Capítulo 14

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JongIn despertó a la mañana siguiente sintiendo una punzada de dolor por todo lo acontecido el día anterior. Sin embargo, aquel dolor en su pecho fue rápidamente reemplazado por una sensación cálida cuando se nota abrazado al cuerpo de ChanYeol.

Se sentía tan bien, tan correcto, tan en orden. No puede evitar el reflejo de su mano alzándose para acariciar suavemente la mejilla del boxeador, quien ya estaba despierto desde hace unos minutos y abrió sus ojos para mirar al hermoso moreno que había dormido a su lado. Era un precioso sueño hecho realidad.

ChanYeol le sonrió cuando sus ojos se encontraron, tomando la mano que lo acariciaba para dejar un casto beso en la palma.

—Buenos días, ¿Cómo te sientes?

—Como en un sueño. — Respondió JongIn de inmediato, riendo de forma nerviosa justo después. — ¿Tú me trajiste a la cama? ¿No estoy demasiado pesado?

—Para nada, eres una pluma. — Le corrigió el alto, sin poder aguantarse las ganas que tenía de besarlo.

Y lo hizo. Acercándose lentamente a JongIn, rozó sus narices unos segundos antes de unir sus labios en un beso suave e inocente, un simple toque que hizo el estómago de JongIn alborotarse con cientos de mariposas y al corazón de ChanYeol acelerarse rápidamente.

JongIn se atrevió a profundizar un poco más aquel simple contacto, del modo que no había podido hacer en su primer beso con ChanYeol, dejando que su lengua saliera al encuentro de la impropia y ambas se encontraran casi con timidez, reconociéndose por primera vez con gusto, abrazándose para impedir la lejanía de sus cuerpos.

Al romper con el contacto entre sus labios, ambos se miran con las mejillas teñidas de un leve tono carmesí, sonriéndose con completa sinceridad y cariño pues, pensándolo bien, era el primer beso que compartían estando oficialmente ambos solteros, sin preocupaciones, sin obstáculos que impidieran dar rienda suelta a lo que sentían.

—¿Qué pasará ahora, JongIn? — ChanYeol preguntó con lo que JongIn distinguió un poco de temor, y lo entendía. Después de que lo viera la noche anterior llorando por su quiebre con YiFan, entendía que sintiera dudas respecto al rumbo que tendrían desde ese día en adelante. JongIn no necesitaba pensar demasiado la respuesta que le daría.

—Pasará que... Tendremos una relación. — El moreno habló, sonriendo al mismo tiempo que el alto lo hacía; amplio y radiante.

—¿Una relación? ¿Kim JongIn me está pidiendo que sea su novio? — JongIn rió, soltando una carcajada que a oídos de ChanYeol resultó refrescante. Sin duda quería ver mucho más a éste JongIn risueño en el futuro y no al angustiado que había visto la noche anterior cuando lo llamó.

—Sí, Kim JongIn te está pidiendo que seas su novio. — Le sigue el juego, y ChanYeol lo sorprende con otro beso en los labios, uno más eufórico que el anterior que habían compartido. — ¿Eso es un sí?

—Por supuesto que sí. — El boxeador dice, sin dejar de lado aquella sonrisa que JongIn no le había visto nunca.

—Pero tomemos las cosas con calma, ¿Está bien? Ambos estamos con rupturas muy recientes... Tienes un bebé que viene en camino...

—Entiendo, por supuesto que sí. Todo irá a nuestro tiempo y será maravilloso.

Ambos se sonrieron como parecía que no dejarían de hacer en mucho tiempo y, cuando dejar las responsabilidades de lado se hizo imposible debido a la hora, se despidieron a regañadientes con besos en los labios que fueron eternos y con gusto a poco, pero con la promesa de que habría más de ellos cuando volvieran a verse más tarde ese día.

Don't dream it's over [ChanKai]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora