serás completamente mío -

Esa no fue la última vez que lo vio, aunque mantenia su distancia siempre estuvo atento a sus movimientos y cada paso que daba, solo así los experimentos que llevaría en el futuro funcionarían pero nunca pensó que sería más complejo de lo que parecía.