CAPÍTULO 14

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MI NOMBRE ES BLANCA Y SOY PROSTITUTA

- Blanca, ¿Vives aquí?

Mire su rostro sorprendido, nuestra casa era horrible, bueno la realidad es que no era nuestra casa, estaba abandonada y como no teníamos donde dormir entramos y ha sido nuestro hogar por algunos años.

La casa era de 2 pisos pero en la planta alta no tenía ventanas y el techo se estaba callendo a pedazos. En la planta baja todos dormimos en un cuarto teníamos una cama que habíamos comprado Tania y yo, además de un colchon que estaba sobre el piso. Algunas cajas de madera nos servían como acientos o mesa, según lo que improvisaramos, yo intentaba tener lo más limpio que podía, pero la realidad es que era una pocilga. Cubrimos las ventanas con hojas de periódicos viejos para evitar que la gente notará que Ana pasaba sola la mayor parte de la tarde-noche.
En el patio trasero hacíamos una fogata para calentar el té, No teníamos luz, ni agua. La casa tenía un baño, pero lo utilizaban poco, porque era difícil conseguir agua, teníamos que ir hasta el parque y acarrearla en cubetas, Tania no podía por su pierna y Jesús sólo aguantaba medio bote a la vez.
A si que me tocaba ir a mi, Tenía que hacer 3 o 4 viajes por noche para poder tener agua suficiente, esto provocaba que en algunas ocaciones tuviera callos en las manos, pero no importaba.
Bañaba cada tercer día a la pequeña  Ana, Para que estuviera presentable para la escuela. Lavaba su uniforme y barria la casa. Hacia todo lo que podia, pero no era suficiente.

Esa noche fue la primera vez que me dio vergüenza el lugar donde vivimos. Tal vez porque nunca habíamos invitado a nadie.
Tania bajo del auto y le agradeció a Luis, antes de entrar a la casa.

- Gracias Luis, disculpame por las palabrotas que te dije.

- No te preocupes Tania, el dolor nos hace decir y hacer cosas inconscientemente.

Yo miraba hacía abajo apenada, no sabía porque, pero me sentía apenada.

- Luis, lamentó que mi casa no es lo que esperabas. Pero mi vida no ha sido fácil, somos 5 hermanos, nuestra madre murió y a sido difícil sobrevivir. Una de mis hermanitas murió y yo no hice nada...

Las lágrimas corrieron por mi rostro. Luis me abrazo,  sento una sensación de calidez en mi cuerpo, jamás me habían abrazado. Me sentí bien, sentía el calor de su cuerpo.

- Blanca, no llores, disculpame si con mi comentario te hice sentir mal. No fue mi intención de verdad. ¿Quien soy yo para juzgarte  a ti? Que jamás me faltaste cuando estaba deforme.

- Luis... yo...

- No digas nada, déjame abrazarte.

Me quedé quieta en sus brazos por unos minutos. Hasta que salió Ana gritando y atrás de ella Tania.

- ¡Blanca! ¡Blanca! Tania no quiere que salga a buscarte pero...

Se quedó parada junto al auto, sorprendida.

- ¡Wow! ¿Es tuyo Blanca? 

- ¡Ana! Mocosa del demonio te dije que no salieras.

Grito Tania, mientras sujetaba a Ana para llevarla de regreso a la casa.

- No es mío, es de Luis. Anda obedece a Tania enseguida voy.

Ana entro a regañadientes. Luis soltó una carcajada.

- Me temo que nos han pillado Blanca. ¿Es tu hermanita? Es muy linda. Como tú.

Acaricio mi rostro, lo que provocó me sonrojara.

- La realidad es que no estamos haciendo nada. - comenté apenada- ella es mi hermanita Ana una de las gemelas. Disculpame tengo que entrar, ya es tarde y sigue despierta.

- Lamento lo de tu hermanita, si claro nos vemos otro Día.

- Gracias por todo Luis. No tengo manera de agradecerte lo que hiciste por Tania.

- No fue nada, Cuidate mucho.

Me disponía a bajar del auto, cuando me sujeto de la mano.

- Blanca. ¿Puedo darte un beso?

Sus palabras me pusieron muy nerviosa, la realidad  es que jamás había dado un beso, sonará curioso pero a los clientes jamás los besaba. Quedé enmudecida mientras Luis se acercaba lentamente, sentía una sensación en mi cuerpo que jamás había experimentado. Estaba realmente emocionada. No tenía idea de que hacer, así que sólo cerré mis ojos. Sentí un cálido beso en la comisura de mi boca, lo cual me provocó un escalofrío en todo mi cuerpo, fue una sensación agradable. La mejor que había sentido.

- Gracias Blanca.

Me lleve la mano a mi boca mientra abría lentamente mis ojos. Lo único que puse decir fue...

- ¡Luis ! ¡Jamás me habían besado! ¡fue hermoso!

Sonrio y me acaricio nuevamente la mejilla. Yo baje del auto, antes de entrar a casa, moví mi mano diciéndole adiós, mientras se alejaba en su auto...

*LUNA Angelita *
Karla Noguez

Mi nombre es Blanca y soy ProstitutaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora