×Capitulo 14×

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×Namjoon×

Jin se encontraba sentado en mi sofá, al frente de él la pequeña mesa de centro estaba repleta de guías, libros y cuadernos.

Hice un poco de espacio para poner una bandeja con varios dulces y bebidas. Jin me regaló una hermosa sonrisa de lado, luego me invitó a sentarme en el espacio vacío del sofá.

Hoy era nuestra primera "clase-no-cita" que teníamos, (la aclaración es solo para mí). Era sábado en la tarde, mi madre tenía un viaje de trabajo y no llegaba hasta el siguiente sábado. Ya estaba acostumbrado a sus viajes, pero ahora no me era muy conveniente que se fuera, al menos con ella en casa podría tener una excusa para no quedar a solas con Seokjin.

Pero el mundo jamás me complace.

Fue por Jin más que todo que elegimos los días sábados para que recibiera las clases. Insistía en no hacerlo entre semana para que nuestros horarios de clase no chocarán.

Él en verdad estaba emocionado por esto.

Me acomode a su lado, intentando acercarme a él de forma sutil. Mis ojos se clavaron en su figura dispuesto a darle mi total atención, aunque eso no me era tan difícil; acomode mis lentes empujándolos hacía atrás y me dedique a mirarlo. Tenía cierta angustia por decepcionarlo o que pensara que no le tomaba en serio. Jugaba un poco nervioso con mis dedos, intentando ignorar mis pensamientos, Jin no tardó en darse cuenta de eso y solo posó sus manos sobre las mías, sonriéndome.

Sentí una ola de tranquilidad invadirme. Era Seokjin, y ese solo hecho bastaba para que me relajara.

Iba a dar todo mi esfuerzo.

Asenti hacía él, ya estaba listo para empezar, Jin solo aplaudió un par de veces, me encantaba cuando era tan tierno.

Tomo uno de los muchos libros y lo puso en mis manos. Se inclinó aún más hacia mí, nuestros hombros estaba pegados y su rostro a centímetros del mío. La montura de sus lentes chocaba con la mía.

Se veía aún más guapo que de costumbre.

<<¡Namjoon!>>. Me golpeé a mis mismo al encontrarme perdido en mi mundo. Jin me miro raro, pero solo le sonreí. Intentado disimular mi nerviosismo. Otra vez.

Bien, apartir de ahora solo te voy a hablar por señas—. Jin movía sus manos frente a mí, por mi expresión creo que le quedó más que claro que no entendía nada. Rodó los ojos, riendo para sí mismo.

Abrió el libro y me ubico en la primera página, señalando la primera lección.

1· El estudiante no podrá comunicarse oralmente en el transcurso de la clase.

Asentí, Jin llevo su dedo índice a sus labios, y luego a los míos indicándome que haga silencio.

Me controle para que mi rostro no se sonrojara. <<Es una clase Namjoon ya calmate>>. Fue lo único que pude pensar antes de que Jin empezará con la clase.

[...]

Era sábado en la noche, este fue el día que Jin eligió para darme mi primera clase para enseñarme lenguaje de señas.  Y no podía estar más sorprendido.

La Melodía del SilencioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora