|Capítulo 17|

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Si tenes enemigos lo más conveniente es tenerlos cerca, si alguien te la tiene jurada ya lo tenes que saber, y si sabes que alguien puede hacerte caer, tenes que preverlo. Eso el lo que hace mi padre con su trabajo, tantos socios, competencias y clientes generan enemigos.

"Para investigar la verdad es preciso dudar, en cuanto sea posible de todas las cosas"

Descartes, consideraba que el principal método para alcanzar la verdad, en la medida en que somos capaces de conseguirla, es la duda respecto a todos los conocimientos existidos hasta el momento.

Lo que yo pienso es que capaz alguno de esos fue quien entro a mi casa aquella noche, alguien que estaba enojado con mi padre por negocios y sabía donde vivía, aunque de ser así, si fuera negocios atacará por otro lado, por lo que descarto que sea algún ex socio.

— ¿Y papá? — Le pregunté a mi madre cuando baje, ella levantó la vista de su computadora.

—Buen dia, si dormí bien, gracias— Puse los ojos en blanco, siempre que contestaba así era porque estaba de mal humor —Él salió a hacer algo con tu hermano, no tarda en venir.

Bien.

Suficiente tiempo para poder conseguir algo. Disimuladamente y en silencio fui a la oficina de mi padre. No solía entrar, de niña, como él pasaba mucho tiempo trabajando cuando estaba en mi casa lo seguía como si fuese su sombra, me fascinaba estar aquí y jugar a que fuese mía, yo era una mujer grande y con muchas cosas por hacer, tambien creia que tenia una secretaria que en ese tiempo era mi perro. Tanta curiosidad me llevaba a tocar y mover todo, hasta que un dia mi padre se canso y me pidió que no entrara mas.

Paredes verde oscuro, con títulos y pinturas colgadas, muebles marrones llenos de libros, piso de madera, dos pequeños sofás, un gran escritorio repleto de hojas pero ordenado, delante de una gran ventana. Básicamente así era su lugar de trabajo en casa, ya podemos saber que la mente detrás de toda esta decoración es mi madre.

Abrí sus cajones hasta encontrar su agenda, anote todos los contactos que tenía tachados, calculando que estos deben ser los que ya no tiene tipo de relación y vaya uno a saber cómo han terminado.

Abri su computadora y introduje la clave.
Busque en carpetas, en notas, algo que me pudiera dar una pista, pero nada. Estaba por entrar a su mail cuando oí el motor de un auto, me paré de su silla para ver por la ventana y si, mi padre había llegado.

Hubieras tardado un poco mas Todd.

El celular marcaba la 01:07 A.M debería estar durmiendo, pero después de hacer cosas de la universidad, puse mi plan en marcha. Deje el celular a un lado, largue un suspiro y fije mi vista nuevamente en la computadora posicionada en mis piernas.

Ningún nombre en la lista que anote me daba pistas de nada, eran simples personas que habían trabajado con mi padre, algunas de ellas las conocía por haber ido tantas veces a la empresa, aun así todas ellas ahora estaban trabajando, ninguna se había quedado sin trabajo como para generar algo de odio. Siempre escuche que mi padre es un buen jefe, nunca hubo alguien quejándose de él o incluso de la paga.

Esta era la décima persona que buscaba y siempre lo mismo, trabaja, tiene hijos y no tiene antecedentes penales. Pase la palma de mi mano por mi rostro, no era buena haciendo esto, tengo que buscar otra forma.

Le mande un mail al detective Hammer contándole mi teoría y que podía ayudarlo, no me importaba que era de madrugada, lo más probable es que lo lea mañana por la mañana. El probablemente sepa que hacer mejor que yo.

~><~

Por suerte solo eramos nosotros en casa de Trevor, cuando me refiero a nosotros, quiero decir todos sin Bess. Aunque sí estaba su amiga Hannah, quien estaba teniendo una entretenida conversación con el anfitrión de la casa. 

Secretos peligrososDonde viven las historias. Descúbrelo ahora