El Medium ~• Jicheol

XVI

--Descansa bien...recuerda que mañana acompañaremos a Wonwoo al café ese de gatos del que tanto habla...-- Mencionó el mayor luego de que Jihoon bajara del auto, habían vuelto de una pequeña cita por la Namsan Tower y sus verdes caminos, llevaban unas semanas de novios y no podía ser más idóneo.

Jihoon nunca fue de creer en las relaciones amorosas, esos cuentos endulzados e idealizados solo lo lograban enojar, pues sabía que ninguna relación era así, habían peleas, desacuerdos, mentiras, roturas de corazón, engaños que dolían para la eternidad en lo más profundo del alma, pero al lado de SeungCheol todo parecía de película, todo era tal y como decían los cuentos, todo era perfecto y en cierto modo le asustaba, el mayor era parte de sus misión y no sabía hasta qué punto relacionarse sentimentalmente con él estaba bien, pero por el momento, quería dejarse llevar y disfrutar lo lindo de su amor.

--Claro, le avisare a Chan para que esté listo...no trabajes hasta tan tarde Cheollie, tu ojeras son cada vez mayores, descansa un poco...-- Respondió escuchando como el mayor reía y ponía el auto en marcha nuevamente, ese día doblaba turno.

--Lo se Jihoonie tranquilo, igual me quieres así...me voy, el jefe me va a regañar si llego tarde de nuevo...te amo-- Se despidió el mayor acercándose a Jihoon y dándole un fino beso que alegró la pesada noche que se le venía a su novio.

--Yo también te amo ...adiós...—Respondió cerrando la puerta del auto y despidiéndose con la mano hasta que este se perdió por la calle principal, suspiró asiendo crujir sus huesos, había sido un excelente día, pero tenía cosas que hacer.

Con la puesta de sol subió a su departamento por las escaleras y abrió la puerta entrando directamente a la cocina para tomar un poco de agua, SooMin apareció segundos después sentada a su lado en la encimera mirándolo con clara burla.

--"Yo también te amo" ... eres un cursi, vamos dilo, di que te enamoraste hasta la medula de ese chico...-- Comentó en un tono juguetón, Jihoon rio mientras tomaba el agua y dejó el vaso ya vacío en la mesa para mirarla fijamente.

--Cállate...yo Lee Jihoon acepto orgulloso que me enamore completamente de ese idiota... ¿feliz?, momentos como estos me hacen valorar mi vida sin una hermana – Siseó ganándose un golpe de su trasparente acompañante, sonrió, le encantaba molestar a la eterna adolescente, era un placer culposo ver como se enojaba.

--Vamos es tiempo de ir a leer esos enormes libros... Jihoon, sabes, todos sabemos que quieres volver a hacerlo con tu novio, pero tiempo al tiempo hermanito –Habló en venganza logrando sacar todos los colores a Jihoon quien se volteó rápidamente para perseguirla ya que se había escapado al salón.

-- ¡Vuelve cobarde! ¡Como sabes que estaba pensando pequeña demonio! ¡SooMin! –Gritó al no verla por ningún lado hasta que una cabeza sobre salió del techo riendo a más no poder.

--¡Cosas de muertos Jihoon! ¡Vamos que Jisoo nos está esperando! – Gritó de vuelta desapareciendo en segundos seguida por Jihoon, leer los pensamientos de su hermano era su pasatiempo favorito.

Ambos se habían trasportado al mundo ancestral, junto a SooMin habían estado leyendo por semanas enteras casi todos los libros que tenía Jisoo sobre seres ancestrales y demonios, pero por mucho que buscaran ninguno parecía encajar con el mayor.

Claramente SeungCheol no era humano, al menos no es su mayoría y tenían saber si o si quién era en realidad, entender que poder extraño guardaba el mayor, saberlo sería estar un paso más cerca de saber en qué consistía la misión, el tiempo estaba contado y entre más estudiaran más posibilidades había de estar preparados para aquel misteriosos suceso.

Los hermanos aterrizaron entre luchas juguetonas en el despacho del dios, rápidamente tanto Jisoo como JeongHan los separaron, esos dos vivían día y noche peleando, haciéndose bromas o gritando, pero se querían mucho, se notaba a gran distancia el fuerte lazo que los unía, se necesitaban mutuamente, ni siquiera la muerte los podía separar.