* Ring ring *
- ¿Antonia?
- ¿Sí?
- Soy André, el de anoche.
- Oh... - Estaba nerviosa.
- ¿Estás?
- Hola, perdón, te ha contestado mi amiga.- fingí.
- Se nota que ustedes dos son muy cercanas, si hasta por teléfono suenan iguales.- rio
- Sí.- reí fingidamente con él.- Eso es lo que ha pasado, ¿cómo estás?
- Todo bien, pero llamaba por otra cosa...
"Quiere sexo" pensé, luego sonreí con mi alocada idea.
- ¿Otra cosa?, ¿Qué sucede? - Mi tono de nervioso pasó a coqueto.
- Anoche de camino a casa me caí y me he roto una pierna.
- Eso significa...
- Que no podré darte clases hoy.
- ¡Eso! Eso significa, igual yo tampoco estaba lista para ir, de hecho justo también yo te iba a llamar para cancelar.
- ¿A ti que te pasó?
- Mh... No tenía traje de baño.
- ¿Y el que llevabas puesto anoche?
- Era de mi amiga Cris, sí, y hoy se lo llevó porque fue a pasear con Benja.
- ¿tú por qué no fuiste?
- Porque no quería quedarme ahí como tonta mirándolos bañándose y gozando del agua.
- Pero por último a cuidar las cosas. - Rio
- Noooo, ni hablar, mejor me quedo en el depa, sola... Sin nadie... Sin nada que hacer...
- ¡Tengo una idea!
- ¿Cuál?
- Yo igual estoy solo, ¿y si vemos una película en mi casa? - Típica excusa para fornicar, justo les pasa algo con las piernas, o cualquier lesión y llaman a todos los números de mujeres fáciles y viajeras de la noche anterior.
- Me parece perfecto.
- Ven entonces.
- No sé en dónde vives.
- Voy por ti.
- No sabes en dónde estoy alojando.
- Pero si anoche te fui a dejar...
- ¡Cierto!
- Espérame en diez minutos lista.
- Bueno, mi pez se está ahogando, tengo que colgar, adiós, te espero.
- Pero si...
Me quedan exactamente siete minutos para verme desente y no he hecho nada al respecto, aún tengo el maquillaje todo corrido de anoche, demás está hablar de mi olor a indigente, estoy rancia y tengo ahora cinco minutos para trabajar en mi.