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Ya había pasado un mes desde que nuestras chicas llegaron a ese misterioso lugar, y ya se estaban acostumbrando a todo lo que pasaba en aquel sitio, como destrozos por la deterioración, cosas que se mueven por si solas, animales que salen de lugares pequeños y peleas entre hermanos sin mencionar que cada mañana los dos muchachos desaparecen al amanecer.

Una noche habían terminado su limpieza diaria se dispusieron a prepararse para descansar, tomarían turnos para bañarse y Emma fue la primera en entrar a la ducha.

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—mmm... que bien se siente el agua—decía la peli naranja dentro de una bañera con agua caliente— me pregunto ¿que pasara en el pueblo?—coloco una mano en sus barbilla en forma de duda mientras también mira detenidamente el reloj de pared que estaba a un lado (había muchos de esos por todo el lugar)—mmm... creo que mejor ya salgo.

La peli-naranja salió de la bañera para después secar su cuerpo con la toalla, paso la tela por su cabello pero no se esperaba que cierta persona entrara a buscar algo en el lugar.

El cabello blanco de cierto chico se hizo presente junto con sus ojos color zafiro, la chica con las manos en la cabeza junto con la toalla quedo sorprendida, su cuerpo de un chica de casi 18 años estaba a la vista, tardaron unos segundos antes de que los dos reaccionaran.

—E..Emma Pe..Perdona fue sin quere— uno bote de shampoo golpeo la cabeza de Norman.

—AAHH!! Sal de aquí, Pervertido!!!— se cubrió con sus brazos sus ahora grandes pechos (si señores, grandes) para que este no los viera pero era demasiado tarde el ya había visto eso y mas.

Después de eso Emma se dispuso a cambiarse e irse lo mas rápido posible del baño.


Chicos fue corto pero me gusto

𝚃𝚄 𝙳𝚄𝙻𝙲𝙴 𝚂𝙰𝙱𝙾𝚁 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora