What won't be said

Capitulo 2 " No sé hasta cuándo, pero te esperare"

TSEHAI

Alce la mirada para saber en qué situación estaban los demás, o si alguien me podía explicar la situación en la que estaba, pero todos estaban medio idos, Isoken era la única que parecía sobria, estaba mirándome con una cara tan extraña que deduje que ella, sabría todo lo que había hecho toda la noche. No quería preguntarla a ver si había hecho algo con Itxaso, ya que quizás no habría pasado nada, y todo parecía tan surrealista. Además, con lo cotilla que era...

Me hice la dormida, hasta que llegamos a nuestro pueblo que a esas horas era la última estación, nos levantamos casi todos, menos Itxaso. - ¿tenía la fuerza de agárrame la mano, pero no para levantarse? Parecía una broma- Isoken se ofreció a llevarla a su casa, ya que las dos eran vecinas, y con su fuerza no era un problema para ella. Pero me sentía extraña no haciendo nada, por ella, aunque no recordaba mucho, sentía que su estado era culpa mía, - tampoco le pasaba nada fuera de lo normal-

Cuando nos despedimos me quedé pensándolo, y fui en dirección contraria de mi casa para acompañar a Isoken que llevaba a Itxaso.

- ¿Quieres que te ayude? - le pregunte

-No, pero gracias- me respondió seca

- ¿Segura? Tu casa está bastante lejos de

-Tsehai, ¿Qué quieres? - me corto- y piensa en una buena excusa porque no me creo que este aquí para ayudarme con Itxaso con la poca fuerza que tienes.

Me lo dijo tan de sopetón que no sabía que decirle y empecé a decir cualquier cosa para que tuviera sentido

-Para ayudarte, es verdad que no tengo mucha fuerza, pero entre las dos no será tan difícil., además...

-Sabes que si tienes algún problema me lo puedes decir ¿verdad? - me volvió a cortar- no necesitas buscar excusa para no ir antes a casa.

No sabía qué decir, tampoco sabía porque estaba ahí, supongo que todavía no estaba en condiciones para pensar.

-No es eso- me reí- si llego a casa así, mis padres me mataran -suspire- ¿ahora me dejas ayudarte?

No me dijo nada, dejo que la ayudase, y los 10 minutos de la estación de tren hasta sus casas se me hico eterno.

-Menos mal que tienes, ascensor, no me imagino subiendo los 5 pisos con Itxaso así. -dije

-Diez no cinco- cuando vio que yo estaba confusa añadió- ¿tú te crees que puedo llevar a Itxaso así a casa y que su madre no me hará preguntas? - asentí con la cabeza, en muestra que lo había entendido

Cuando llegamos a su casa puso a Itxaso en uno de sus sofás.

- ¿Y tu madre? - le pregunte

-De vacaciones- tapo a Itxaso con una manta- ¿tú que vas a hacer?

-Pues... ¿Me podría quedarme a dormir?

-Normal que tengas sueño, con todo lo que has hecho esta noche- se rio, en bajo- ¿quieres mi cama?

- ¿Ayer que es lo que hice? - miro a Itxaso como duerme y me siento en el sofá de al lado- y ¿Cómo es que Itxaso está en esa situación?

-Ahora mismo no quiero hablar de eso- me miro- ¿pero tú de que vas? -me sorprendió- Cuando yo te preguntaba cosas, me dabas largas, y ahora, ¿se supone que cuando tú me preguntas algo yo tengo que responderlo?

- ¿Qué quieres saber pues? - me di por vencida, porque estaba agotada para un tira y afloja ahora mismo, asique decidí responder cualquier chorrada que me preguntase, total tampoco tenía nada que contar en mi vida.

Pensaba que ella ya tendría la pregunta pensada, pero en lugar de aprovechar la oportunidad que le había hecho, se quedó mirando a Itxaso, se acercó a ella y empezó a acariciarle la mejilla. Y creo que fue la primera vez que vi como Isoken no ponía cara pervertida, al ver a una persona si no... ¿afecto?

-¿Isoken no me digas que a ti Itxaso te gusta? - abrí la boca en señal de mi interés- ahora entiendo, ¿por eso le has traído hasta aquí?

Sin despegar la mirada de Itxaso me respondió:

- ¿Sabes lo que me dijo ella? - aparto su mano de ella- me dijo que a ella le gustan las sumisas, personas a las que ella podría controlar a su antojo- se empezó a reír- y ya sabéis que yo tengo que dominar- dejo de reírse- pero bueno respondiendo tu pregunta, no. ¿Y a ti? - se giró mirándome- ¿te gusta Itxaso?

Nada más hacerme la pregunta, sentí como mi corazón se fuera estrujando, y las lágrimas brotaron:

-Hace unos días solo podía pensar en Patata, y no digo que lo haya superado, pero ¿tan fácil es que me olvide de un amor? -seguí llorando- Estaba enamora, me partieron el corazón, y aquí estoy, pensando que tal vez me haya liado con Itxaso, y tampoco me molesta completamente la idea- Isoken se sentó al lado mío, y se quedó callada un rato hasta que dijo:

-Eso no era amor, sé que es difícil creerme porque pensaras que, si no siento lo que tú sientes no podre entenderte, pero créeme que eso no era amor. - seguí llorando

No sabía en qué momento me quede dormida, pero entre sueños escuche como alguien decía- Isoken, confió en ti, no le cuentes lo de anoche a nadie, y menos a Tsehai-

ELENE

"No sé hasta cuándo, pero te esperare" No sé por qué, pero después de hablar con Samuel me sentía mucho mejor, ya no me miraba con aquella mirada tan fría, y solo por eso sentía que podría avanzar. Sentía que Samuel me daba su bendición para lo que sea.

Después de que pensase mucho decidí declararme a Patata, la llame y decidimos quedar, pero en la quedada apareció con otra de nuestras compañeras de clase. Pero yo ya había decidido que hacer, asique después de saludarnos puse toda la carne en la brasa.

-Parecerá raro que te diga esto, justo yo que se supone que tengo novio, pero ya no aguantaba más y tenía que decírtelo. No sé porque, pero cada vez que te veo siento que mi corazón da un vuelco y que en todo el universo solo las dos importásemos y cada vez que nos despedimos es como si el mundo se parase, hasta que te vuelvo a ver. Tu mirada, tu sonrisa, tus pucheros... son detalles tuyos que me están haciendo perder la cordura., y ya no lo soporto más, porque cada segundo, minuto, hora, día, semana y mes que pasa me duele el corazón por no decirte todo lo que te quiero. Se que nunca seré igual de especial que tú, pero me gustaría demostrarte que eres la persona más hermosa de todos los tiempos. -cuando acabe de decirlo solo quería que la tierra me tragase hasta que Patata dijo:

-Búa, Elene habérmelo dicho antes y os dejaría a solas, no sabía que sintieras todo eso por Rebeca, ahora siento que estoy agarrando la vela- le dio un golpe a Rebeca, emocionada- Rebe, ¿Qué le vas a decir?