CAPÍTULO 39

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MI NOMBRE ES BLANCA Y SOY PROSTITUTA

*LUNA Angelita*
Karla Noguez

La inauguración fue un éxito, teníamos casa llena, Don Jacinto tenía muchos Clientes en la barbería y muchos de ellos fueron para saber que negocio es el que teníamos ahora.
Como era de esperarse, llegaron Señoras  que únicamente fueron a ver pero no entraban, únicamente nos miraban desde afuera y hablaban entre ellas.

Pedro junto con Ana se encargaban de cobrar. Mientras que Jesus atendía las mesas.
Pedro no dejaba de hacer cuentas y se le miraba muy contento y complacido.

- Nos fue mucho mejor de lo que esperaba.

- ¿De verdad Pedro?

- Si a este paso recuperarnos la inversión en menos de 3 meses.

Tania se acercó y le comento.

- Eso espero porque termine demasiado cansada. Debí  dejar el cuarto del abuelo con el catre, estoy muerta.

Entre todos limpiamos el local, unos limpiaban las mesas mientras yo lavaba los trastes y Tania se encargaba de lavar la estufa. Al cerrar el Sr David nos llevo a casa, en el camino Ana se quedó dormida y al llegar Jesús la desperto para que entrarán.  Nos quedamos afuera Pedro, el Sr David y yo.

- Blanca me ire fuera del país, pero regresare para tu graduación, quiero comprarte un vestido, para ese día.

- ¡No! yo ya tengo un vestido, me lo compro mi Abuelo y ese será un  buen momento para usarlo.

- Muy bien estaremos aquí 2 días mas. Para que Pedro te enseñe los números del negocio.

- Yo quiero quedarme Tío

- Lo lamento Pedro, tu padre me mataría si te dejo solo.

- No soy un niño.

- Bueno eso tendrás que hablarlo con tu padre.

Podía notar la molestia de Pedro, pero ¿Cómo podria ayudarlo?

- Yo puedo apoyar a Pedro En lo que necesite si desea quedarse.

- Jamás me dejará mi padre Blanca, para él soy un inútil. Que no puede valerse por si solo.

- Pedro, no digas eso, tú padre se preocupa por ti eso es todo. - mencionó el sr David.

Los días pasaron y la cocina era todo un éxito yo deje de ir a casa de Paty.   Tania iba 2 veces a la semana. Pero ya estaba decidida a no regresar. Eso me alegraba demasiado, que por fin lograremos salir de aquel lugar.

- Blanca, Paty no deja de preguntar ¿Cuando regresarás? Es lógico se le fue su mina de oro.

- Tengo mucho trabajo en la cocina. Además ya no quiero regresar.

- Claro que no regresarás. Aunque diga que eres una malagradecida.

- ¿Malagradecida? Si no ha hecho más que explotarnos.

- Lo se, por eso tenemos que trabajar mucho para poder dejar eso atras.

Esa tarde me sorprendió la vosira de Paty en la cocina.

- Hola Blanca. ¿Cómo estas? ¿Qué tal les va en este lugar?

- Hola Paty, bien Gracias, nos va muy bien.

- ¿No piensas regresar a la casa?

- Lo siento pero nos va muy bien y aquí puedo trabajar con mis hermanos.

Paty caminaba de un lugar a otro, con sus zapatillas y su blusa de lentejuelas. Observaba todo, miraba de reojo a los clientes que se encontraban comiendo. Tomo una silla y se metió a la cocina, donde se sentó aún costado de la mesa donde acostumbrabamos preparar los alimentos.

Mi nombre es Blanca y soy ProstitutaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora