05

699 79 2
                                    

20 de diciembre 2012


Una melodía envolvente y una letra que en ese instante no podía reconocer comenzó a sonar en la habitación.

Estiró un brazo y contestó, estaba demasiado somnolienta como para ver quién llamaba.

—¿Diga? -lo único que se escuchaba por el otro lado eran cosas chocando y gente extrañamente demasiado feliz- ¿Alguien?

—¡Bebé! -exclamó esa voz que reconocía como si fuera la suya misma. Jos.

—Aun estoy molesta contigo Miguel. -dijo ya más despierta- ¿Cómo se les ocurre asustarme así?

—Ya te pedí disculpas y cuando vuelvan a casa te pido disculpas otra vez, ¿sí? Lo importante ahora es Fernanda -un leve tono de emoción y ansiedad se hacía notorio en su voz- ¡Voy a ser tío! -gritó y se escuchó como en el lugar que se encontraban todos festejaban la noticia- Esto es fantástico.

—¡Santo Dios! Felicidades a Fer y envíale saludos.

—Claro bebé, te dejo, debo ir con Charlotte. -y colgó.

¿Acaso sus hermanas ya estaban en la casa? ¡Que mierda de día! Ella en ese departamento mientras toda su familia celebrando en su casa.

Era injusto.

Se levantó de la cama, o por lo menos fue lo que intentó, pero una mano en su cadera la retuvo.

A su lado, durmiendo plácidamente, estaba Freddy. Se veía tan lindo, tan dulce, tan él.

[...]


—¿Donde está Gracie? -Preguntó Charlotte algo curiosa.

No había visto a su hermana desde que había llegado y tenía muchas cosas que contarle.

—Esta... visitando a Aida. -respondió Jos tratando de ser convincente.

—Sí claro, visitando a Aida... -su tono sarcástico dejo en claro que no le creía nada de lo que decía- Seguro que anda con un chico, ¿con cuál? ¿Jason? ¿Mario? ¿Nolan?

—¿Qué carajo? ¿Quiénes son esos? -preguntó Alan que estaba entrando en el lugar.

—Son unos chicos que se le han declarado ultimamente a Grace, pero ella no quiere nada por su poco tiempo de vida... Pensé que quizás haya aceptado la propuesta de alguno de ellos. -lo había dicho tan inocentemente, pero Charlotte no se daba cuenta que eso era malo, muy malo. Nadie sabia sobre ellos, solo Grace y ella- Si no está con ellos ¿con quién está? -Jos y Alan cruzaron miradas, debían decirle la verdad y confiar en ella o mantenerse callados y simplemente engañarla. - Oh ya veo... esta con Freddy al parecer a ese chico le encanta romper reglas.

—¿Qué? -preguntaron al unísono los muchachos que allí se encontraban.

—¿Acaso no saben porque Freddy se marchó? -ambos negaron- Bien, les diré, pero no le digan a Grace ella no lo sabe y creo, personalmente, que Freddy es el que debe decirle. -ellos solo asintieron mientras tomaban asiento y la miraban, estaban intrigados por saber, desde que Freddy había llegado a vivir con ellos nunca había tocado el tema de Grace, por lo menos no esa parte.

[...]


—Dancing in the mirror, singing in the shower... -cantaba y bailaba al mismo tiempo mientras comía algo de su cereal.

Freddy solo la observaba danzar en la habitación, era una muy buena vista.

Por las mañanas se veía tan hermosa, muy al natural.

Se veia tan llena de vida. Ella seguía cantando, al parecer nada podía arruinar su día.

Menos aun el de él.

Había dormido abrazado a ella, había dormido enterrado en su aroma, en su sedoso cabello, había acariciado su cuello, besado sus hombros... había sido una noche para recordar.

—¿Qué no comerás nada? -preguntó sacándolo de sus pensamientos- Anda Alfredo, levántate y canta conmigo. -dejó su cereal en la mesita y tomó la mano de su compañero para obligarlo a ponerse de pie pero él era más fuerte y la empujó a ella al sofá, más específicamente sobre él.

Estaban muy cerca, típica escena romántica de película lo único que faltaba era el beso.

Pero Freddy no tenía el valor, o mejor dicho descaro, de acercarse lo suficiente como para besarla, quizás ella se molestaría.

Pero estaba equivocado, ella misma fue la que se acercó y junto sus labios.

Un simple roce, un suave y delicado roce.

Ella colocó sus manos en sus mejillas y ladeó la cabeza para profundizar más el beso, hacia mucho que no era besada, hacia tanto que lo ansiaba.

Recorrió cada lugar de su boca, hasta que el aire les comenzó a faltar y se separaron, pero no demasiado, solo unos milímetros para poder tomar algo de aire y seguir con su faena de besos.

Ella debía reconocerlo, los labios de Freddy era adictivos, una adicción que luego no podría dejar.

_____📣📣📣_____

Capitulo Editado.

Grace ❀ freddy leyva; cd9Donde viven las historias. Descúbrelo ahora