Sin entenderte ; Emiliaco

➽ Capítulo 28: Tú decides

Antes que nada: Gracias a LucerooGarcia3 por darme la idea de la musicoterapia. Y aprovecho de agradecerles en general a todos.

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EMILIO'S POV:

Ya habían pasado dos semanas de la mierda con Patrick y ya me había recuperado, gracias a Joaquín. Ahora pasaba casi todos los dias en casa de él, junto a su madre. Le habiamos mostrado las letras al productor y nos hizo elegir el sonido. En total escribimos unas cinco canciones y se podrían convertir en un EP.

Hoy iba a ir con mi hermano a casa de Joaquín, ya que mi madre tenía que salir. Así que le dije a mi hermano que se arreglara y partimos rumbo a casa de Joaco.

-¡Hola, Joaco!- grité cuando estabamos afuera de su puerta.

-¡Hola, Emi y Toñis!- gritó igual. Entre ambos nos comprendiamos.

Mi hermano agachó la mirada y se empezó a romper la manga de su camiseta.

-No, Toño. Saluda a Joaco.-le ordené. Miré a Joaquín y tenía cara de preocupado.-Disculpa, tiene autismo... no sé bien como llevar el tema. Soy un pésimo hermano.

-Emi, no te preocupes. Has estado ocupado, piensa en ti y en todo lo que has logrado.- me dijo y apoyó su brazo en mi hombro- Paseeen.-sonrió y se movió de la entrada.

Pasamos y nos invitó a su habitación, ya había estado aquí unas cuatro veces antes pero, aún recordaba los primeros días que pasé con él en este mismo espacio.

Mi hermano hizo un mohín porque se estaba aburriendo demasiado, con tanta platica y todo.

-¿Está aburrido? - preguntó Joaco a lo que asentí y puse cara de enojado.

-Cantemos- Joaquín me tomó de la mano. Sentí los chispazos pero no hice nada.

Cantamos Amor Valiente y Perfecto, la segunda canción la hice basada en mí, y en mi relación con Joaquín.

Mi hermano comenzó a tararear la canción y yo lo miré sorprendido, él nunca había hecho eso.

-La música ordena el caos, pues el ritmo impone unanimidad en la divergencia, la melodía impone continuidad en la fragmentación, y la armonía impone compatibilidad en la incongruencia, Yehudi Menuhin.- susurró Joaquín.

-¿Dónde aprendiste eso?- pregunté interesado.

-Realmente me interesa la música, Emilio.- habló bajo.

-¿Has oído hablar de musicoterapia?-continuó.

-No. ¿Qué es?-pregunté. Amaba oír a Joaquín hablar de temas en los que el tenía bastante conocimiento.

-Te hablaré de la musicoterapia infantil. Es el uso de la música y de las actividades musicales en un contexto terapéutico con el objetivo de estimular, mejorar o recuperar el correcto desarrollo motriz, cognitivo, social y emocional de los niños.- me miraba y hacia gestos con sus manos. Yo asentía y escuchaba atentamente.

-Ahora. ¿Sabías que la musicoterapia puede ayudar a tu hermanito a mejorar todo aquello que mencioné? Yo no estoy capacitado para eso. Pero a través de la música, con un profesional, puedes ayudar a tu hermano. Y quién sabe, hasta tú en un futuro.- me señaló y quedé boquiabierto.

-Me gusto esa canción-susurró Antonio y yo sonreí, estaba muy feliz. Joaquín me hace amarlo cada vez más.

Pasamos la tarde hablando de muchas cosas y cantando, tocamos en grupo con Antonio y nos reíamos. Hasta que llegó la oscura noche, a atraparnos con el sueño y al día siguiente a encontrarnos en nuestros hogares recordando el día anterior, con felicidad, o con tristeza. No es un destino, tú sabes que rescatar, si lo malo, o lo bueno.