Capitulo 28

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Habían pasado varias horas y el estado de ebriedad era alto, Haru y Sakura habían comenzando a decir muchas estupideces y varias cosas no se entendían debido a que se mezclaban con risas tontas.

-Tuuuu.-le dijo Sakura.-¿Sabes que se leer el futuro?-le dijo Sakura riéndose.-Se lo puedo leer a cualquier persona.-insistió.
-Claroooo, u mi polla mide 100 centímetros ni te jode.-le dijo Haru.
-Venga va, dime una persona.-volvió a insistir Sakura.
-Yo que se...al Sasuke Uchiha.-dijo tumbándose.
-A ver... en algún momento la empresa de su mejo, irá como el puto culo y la única opción que verán es casarle con la gilipollas de Karin Uzumaki, al año o dos años las cosas ya estarán bien pero los padres dirán que nanay, que no se divorcia, por que haber si el niño de una puta vez sienta la cabeza, después de un largo tiempo de repente un día le dispararan...
-Mira, Saku, antes me hago una orgía con quince tías a que le adivines exactamente el futuro a Sasuke Uchiha, vamos es que eso no se lo cree nadie, mira si eso pasa, si algún día te casas hago un striptease en tu despedida de soltera y te doy mil euros y después hago cualquier cosa que me pidas cualquiera, como si me pides que me folle a una puta planta o que haga cualquier gilipollez la cosa más pervertida que se te puto ocurra, pero como sé que eso no pasará pues estoy tranquilo.-dijo con una sonrisa.

No me lo podía creer, ¿era enserio? ¿Acaso tenía un superpoder y podía leer el futuro?

-¿Esto es una broma, Sakura?-me preguntó Sasuke sorprendido.
-Te juro que estoy igual de sorprendida que tú, ya no me acordaba de eso, estaba borracha.-le dije.

Cogí mi móvil y me metí en contactos, busqué el de Haru y le llamé.

-Sakura tiene que estar durmiendo.-dijo mi madre.
-Que va, este esta despierto.-le dije poniendo la llamada en altavoz.

Hombre, Lady Haruno!-dijo alegremente.-¿A que se debe tu llamada?
-Quiero mi dinero, adivine el futuro de Sasuke Uchiha, me debes mil euros, un striptease y te puedo pedir si quiero que te tires a una planta.-le dije.
-¿Todavía te acuerdas de eso? Pero eso ya ha pasado.-dijo.
-Me da igual, ¿conoces a alguna persona que haya dejado que no me devuelva dinero? Solo a ti, una vez y gracias a mi estas donde estás, te di un maldito millón de euros, la herencia que me dejaron mis padres para que pudieses cumplir tu sueño, ahora has duplicado el millón, por que me des mil euros no te vas a arruinar.-le dije.
-Sabes que siempre recordaré por quien estoy donde estoy, pero...no me los puedes pasar, ahora estamos todos felices, tú con tu Uchiha, yo con mi música.
-Te recuerdo que tengo un maldito vídeo tuyo metiéndote un pepino por el culo y dolor no estabas sintiendo.
-¡Joder, Saku! ¿Pero todavía tienes eso? Es que poniéndolas en esas yo también sé, muchas cosas sobre ti, ¿sabe Tsunade sobre la famosa biblioteca de la perversión? ¡Qué solo lees novelas eróticas!
Yo por lo menos leo!
-Sakura, me la suda si la llamada está en altavoz si me está escuchando tu madre o los Uchiha que por cierto tienen mis respetos, pero ahora mismo estaba tumbado en la cama con una erección enorme, con lo cual como mi querido David está de viaje iba a poner un vídeo porno y me iba a masturbar, y que ahora me llames y me empieces a pedir dinero, pues va a conseguir bajarme la erección, con lo cual, no te voy a pagar.
-Vale, termino en un minuto, te voy a decir dos palabras que te van a bajar la erección y me vas a hacer la transferencia.
-Sorpréndeme, Sakurita.
-"Haru Pepinazo".
-En cinco minutos tienes la transferencia, te quiero enana.

Y tal como esperaba colgó la llamada.
Un verano, Haru bebió demasiado y a las ocho de la mañana se puso en el jardín totalmente desnudo y compuso una canción que la letra era: "Haru pepinazo, mira que pollazo. Nena tú lo quieres es un ofertazo." Y el baile consistía en mover su miembro viril.

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