❤️ El Dragón Enamorado ❤️

Irene y Belserion

Al llegar a la ciudad natal de Irene todo era un caos, fuego, sangre, gente peleando, gente muerta, todo era guerra y destrucción.

Wendy busco a Grandinee peleando contra dos dragones, corrió a su ayuda. Y los dragones no dudaron en atacarla.

Esto molestó a Igneel y Natsu, no dudaron en ir en su ayuda.

-¿Porque atacan a Grandinee? ¿Que les sucede a ustedes dos?-

Preguntaba Igneel a aquellos dos dragones que estában atacando.
Uno era de color violeta con negro y el otro era de color rojo con blanco.

-Ella se ah unido a esos tontos humanos y hasta le ah enseñado a usar magia de dragón. Unos simples humanos no pueden hacer eso.-

-¿Eso es la causa de está guerra? Los humanos son nuestros amigos podemos coexistir en paz, reconsiderenlo.-

Los dragones en vez de escucharlo terminaron por atacarlo. Igneel lo esquivo con facilidad, Wendy ayudaba a Grandinee sanandola, Natsu estaba junto a Igneel, esperando que el dijera que hacer.

Igneel lanzo un ataque hiriendo a uno de estos dragones.

-Ustedes me eligieron como su rey, y como tal les ordenó que terminen con esto o yo mismo les pondré un alto.-

El dragón violeta retrocedió de miedo, mientras el otro se enojó y lanzo otro ataque.

Igneel una vez más lo esquivo y con facilidad lo atacó hiriendolo más.

Grandinee se elevó ya con sus heridas curadas. Intentaba calmar a los dragones que peleaban.

Natsu y Wendy solo se mantenía atrás

-No me gusta el panorama Natsu, algo malo pasará lo presiento.-

Decía la chica convertida en dragón, ella tenía una transformación diferente a los demás, su cara y cabello quedaba intacto, lo único que tenía de dragón era sus alas, y cola, su rostro se mantenía humano al igual que su cuerpo.

El pelirosa miro hacia el suelo, Irene peleaba contra varios humanos a la vez.

-Ayudemosla.-

Mencionó a Wendy y ella asintió.

Al descender ellos volvieron a su forma humana y comenzaron a ayudar a Irene

-Rugido de dragón.-

Mencionaban mientras de Natsu salía fuego de su boca y de Wendy aire.

Irene les agradeció y continuó luchando.

Poco a poco algunos humanos al ver qué no tenían oportunidad de ganar decidieron retirarse.

El pueblo de Irene quedó muy destrozado.

Ella solo mantenía su mirada hacia el suelo estaba decepcionada y desconsolada.
Ya que Belserion también había muerto en aquella batalla, no sin antes pasarle la poca magia que quedaba en él a Irene para que ella pueda seguir adelante con esa tonta guerra.

Wendy se acercó a ella y la abrazó consolandola al instante.

Natsu se mantuvo de pie mirando a todas las personas muertas en el suelo.

Junto a los dragones les dieron sepultura para luego salir de ahí.

-¿Que harás Irene?-

Preguntó Wendy.

-Ire a Fiore, es la capital más cercana, pediré ayuda al rey para que evitemos toda está guerra sin sentido.-

Contestó aún un poco triste.