Nostalgia de invierno.

Capítulo 3.

Hola!Muchas gracias a las personas que se han tomado el tiempo de leer esto.Tenemos el primer capítulo narrado por Uenoyama y es una cita.Espero que les guste.

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Detendría el tiempo para él.

Una tarde; entre una escalera y un pasillo, con una linda expresión sobre un corazón herido, acariciando los rubios mechones de un egoísta; dejando que sus dedos se envolviesen y se deslizasen sobre él. Con la nieve derritiéndose sobre su regazo y un bello tarareo siéndole ofrendado a un falso Dios. Con la voz más bonita del mundo, y las emociones más tristes que jamás escuche. Aquel momento; entre la vereda del destino y la casualidad, cuando aquel amor no correspondido le pidió que lo mimase, en una canción mi mundo cambió. Fue un parpadeó, fue la estática y la conmoción. Bastó una torpe canción para que no pudiese dejar de pensar en él.

Mafuyu era melancolía encarnada y miseria sollozante cuando Yuki estaba a su alrededor; aquella imagen enfermaba. Su voz era hermosa y era doloroso escuchar cuando se quebraba. Tan solo aprovecharía la oportunidad. Me acomodé el cabello en el espejo de mi habitación, me estiré la camisa, cuestionándome si era buena idea cambiarla, busqué dentro de mi closet mis nuevas zapatillas para que la voz de Akihiko gritando afuera de mi casa me interrumpiera por cuarta vez. Tan molesto.

Respirando de manera hiperventilada me di ánimos frente al espejo, tomando la mochila que había arreglado la noche anterior para encontrarme con el rubio y su motocicleta estacionados, con una sonrisa tonta y burlona. Sin lograr disimular mis ansias esperé una reacción.

"¿Me veo bien?" Finalmente se lo pregunté, el más alto rio de manera estruendosa, llevándose la mano hacia la frente para enfatizar la carcajada. Rudo y descortés.

"Te ves como un desastre" Se burló, acercándose "¿No dijiste que era una cita falsa?" Desabrochando los primeros dos botones de mi camisa y desarreglándome el cabello.

"No" Hubo vergüenza e inocencia "Yo dije que era su novio falso, nunca dije que la cita lo fuera"

"¿Cuál es la diferencia?" Encogí mis hombros, con fastidio evidente "Ya, te dejaré de molestar" El más alto recogió del suelo un casco para arrojármelo "Pero es raro que salgas a citas, y más que nos lo quieras presentar" Chasqueé la lengua, tratando que el casco no me despeinase aún más. Me pondría y regalaría excusas, estaban en oferta.

"Él será el cantante de la banda, es normal que se los presente" Akihiko no lució convencido por mis palabras, yo tampoco lo estaba "¿Me vas a dejar en el centro comercial o no?"

"Si, los esperaremos en el restaurante de siempre" Me senté detrás del más alto en la motocicleta "¿Te pusiste toda la botella de perfume?"

"¿Tan notorio es?" El baterista me entregó un suspiro cansado, encendiendo el motor.

"Se pasará la pestilencia en el camino" Aquello no me tranquilizo.

El trayecto fue largo y pesado, pude escuchar cada uno de mis latidos arremetiendo contra mi pecho ante las ansias y los nervios. Él me estaría esperando para conocernos mejor, él estaba dispuesto a que esto funcionase entre nosotros dos, y no sería yo quien lo arruinaría. Galante y guapo, seguro y confidente; de esa manera no había resultado. Yo no era él.

Cuando aquella tarde él lo abrazó no pude evitar herirme y ofenderme; yo no era más que un apoyo, y no tenía otro objetivo más que utilizar su voz. Mafuyu sería un instrumento más, de todas maneras me enfureció. Una expresión de petulancia y recelo, de superioridad, como sus manos lo acariciaron con tanta confianza y como esa mirada me gruño para alejarme. Si él no lo amaba debería dejarlo. Acomodé mi rostro en la espalda de mi amigo, deprimido. Saboreando la injusticia y el arrebato ¿Injusticia de qué? En una eternidad llegamos.