|Capítulo 29|

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El viento más que abrazarme parecía empujarme en dirección contraria, lleve mis manos a mis bolsillos y junte mis hombros, típica postura de cuando tenes frío, seguí caminando con el viento golpeando mi cara. Solamente había bajado de mi auto y camine los pocos metros que quedan a mi casa. El problema no es ese, más bien está en que me siento observada, pero esta vez estoy segura de que no es mi paranoia, esto es real. Las llaves se me cayeron, mis manos estaban torpes, las levanté, pasé mi mochila por mi hombro derecho y entre a mi casa.

No podia seguir asi, estoy segura de que el hombre que me tope en la salida del gimnasio me siguió, estoy segura de que Ivanov tiene algo que ver y me frustra no saber quien es todavía.

Escuche ruido en el despacho de mi padre, me acerque sigilosamente abriendo la puerta corrediza. Papá estaba caminando de un lado a otro buscando algo, todo era un desastre, hojas y carpetas tiradas en el suelo.

—¿Que paso? —Parece que un tornado había visitado su despacho. Levantó la vista con los ojos bien abiertos, nunca había visto a mi padre así, me acerque sigilosamente— ¿Por qué todo este desorden?

—No es nada, un documento no está donde lo guarde y no lo encuentro —Llevo sus manos a su cabeza, en su escritorio había todo tipo de hojas, todas llenas de letras, mis años viendo esto me dicen que esos son contratos, agarre una hoja al azar— No toques eso, vete de aquí, necesito buscar un papel.

De verdad parecía alterado, nunca me habia hablado asi— Puedo ayudarte pa.

—No, está bien, no es tan importante, vete Ellie, vete seguro tienes cosas más importantes que hacer —Se dirigió a un cajón y lo abrió.

Como la curiosidad siempre me gana me quede observando el desastre. Algunos contratos estaban en el escritorio, pero había una hoja debajo de una carpeta que llamo mi atención.

Era una foto en blanco y negro, una de nuestra casa, sobre ella unas palabras escritas a mano alejate. Mi cuerpo empezó a temblar y no podía despegar la vista de esa foto, era mi casa y esto era una amenaza, la di vuelta y detrás de la foto en el margen izquierdo había unas iniciales T.i.
Santo Dios. Mi vista no se iba de la fotografía.

—La recibi hoy en un sobre, Cori dijo que la trajo un hombre —Susurro. Papá estaba parado del otro lado del escritorio, su mirada en foto— Saben que los estoy buscando.

Trague duro, es mi culpa, saben que los buscamos por mi culpa y eso me lastima mas, porque veo esa mirada triste en sus ojos que sin haberlo planeado yo la puse ahí.

—¿Crees que debemos dar marcha atrás? —No se porque pero hablábamos bajo, como si todavía no salimos del asombro, Todd masajeo su cien.

—Tu que crees Ellie, no tenías que haber visto eso —Mi padre explotó, las hojas y cuadros que estaba en su escritorio terminaron en el piso, golpeó la mesa con sus palmas. Di un salto del susto, dijo unas pares de maldiciones hasta que cayó en su silla— Nunca tuve que meterme con ese comprador.

—¿A qué te refieres? —La foto se había arrugado en mi mano de lo fuerte que la sostenía, mire a todos lados sintiéndome observada, pero solo estabamos el y yo— Pa, el detective está muy cerca, lo comprobaste el otro dia —Porque era verdad, ese hombre estaba a punto de conseguir pruebas suficientes, y eso me tenía aterrada— ¿No crees que es mejor decirle esto y que eso también influya si los atrapan?

—Esto es serio, no voy a poner a mi casa ni a mi familia en juego, se acabó.

Parecía muy decidido— ¿Tu sabes algo? Quiero decir fue un simple comprador, no ibas a saber que después ese hombre quería estafarte.

Secretos peligrososDonde viven las historias. Descúbrelo ahora