Tan acostumbrada a tener el papel de mala qué ya me lo sé de memoria todas mis maldades, sé en reversa los nombres de mis víctimas, reconozco sus gritos y sus voces de socorro, sé sus debilidades, sé provocarlas, hacerlas arder en llamas. Soy tan asquerosa que mi saliva las hechiza, tan malvada que lágrimas de admiración me derraman, tres palabras y conmigo jamás se meterían, ni mi nombre pronuncian.
Con está actitud de nena mala gané mis respeto y el miedo, mírame como tú quieras, de arriba a bajo de abajo a arriba, dando la vuelta o quieta en un lugar, tantas admiradoras a mi alrededor, quieren imitarme pero no llegan a igualarme. Nunca se me escapó una lágrima de dolor pero sí una mirada asesina que las hipnotiza, odiada por todas las chicas en la mañana, el tema principal y favorito de la morocha y la rubia, dos de mis sombras favoritas, suban que desde arriba no puedo verlas, no me tienen en cuenta pero, me piensan para poner mi nombre en sus lista negra, ingenuas.
Lo siento, el papel de doble cara no va conmigo tengo una sola y es sin censura, sin pelos en la lengua y con carácter fuerte de solo entreabrir mis labios sus piernas están temblando, tranquila chica no tiemble solo voy a decir un par de verdades, prometo dejar los insultos de lado, a veces hay que ser correctas.
Hago que sus personajes de chicas buenas desaparezcan como por arte de magia, si van a tirar hay que saber esperar el regreso, ¿mamá y papá jamás les dijeron que en los actos sin pensar hay consecuencias que asumir? Mi sangre hierve 24/7 y no hay comentarios sobre mí que pueda pasar de ser percibido, no quiero dejar a nadie sin mi servicio, espero que lo sepan entender.
Y la chica con su cabello de algodón de azúcar se metió conmigo, jugó a ser la víctima y perdió, que suerte por ella que su veneno no la envenenó, bueno dicen que hierva mala nunca muere, es de admirar a aquella muchacha para ser honesta, le aplaudo su actuación solo le faltó el teatro, audiencias ya tuvo. Lleva su religión en las venas, ama a su Dios y yo aprendí a ser su pesadilla, su más hermoso y apreciado lucifer, ahora rezame para que no escupa mi veneno en la cara de tu nene.
- Cabañas Milagros.
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MOMENTOS; Cabañas Milagros.
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