Cuando me recuerdes; [ Harco ]

• 19; Maldición de sangre.

Esta grave, estamos tratando de salvar al bebé. No tenemos un informe detallado aún.

Harry no lograba comprender cómo es que su felicidad se veía interrumpida de aquella manera mientras se encontraba sentado en la sala de espera. Sus padres, los Weasley, Sirius, Hermione, Blaise, Pansy, Luna y los Lupin estaban también esperando pacientemente. Aunque sabía que todos giraban a verle tratando de hacer algo, pero los rechazaba.

Había sido horrible que en medio de sus clases, el director llegará a decirle que recogiera sus cosas. Al salir, fue informado del estado grave en que su novio se encontraba. Jamás sintió tanto temor hasta ahora.

Había gritado, casi golpeado por querer saber que demonios había sucedido. Pero nadie decía nada, nadie se atrevía a hablar aún.

Peor fue cuando la medimaga informó que el bebé estaba en peligro de muerte por el hechizo recibido, pero que la magia del rubio había logrado protegerlo lo suficiente como para no terminar muerto. Solo hasta ese momento le hicieron saber que su bebé, era un varón. Se suponía que era algo de lo que se iba a enterar en la noche, en la fiesta, y todos gritarian emocionados, los demás sólo harían muecas al querer niña. Pero todos solo sonrieron forzadamente.

—Scorpius, Draco dijo que si era niño, debía de llamarse Scorpius —murmuró atrayendo la atención de Ron.

—¿Scorpius? Es un gran nombre, estoy seguro que nuestro Scorpius estará bien...y Draco también.

Asintió queriendo creer eso. Mirando hacia el pasillo donde la medimaga tendría que salir de nueva cuenta para informarles de la situación actual. Se quedó mirando a Narcissa Malfoy siendo consolada por Molly, ambas mujeres se abrazaban fuertemente en medio de sollozos.

El responsable de todo había sido el propio padre de su novio, Lucius. Todo por la maldita supremacía de sangre.

La mujer era quien había llevado a su hijo de inmediato hacia el hospital ignorando que su esposo le gritara que si se atrevía a hacerlo entonces no tendría derecho de regresar. Y ella había escogido a su hijo, y a su nieto. Renunció a todo por salvarlos, por avisar a todos.

No sabía que había hecho su marido, apenas llegaba cuando Draco caía al piso. Maldijo a su esposo gritándole su odio, lo abandonó para siempre.

Y él sentía como su sangre hervía por querer levantarse e ir a golpear a aquel hombre hasta matarlo, merecía eso. No contaría entonces como una imperdonable ante el ministerio. Lamentablemente todos lo habían detenido cuando recibió la noticia del porque Draco estaba hospitalizado.

—Quiero golpear a Lucius —Sirius volvió a cortar el silencio; y él jamás había estado tan de acuerdo— hacerlo arrepentirse de lo que haya hecho. Atacar a su propio hijo, que hijo de puta tan grande.

—¿En qué momento va a actuar el ministerio? —preguntó Ron fastidiado mirando al inútil ministro que se encontraba esperando resultados.

—Hasta que se sepa que clase de hechizo se usó. Si fue uno grave, ya quiero ir corriendo a ponerme el uniforme para meterlo a Azkaban....

Harry se puso de pie inmediatamente cuando la medimaga que había atendido desde un principio a Draco apareció por el pasillo. Casi todos se le fueron encima que Molly tuvo que poner orden, dejando a Harry, Narcissa y Sirius en primer lugar al ser los más cercanos.

La medimaga se quitó el cubrebocas que llevaba al igual que guardaba su varita en su túnica verde lima.

—Hemos logrado que él bebé se encuentre fuera de peligro —todos suspiraron aliviados mostrando sus más sinceras sonrisas, solo que ella no sonreía, tragó saliva antes de seguir— el joven Malfoy aún se encuentra grave, recibir tal hechizo estando así, es fatal. Concentró su magia en proteger al bebé, que se olvidó de si mismo, debemos dejarlo internado hasta que de a luz.