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— ¡Me estarás jodiendo, ataúd con patas!

— ¡TaeHyung! ¡Más respeto con el director!—me regañó la profesora entre dientes, ella también estaba cabreada, porque en los dos o tres años que llevo en la universidad, ella siempre quiso hacer un proyecto similar, pero nunca se dió, y ahora que lo consiguió pero se lo arrebataron con la excusa de “ni tinimis il prisipiisti nicisirii”, tsk, pendejo.

— ¿Va a permitir que todo nuestro esfuerzo hasta ahora se vaya a la basura?—dije cabreado, hasta podía sentir mis mejillas arder de la rabia.

— ¡Si!—una voz de atrás se unió, y eso bastó para que el resto también se uniera y comenzaran a abuchear al. director.

El viejo parado en el escenario tensó su mandíbula y una vena comenzó a brotar de su frente por el enojo. Él tenía bien claro que al principio teníamos presupuesto de sobra, y ahora vino a decir que falta mucho más y que por eso se cancelaba. ¡Claro! Si todo ese dinero se fue en su Mercedes nuevo, porque el resto de la universidad estaba igual de hundida en la mierda como para decir que usó el dinero en algo productivo.

— Ya que son tan insolentes y se niegan a que una simple obra se cancele, sólo se pospondrá hasta que ustedes consigan lo que falta, no me importa cómo lo lograrán. Si la obra es un completo éxito, les repondré todo el dinero incluído lo que ya tenían—sonrió con cinismo, lo cual me hizo fruncir el ceño, algo se traía—; pero si no lo es, tendrán que limpiar todo el campus hasta que se gradúen como castigo por faltarme el respeto.

Volví a fruncir el ceño, ¿estaba loco? ¡Obviamente lo estaba! Asentí como muestra de que estaba de acuerdo, mis compañeros me miraron perplejos, el profesor igualmente asintió con aires de superioridad y estiró su traje, se bajó por las escaleras y salió del auditorio sin pronunciar nada más.

Miré al resto de mis compañeros y unos me miraban como un ídolo mientras que unos pocos me miraban con enfado.

— ¿Y ahora qué vamos a hacer?—pronunció una chica frente a mí— No tenemos la ayuda del director, sólo somos un pequeño grupo de universitarios hormonales sin talento que estamos aquí para salvar el semestre. ¿Alguna idea innovadora?—sus palabras me dejaron mudo, dijo la verdad, obvio yo solamente lo hacía por mi sorpresa para Jungkook porque ya había solucionado mis calificaciones.

— Pedir ayuda—habló HyeJin cruzando sus brazos—. Que tú no tengas talento, no significa que nadie más lo tenga.

— Por el dinero no se preocupen, yo lo pongo—intervino NamJoon con una sonrisa de lado.

— También deberíamos cambiar el libreto—propuso la profesora.

— ¡Yo lo hago!—canturreó JiSoo subiendo una mano, se veía emocionada.

Vamos a cerrarle la boca a ese costal de huesos.

/////[∆🌟∆]/////

La tarde cayó, estábamos YoonGi, NamJoon y yo en mi casa. Nos miramos con caras de poker, el silencio estaba entre nosotros y la situación era muy tensa.

Finalmente, los tres estiramos las manos hacia el centro de la mesita de la sala donde quedaba la última cerveza. La tomó YoonGi, NamJoon y yo no tardamos ni un poco en abalanzarnos sobre él para tratar de quitársela.

Sip, los tres estábamos borrachos.

— ¡Es mía! ¡Quítense!—nos empujaba y pateaba, obviamente no tan fuerte porque no quería hacernos daño, sólo alejarnos.

— ¡Claro que no!—NamJoon y yo gritamos al mismo tiempo, los tres traíamos al menos unas siete u ocho cervezas encima, no pensábamos con claridad.

— ¡Dámela! ¡Yo quiero!—lloriqueó Nam, parecía un niño caprichoso.

— ¡Dámela a mi! ¡Yo no he bebido! ¡Es mía, no me jodan!—chillé, esa mentira no me la creía ni yo. La verdad no tengo ni la más mínima idea de cómo comenzó esa noche, pero mi casa terminó hecha un desastre, con olor a alcohol y YeonTan se había cagado en la cocina porque en la mañana nadie le pudo abrir la puerta.

Me dolía la cabeza, mis ojos pesaban, me dolía el cuello y para más colmo quería vomitar, prácticamente un muerto en vida; bueno, los tres estábamos muriendo, pero debíamos asistir a la asquerosa universidad.

Ví la hora en el celular de YoonGi. Casi 7 de la mañana y nosotros apenas podíamos mantener los ojos abiertos, mi primera clase iniciaba a las 7:40. Pero tenía un trabajo de investigación que necesitaba terminar lo antes posible, hasta ese jueves tenía plazo.

No sé dónde carajo se me había metido la cabeza y en ese entonces sólo quería meterme un jodido balazo en la sien, aún sigo enojado conmigo mismo por eso. Si, la vida de un universitario es de lo más...

Pero de lo más hijueputa.

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¡Épale! ¡Acá estoy yo! Por tercera vez como regalo, oh si. Debí traerles carbón.

Sanie~

Hacerte Feliz (Yaoi VKook) [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora