—Estás exagerando.
—No estoy exagerando, has subido dos kilos. Si sigues sin hacer nada al respecto dile adiós al campeonato. — ChanYeol gruñó luego de escuchar a su entrenador. InSung no se andaba con rodeos cuando se trataba de perfeccionar a su pupilo, y aquello incluía tanto su aspecto y condición física como también la técnica de boxeo.
El alto aceptaba que se había dejado estar solo un poco, comiendo algunas hamburguesas de más que le llevaron a subir dos kilos en menos de una semana. Pero no se arrepentía de nada, quizás luego lo haría, de momento no.
Lo cierto es que el campeonato regional estaba cerca. ChanYeol debía participar en él para ver si catalogaba como el mejor de Seúl para después competir en el nacional y, finalmente, ver si contaba con las aptitudes para representar a su país en el campeonato mundial de boxeo a realizar el próximo año.
Tenía mucho trabajo por delante.
"He subido dos kilos gracias a esas deliciosas hamburguesas. Adivina quién tuvo que añadir una hora más de ejercicios cardiorrespiratorios a la rutina."
Escribió en un texto a BaekHyun, el mayor culpable de su alza de peso. Ambos eran amigos desde la escuela y se consideraban prácticamente familia. La relación que mantenían era muy buena, ambos se entendían en casi todo.
"Valió la pena si ayudaste a tu mejor amigo a salir de la depresión universitaria."
Le devolvió el mensaje el otro, haciendo reír a ChanYeol quien decidió dejar el teléfono a un lado y comenzar con la dura rutina de ese día.
Su jornada había comenzado mal desde que casi atropelló a un universitario esa mañana, el chico le parecía cara conocida, pero ChanYeol se vio distraído con los insultos tan ingeniosos que recibió de parte del moreno y prontamente olvidó aquel incidente para concentrarse en los posibles daños que su vehículo pudo haber tenido.
Debía comenzar a prestar más atención en las calles y dejar de andar tan distraído, no podía darse el lujo de estar metido en un escándalo justo por estas fechas tan importantes.
Porque, aunque la idea no le agradara, era una figura pública y como tal debía mantener precauciones que, a su criterio, eran un dolor en el trasero.
ChanYeol no estaba interesado en la fama, por esa misma razón hablaba con los medios de comunicación cuando era estrictamente necesario y había una amenaza por parte de InSung de por medio. Parte de su desarrollo como deportista era conseguir el apoyo de la gente, esa misma gente que luego lo seguía en sus redes sociales (las cuales visitaba muy escasamente y subía de vez en cuando algún video de sus entrenamientos), hacía aumentar su popularidad y, como consecuencia, diversas marcas se interesaban en su persona y ofrecían su apoyo, el cual siempre era bienvenido.
Para mala suerte suya, InSung en sus tiempos como boxeador había sido muy amigo de los medios de comunicación, como tal, sabía de sobra la importancia de los auspiciadores para un deportista que comenzaba a hacerse reconocido, y por esa misma razón ChanYeol incluso había tenido que participar en sesiones fotográficas individuales e incluso grupales para algunas revistas en las cuales cedía a dar una entrevista.
InSung no daba mucho espacio a negaciones, de todos modos. Se la pasaba repitiendo que además de ser un buen deportista, tenía una cara bonita que debían aprovechar.
El alto tomó la cuerda para comenzar a saltar y así iniciar su pesada rutina que, con las fechas cerca, debía repetir a diario. Eran las ocho de la mañana y un poco más, seguramente no pararía hasta la hora del almuerzo si es que tenía suerte. Era aplicado y bastante comprometido con lo que hacía, amaba boxear y si quería seguir dedicando a ello su vida, debía ser el mejor. Y para ser el mejor debía entrenar duro.
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Don't dream it's over [ChanKai]
FanfictionA pesar de lo que demostraba actualmente, JongIn había tenido un largo y difícil camino para conseguir todo lo que poseía. Su infancia fue difícil dentro del orfanato, mucho más una vez que tuvo que abandonarlo al cumplir la mayoría de edad. ChanYeo...