Capitulo 21

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Han pasado ya seis meses desde que estoy con la persona más maravillosa que me he podido encontrar.
Estábamos a una semana del cumpleaños a Adan y aún no tenía muy claro que comprarle, así que esa tarde después de salir del conservatorio le dije a Elo que me acompañara que necesitaba comprarle algo, ella como siempre acepto encantada.
Nos fuimos directamente al centro comercial, allí están las tiendas más reunidas y se puede buscar mejor, dándole mil vueltas de arriba abajo y de abajo arriba al centro comercial, no encontraba nada para comprarle, necesitaba que ese primer regalo fuera algo especial, que realmente diga que lo que siento es real y duradero, que me encanta estar con él...

Después de tanto buscar vi un jersey increíblemente bonito, o por lo menos eso me parecía a mí, no es un regalo que diga todo lo que le quiero decir pero creo que es un detalle, y no es tan caro, no me puedo permitir mucho, además también quiero invitarle a cenar.

- Vamos Elo, creo que ya lo tengo.- le dije cogiéndole de la mano mientras entrábamos en la tienda.

- ¿Que has visto?- pregunto mirando de un lado a otro la tienda.

Me acerqué al jersey, era un jersey de cuello redondo de color gris, muy simple, pero a la vez muy elegante, siempre he creído que en lo simple está la elegancia.

- Creo que esté.- le dije cogiendo el jersey.

- No está mal.- me dijo encogiéndose de hombros.

- ¡Como que no está mal! ¿No te gusta? ¿Que le pasa? ¿Es feo?- No pare de preguntar hasta que Elo me hizo callar.

- ¡Ana! Cálmate, ¿a ti te gusta?- me pregunto decidida.

- Si, a mí me gusta mucho.- le conteste mirando nuevamente el jersey que lo tenía en la mano.

- Cómpralo y ya.- me dijo- Se más decidida.

- Pero... ¿y si no le gusta?- le pregunte indecisa.

- Seguro que le gusta, si te gusta a ti- añadió.

- A ti no te gusta.- le dije mirándola de reojo.

- No he dicho que no me guste.- dijo mientras me llevaba a la caja para que pagara el jersey y mientras volteaba los ojos.

Salimos del centro comercial y nos fuimos para casa.
Adan me había hablado mientras estaba en el centro comercial, pero estaba tan pendiente del regalo que ni me di cuenta, asi que le respondí mientras me salía la sonrisa tonta que siempre me sale cada vez que hablo con él, es tan inconscientemente que no puedo evitarlo.

Durante el camino a casa estuve hablando con Elo de donde podría llevar a Adan a cenar por su cumpleaños, pero no sacábamos nada en claro, ya que no tenía mucho dinero y tampoco lo quería llevar al Burger ni nada por el estilo, pero al final buscando por internet vimos un pequeño restaurante no muy caro y que los platos no eran a lo que Adan estaba acostumbrado pero tenían muy buena pinta.

- Ya está, lo llevaré allí.- le dije a Elo mientras miraba el móvil.

- Claro tia, el sitio está muy bien y la comida tiene buena pinta, además está cerca del centro y después podréis pasear o hacer lo que queráis.- me dijo con una mirada pícara con los ojos entre abiertos.

- ¡Para! Sabes que aún no ha pasado nada y no sé si pasará ese día, aunque mis primas por reyes me regalaron un picardías.- le dije con cara pícara.

Elo sabía que con Adan aún no habíamos pasado de la primera fase, pero yo aún no me sentía preparada, tenía miedo, sería mi primera vez y no sé si estaré preparada.

- Tia, lleváis casi medio año, ya toca, además con ese picardías ya del todo.- me dijo con precisión.

-Creo que  aún no estoy preparada.- le dije con total sinceridad mientras agachaba la cabeza con decepción, porque si me decepciona que esté tan a gusto con Adan y no ser capaz de dar ese paso, pero no puedo darlo por ahora.- Quiero que la relación esté más asentada.

- Bueno entonces para tu cumpleaños, que tampoco está tan lejos.- añadió mientras me abraza.- No seas tonta Ana, tú da el paso cuando creas que es el momento, y ya está.

- Pero y si tardo demasiado y me deja o algo.- le dije dudosa.- aunque él me dijo que esperaría todo lo que hiciera falta.

- Si realmente te quiere, te respetará y te esperará.-Me dijo.

Eso me hizo sentirme mejor, bajamos del bus y me fui para mi casa, dejando el regalo en mi habitación. Me baje a la cocina con mi madre para ayudarle con la cena.

- ¿Que tal el día cielo?- pregunto mi madre mientras me daba un beso en la frente.

- Pues la verdad es que muy bien- empecé- el examen de sociales me ha salido bastante bien, y en el conservatorio estoy progresando, la profesora de clásico me ha dicho que si continuó bailando como hasta ahora podré llegar muy lejos, y no solo en el conservatorio.- continúe.

Si en el conservatorio la cosa me iba mil veces mejor que en el instituto, no se porque pero en el baile todo era más fácil.

- Bueno y finalmente he ido a comprarle el regalo a Adan,te lo enseñaré.- le dije mientras subía las escaleras para ir a por el regalo.

Cuando baje lo saque de la bolsa y se lo enseñé.

- Es muy bonito.- me dijo cuando llegue a la cocina y le enseñé el jersey.

- ¿Verdad?- le dije entusiasmada- Bueno y le invitaré también a cenar.- continúe.

- Me gusta verte tan feliz, y me gusta mucho Adan para ti.- me confesó mi madre.

- Me hace muy feliz mamá.- le dije con sinceridad.

- Se le ve bien chico.- añadió.

Nos abrazamos, sabía que mi madre estaba bien si yo lo estaba y sabía que para cualquier cosa que pasara ahí estaría ella.

Esa maldita sonrisa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora