five ! jugo

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el cielo estaba cada vez más oscuro y yo seguía ahí. realmente la casa de millie estaba lejos de la mía.

no se veía mucho y la luna hacía muy mal su trabajo de iluminar las calles. cada paso que daba corría peligro, y a pesar de intentar calmarme e ignorar lo que me rodeaba -o que no- soy una mujer caminando sola por la calle.

llegó un punto en el que me desesperé y empecé a correr. me sentía como una niña corriendo a su cama luego de ir al baño, temerosa de que un espíritu la tome por el tobillo y arrastre a su muerte

corría y corría hasta que me cansé y paré. en ese mismo momento sentí como un dedo tocaba mi hombro y me dió un escalofrio.

me dí vuelta temiendo lo peor.

─ oye, ¿qué haces a estas horas de la noche aquí? ─me preguntó finn, suspiré de alivio al verlo a pesar de que no sabía si estar contenta o enojada porque me haya asustado.

─ la pregunta es que haces tú, con mayúscula ─con dos dedos golpeé su pecho frunciendo el ceño─. un momento ¿horas? ¿¡qué hora es?

─ las doce y cuarto ─dijo fijandose en su celular, bastante tranquilo como para estar a medianoche con su celular en la mano.

─ guarda tu teléfono, te lo pueden robar ─golpeé nuevamente esta vez su brazo, indicando que lo guarde.

─ pero tú dijiste que querías ver la hora ¿no?

─ sí pero ver la hora no significa tener que ver tu celular ─continuando la conversación sin sentido, hice un gesto con mis manos para explicarme─. como que estamos iniciando una pelea en medio de la calle a las doce de la noche con quién sabe qué cerca.

─ argumento válido, ¿te acompaño a tu casa? ─dijo él muy sonriente.

─ mhm... ─miré hacia mi camino que me quedaba por recorrer, oscuro y tenebroso─. mejor sí.

─ tienes miedo ¿de la oscuridad o de lo que podría haber?

─ ¡no tengo miedo! e incluso si lo tendría, tiene sentido no querer ir caminando sola por la calle a estas horas ─señalé esta misma─. eres realmente insoportable.

─ lo sé, por eso todos me aman ─tiró hacia tras lo que se supone que sería su cabello si lo tuviera largo, con una expresión de “diva”.

─ yo no te amo ─dije sonando convincente, a la vez que tomaba su muñeca suavemente para que comienzaramos a caminar de una vez por todas.

─ n-no me refería a eso,,, solo vamos ─me siguió sin decir otra palabra mientras que yo contuve la risa.

no tenía preocupaciones y me sentía viva junto a él. era agradable.

creo que este chico me está empezando a caer bien...

─ no me dijiste qué hacías aquí tú a estas horas ─mencioné cuando estábamos a menos de media cuadra de mi casa.

─ vengo de la casa de un amigo, vive bastante lejos ─él se encogió de hombros.

al llegar a la puerta agarré repentinamente su celular y le dejé mi número.

─ toma ─se lo entregué─ avísame cuando ya estás en tu casa, por favor.

─ gracias, considerado de tu parte ─asintió con su cabeza, dedicándome una sonrisa divertida pero suave.

─ shhh no molestes y adiós ─lo corté al entrar a mi casa decidida a ir a dormir.

normalmente pasaría el trayecto hacia mi cuarto silenciosamente, arrastrándome y al llegar caería rendida en mi cama como si hubiera corrido nueve maratones en el día.

ғuiste túㅤ!!ㅤғinn ᴡolfhɑrd ʏ ᴛú Donde viven las historias. Descúbrelo ahora