Capítulo 23 - Mordida doble

76 13 3
                                    

Bajo a desayunar y están todos menos Sarah y Miklos... veo que ellos se están tomando el desayuno por su cuenta. Aprovecharé que Sebastian está en la cocina con Peter para hablar con Drogo y Nicolae.

_Buenos días chicos, he estado hablado con Peter, y debemos hacer unos cambios.

_Buenos días Ariadna. ¿Cómo cuales? _pregunta Nicolae.

_A partir de ahora beberéis de mi 2 veces al día, y más cantidad, aun os falta bastante para estar al nivel de Peter o Nathaniel, y no quiero correr riesgos, no creo que nos quede mucho tiempo.

_Oye cosita, ¿Peter está de acuerdo?

_Aunque parezca increíble, sí Drogo, no quiere que sufráis daño y parece que esta vez lo lleva bastante bien.

_Está bien Ariadna, pero si te empiezas a encontrar mal tienes que decírnoslo, ¿de acuerdo?

_Sí, no te preocupes, ahora se cómo sanarme en el momento, no como la otra vez, puedo reponerme en unos minutos.

_Está bien, ¿cuándo quieres hacerlo?

_Después del desayuno, me muero de hambre...

_Yo sí que me muerdo de hambre cosita...

_Drogo, por favor, no me hagas hacerte sufrir... _a lo que Drogo ríe divertido.

Pasamos el desayuno hablando de ir a hablar con Ethan. Drogo y Sebastian estarán fuera y Peter entrará conmigo. Se niega a que entre sola, pero al menos he conseguido de que sólo sea Peter el que entre. Nicolae y Drogo se dirigen a sus habitaciones para proceder a su querido desayuno como dice Drogo. Que paciencia tengo que tener... al menos el primero es Nicolae.

_¿Preparada Ariadna?

_Claro, pero recuerda, necesito que bebas mucha más cantidad, no te preocupes que cuando acabes me repondré en un par de minutos.

_Está bien, pero cualquier cosa dime y paro _a lo que asiento con la cabeza.

Nicolae me coge de la mano y me sienta en la cama, dice que es por si me mareo. Él se pone detrás de mi de rodillas en la cama, aparta mi pelo a un lado y me coge por la cintura para pegarme a él mientras me muerde. Está bebiendo más de lo de costumbre, y se le nota muy excitado por ello. Noto como su mano que estaba en mi cintura hace pequeños movimientos circulares, puedo leer lo que desea en este momento y he de decir que me siento un poco incómoda. Empiezo a marearme un poco tras unos minutos bebiendo de mí. Cuando mi cuerpo empieza a aflojarse Nicolae se aparta y me tiende en la cama.

_Ariadna, ¿te encuentras bien?

_Sólo estoy un poco mareada, dame unos minutos.

_Claro... _Nicolae se sienta a mi lado mientras coge mi mano. A los pocos minutos ya me encuentro perfectamente y me levanto de la cama. _¿Crees que debería beber un poco menos la próxima vez?

_No, creo que es el punto exacto, ¿has sentido algo diferente?

_Siento más energía que de costumbre.

_Perfecto, lo repetiremos esta noche.

Salgo de su habitación y me dirijo a la de Drogo. Se nota que está impaciente, la idea de beber de mí tanto le trae loco. No sé si podrá aguantarse... a Nicolae le ha costado bastante, pero bueno, confío en él.

_Hola Drogo, servicio de habitaciones, ¿has pedido el desayuno? _le digo con broma.

_No esperaba un desayuno tan delicioso, pero sí... _Drogo se abalanza sobre mí para olerme. _Cosita apestas a Peter y también hueles a Nicolae. ¿Quieres ponerme celoso o qué?

_No seas tonto, pero si quieres puedo venir primero contigo y luego con Nicolae.

_Bueno, ya lo veremos, ven... _Drogo se sienta en la cama y me sienta sobre sus rodillas de frente a él.

_Drogo, no creo que esta postura sea la ideal teniendo en cuenta que te cuesta controlarte...

_Vamos cosita, no voy a hacerte nada, no seas desconfiada....

Drogo empieza a oler mi cuello y le veo cara de disgusto. Empieza a desabrochar un par de botones de mi camisa y a oler por mi clavícula y encima de mi pecho empieza a morderme. No me lo esperaba, pero estoy muy a gusto. Noto como sus manos me acarician la espalda a la vez que me atrae hacia él, y como en su entrepierna se marca su excitación. Vamos Drogo... ¿por qué tienes que hacerme esto? Mientras sigue bebiendo de mí me aprieta contra él y su dureza. Gimo de placer hasta que empiezo a estar sin fuerzas, y él al notarlo deja de morderme y besa desde su mordida hasta mi cuello. Luego me deja con cuidado en la cama.

_Ari, ¿estás bien?

_Sí, solo dame un momento.

Drogo no se separa de mi lado, y voy recuperándome hasta estar totalmente recuperada. Me pongo en pie y me voy camino a la puerta, cuando Drogo me detiene para mirarme a los ojos.

_Ari, perdona por esto, ¿se lo dirás a Peter?

_Tranquilo, sé que es difícil para ti, y no, no le diré nada, o será él quien te arranque la cabeza. Pero tienes que intentar controlarte...

_Gracias cosita...

_Bueno, nos vemos en clase

Entre los colmillos de los Bartholy T2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora