II

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Todo comenzó cuando íbamos con el Benja y la Cris en el bus con destino a lo que sería "el viaje de nuestras vidas" en donde todo podía pasar y que se quedaría ahí, como en Las Vegas pero no teníamos tanta plata para ir allá, en fin, estábamos llegando cuando el bus pasa cerca de la playa y se divisaban a las orillas del mar ellos, los surfistas, siempre he tenido una atracción hacia ellos, su forma de vida, su look, todo.

- Cris, tenemos que venir a la playa esta noche.- le dije a mi amiga que llevaba su pelo rojizo y crespo trenzado y unos lentes de sol que la hacían lucir como un buho y resaltaban sus pecas.

- ¿Por qué? - Saltó el Benja.

- No ves que la Anto pinchó.- Le respondió coquetamente la Cris.

Creo que estos dos tienen algo, ahí hay onda, aunque no sabría distinguirlo ni puedo asegurarlo porque soy súper pava y tendrían que estarse besuqueando en mis narices para que yo me diera cuenta.

- Encontré al amor de mi vida.- proseguí yo.- o al menos al amor de mi verano.

- ¿Creís que si venimos a la tarde lo vamos a ver?- Cris me miró con cara de malicia.

- Sí, demás, estos sirenos están 24/7 en el agua.

- ¿Cuál es tu próxima víctima?

- ¡Ese!- Apunté por la ventana.- El de negro.

- Pero amiga, todos están con trajes negros.

- Ah, pero si volvimos a venir me voy a parar al lado de él y te lo voy a señalar.- Comencé a apuntar al Benja con los dos brazos.- ¡Este, Cris, este!.

Los tres nos largamos a reír.

Bajamos del bus, fuimos a recojer los bolsos y a ver qué hacíamos primero cuando se nos acercó una mina rubia, ojos azules como las de las revistas. Estaba bronceada y llevaba la parte superior de un bikini con un short.

- Chiquillos, supongo que hoy no se pierden la fiesta

- ¿Cuál fiesta? - le dijo el Benja interesado.

- La de hoy a las ocho de la noche, en la playa ¿cómo es que no estaban enterados?

- Es que acabamos de llegar hoy.- Aclaré yo.

- En todo caso se les nota, son los tres unas pantrucas con patas, en especial la peliroja.

- Cris, me llamo Cris.- Saludó mi amiga tendiéndole la mano.

- Amalia, mucho gusto, no se olviden de el megaevento de hoy, habrán DJs, Concursos y varias sorpresas.

- No te preocupes Ama... ¡Amy! Que obvio que estaremos ahí.- intervino nervioso Benja. Ya se enamoró este niño.

Amalia se despidió y se fue con rumbo a otro grupo de jóvenes.

Subimos al departamento que habíamos arrendado a dejar los bolsos, estaba todo muy ordenado, tenía un gran salón con una tele gigante, dos dormitorios y una cocina completamente equipada.

Nos sentamos al sillón para ver televisión pero no había nada bueno así que nos dispusimos a poner música y sacar la ropa de nuestros bolsos. Prendí la radio y estaba terminando "Paradise" de Coldplay y luego empezó "Magic" también de ellos "hoy es mi día" pensé, la radio me leyó el pensamiento al darme este gusto sabiendo que es mi grupo predilecto.

- Anto, ¿qué nos pondremos esta noche?.- interrumpió Cris en mis pensamientos.

- No sé... ¿Vestidos?

- Cierto, tengo uno blanco perfecto para la ocación.

- Yo uno azul que me quedará divino con unas chalas que ví en el puesto artesanal de acá abajo, ¿vamos a vitrinear un poco?

- Me parece, espérame que saco las llaves y vamos.

- ¿A dónde van el par de sirenas?.- Benja acababa de salir del baño.

- Con todo lo que comimos, más que sirenas, ballenas yo creo.

Benja rió.- Ay Anto, que eres loca, ya suéltenla, ¿a dónde van?

- A portarnos mal sin tí.- respondió Cris.

- Pórtense muy mal entonces y tráiganme un sandwish por favor.

- Benja, en el refri hay de todo para preparar mínimo quinientas de esas porquerías.

- Exacto, para preparar, y yo no quiero preparar, quiero comer.

- Ya, si volvemos te traemos uno.

Salimos como todas unas pantrucas con patas como nos llamó Amalia y fuimos a comprar, recorrimos todos y cada uno de los puestos que estaban ahí, compramos tenidas como para una semana y nos devolvimos al departamento.

Arena BlancaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora