αlmαs gєmєlαs ♡━ нуυимιи.|| αdαpтαcιóɴ

002. ━Seungmin

22 de septiembre, 2018.

...un pequeño cosquilleo...

Los rayos de sol entraban por la ventana, iluminando toda la habitación.

...otro pequeño cosquilleo...

Algunos de estos rayos de sol caían directamente sobre el rostro de Seungmin, el chico que dormía sobre la cama que se encontraba en la habitación.

...un cosquilleo más intenso...

Una mueca de incomodidad se formó en la cara del durmiente Seungmin. La mezcla del calor generado por los rayos de sol y el extraño cosquilleo en su mano obligaron al ojiazul a despertar poco a poco, llevando su mano izquierda hacia su mano derecha para rascar esta con ligereza.

...una punzada de dolor...

Seungmin abrió los ojos por el extraño dolor que sintió al rascar su palma derecha y levantó hacia su cara para observar la fuente del dolor.

Al levantarla, el corazón de Seungmin empezó a latir con rapidez y su respiración se aceleró. Ahí, en su palma derecha, se encontraba la primera letra del nombre de su alma gemela.

H

Seungmin llevó su palma, ligeramente irritada por haberla rascado, hacia su boca y plantó un pequeño beso sobre la hermosa letra. De sus ojos brotaron un par de lágrimas de felicidad y una sonrisa invadió sus labios.

Al fin sabría quién era su alma gemela, al fin conocería su nombre y realmente esperaba que el destino les hiciera encontrarse pronto.

Cuando Seungmin logró calmarse un poco, se levantó y se dirigió hacia su ducha. Mientras se duchaba, en su cabeza no dejaban de girar preguntas y posibles nombres de su alma gemela.

¿Será un chico o una chica?

¿Tendrá mi edad?

¿O será mayor y lleva años esperándome?

¿Y si es menor y aún no tiene mi nombre?

¿Se llamará Hannah? ¿Hoseok? ¿Hyunjin? ¿Haneul?

Después de ducharse, salió a su habitación para vestirse. Al abrir la puerta de su closet, sus ojos se dirigieron automáticamente a una cajita roja en la esquina de su closet. Con temblorosas manos, la tomó y la llevó a su cama. La destapó y su mirada se encontró con el hermoso guante que sus padres le habían regalado la semana pasada. El guante tenía huecos para poder tener los dedos libres y estaba hecho de un hermoso color negro.

Lo tomó con delicadeza y al dirigirse a ponérselo, vio como en su palma se había formado ya un nombre.

Hyunjin

—Wow, eso fue rápido —Se dijo Seungmin a sí mismo y de sus ojos volvieron a brotar las lágrimas. Una risa se escapó de sus labios al darse cuenta de que su alma gemela tenía uno de los nombres que había pensado mientras se duchaba.

Con delicadeza, se puso el guante y se apresuró a vestirse. Por la aparición del nombre, se había atrasado muchísimo y ahora debía apresurarse para no llegar tarde al instituto. Una vez vestido, bajó a la cocina y se encontró con su madre y su padre esperándolo ansiosamente en la mesa.

—Feliz cumpleaños, mi amor —Dijo su madre al verlo y se levantó a darle un cálido abrazo.

—Feliz cumpleaños hijo, veo que ya traes puesto el guante —Le dijo su padre después de haberle dando un abrazo.

—Gracias. La verdad es que había olvidado que era mi cumpleaños — Dijo Seungmin riendo, cerrando sus ya pequeños ojos, sus padres lo miraron enternecidos.

—Ven a desayunar y cuéntanos, ¿cuántas letras tienes ya? —Preguntó su madre mientras le servía una taza de café.

—Ya tengo todo su nombre, solo falta el apellido —Contestó Seungmin con una inmensa sonrisa, inconscientemente acariciando su palma derecha sobre el guante —Es un chico.

—Ese es mi muchacho, siempre tan eficaz, teniendo ya el nombre a tan solo las siete de la mañana —Le dijo su padre dándole unas palmadas en la espalda, su cara adornada por una orgullosa sonrisa.

—Bueno ahora desayuna antes de que se te haga más tarde —Dijo su madre y su voz se escuchaba quebrada, dado que le llenaba de emoción saber que su bebé en cuestión de tiempo conocería al amor de su vida.

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¡Cualquier error no duden en decirme!