En una habitación únicamente iluminada por un televisor se encontraban el club de los perdedores viendo una película de terror sentados en un sillón grande.
En la esquina estaba sentado Eddie, seguido por Richie, Bill, Stan, Beverly, Ben y Mike. Eddie estaba tomando con fuerza el brazo de Richie, y éste aprovechó para recargar su cabeza en la de Eds.
Después de ver 2 películas, Eddie ya se había dormido, recargando su cabeza en el pecho de Richie y soltando su brazo, Richie aprovechó para rodear con su brazo la cintura de Eddie. A Stan se le cerraban los ojos, sin embargo quería terminar de ver la película. Mientras Bill fue a buscar sábanas y almohadas para sus amigos.
Cuando Bill regresó a la habitación en dónde se encontraban los chicos, encontró a todos dormidos, su mirada se dirigió al chico de rizos castaños y una sonrisa se formó en su rostro.
—Chi-chicos ¿qui-quieren quedarse en el si-sillón? - Preguntó Bill viendo a sus amigos.
—S-sí... - Contestó Richie y luego de él los demás con la misma respuesta.
Bill soltó una risita y después cubrió a sus amigos con sábanas.
Los últimos en despertar fueron Richie y Eddie, todos los demás estaban desayunando. En realidad, primero despertó Eddie, pues sintió su hombro húmedo, era la saliva de Richie.
—¡Iugh! ¿Sabes cuántas bacterias tiene la saliva? - Regaño al pelinegro mientras limpiaba su playera con la sábana.
Richie rió y tomó una mejilla del pequeño, haciendo que éste volteara a verlo.
—Eres muy tierno, Eds. - Richie se levantó y se estiró para después salir de la habitación dirigiéndose a la cocina.
Eddie se encontraba sonrojado, viendo como su amigo se iba. Terminó de secar su playera y salió de la habitación.
—Y bien, ¿cómo durmieron? - Preguntó Bev viendo a Richie y Eddie con un sonrisa pícara.
—¿Por qué nos miras así? Yo dormí bien. - Dijo el pequeño tallandose un ojo aún con sueño.
—Sí, yo igual. - Respondió el pelinegro mientras veía a Eddie con una leve sonrisa dibujada en su rostro.
—C-claro que du-durmieron bien, e-estaban abrazados. - Dijo Bill volteando a ver a los 2 chicos con una sonrisa pícara.
Ambos chicos se voltearon a ver sonrojados para después mirar a los demás y responder al mismo tiempo:
—¿Qué?
