Melting your heart. { Jiang Cheng & You } TERMINADA!

8- La casa de madera.

(Ambientar la lectura ayuda a imaginar lo sucedido en la historia. Por eso a partir de ahora pondré algunos vídeos de música que puede ayudar a ponernos en situación. )

Abrí mis ojos nuevamente. Había perdido la noción del tiempo, ni si quiera sabía cuanto rato había pasado. Tan sólo podía oír el suave sonido de las cuerdas del guqin* sonar. Giré mi cabeza, por un momento pensé que había ido al mismo cielo pues Lan Wangji estaba tocando, sus ropas blancas y su piel tan delicada parecía que fuese el mismísimo ángel. Sus manos paseaban con elegancia sobre el instrumento, hasta que pudo notar como me incorporaba. 

-¿Te sientes mejor?- Preguntó mientras se levantaba dejando que sus largas ropas se acomodasen. 

Miré mi cuerpo, estaba vendado. Supuse que alguien del GusuLan había tratado las heridas. Y con la ayuda de la habilidad de su guqin me sentía mucho mejor.

Asentí con la cabeza. -¿Y la chica? ¿Está bien?- Miré hacia los lados viendo la habitación vacía.

El chico sólo asintió con  la cabeza, y el silencio se hizo de nuevo. 

-Iré a buscar a Wei Wuxian.- Dijo abriendo la puerta de la habitación, marchándose por esta. 

Miré mi propio cuerpo, y después la habitación. Aún estábamos en el mismo pueblo. Aquella, era la habitación que habíamos alquilado en cuanto llegamos. 

De la nada, la ventana empezó a crujir. Y una mano que salía desde arriba, golpeaba el cristal. Aunque no con demasiada brusquedad. 

Mi menté recordó por segundos a la mujer de rojo. Y automáticamente me puse de pie a la defensiva, cogiendo el perchero que había en la habitación a modo de arma. 

La mano logró abrir la ventana y de esta, empezó a entrar un cuerpo humano. No era la mujer de rojo, sin embargo sabía perfectamente que no era algo humano. Sus ojos estaban en blanco, sus ropas parecían nuevas, sin embargo la piel grisacea y la esencia  de aquello podía decir que era como un ser que había vuelto a la vida. 

-¿Quién eres? ¿Te ha enviado ella? ¿Eres el marido de la mujer de rojo? ¿Vienes a matarme? ¿Eres enemigo o amigo? Vamos! Di algo! -Dije frustrada soltando todo lo que venía a mi mente. 

Aquel ser se quedó perplejo. Simplemente estaba de pie, e incluso se podía notar cierto nerviosismo en su rostro. 

-Ehm....Soy amigo. -Dijo en voz baja mientras daba un paso hacia atrás. 

Ante sus palabras me acerqué, aun con el perchero en la mano y apuntando hacia él. Amenazante. 

-¿Eres amigo? ¿Y quien te envía? - Dije mientras apuntaba mi ''arma'' hacia él. 

El chico, señaló tras mi espalda. Y al girarme, pude ver al mismísimo Wei Wuxian con la mano en su boca, tratando de contener la carcajada que soltó poco después. 

-HAhah...hahaha....eres...dios,  eres demasiado divertida!- Dijo mientras entraba risueño poniéndose al lado del otro ser. - Te lo voy a presentar, este es mi amigo Wen Ning.  

El contrario se inclinó haciendo una reverencia. 

Mi cerebro no podía procesar todo lo que estaba pasando. 

-Oh, quizás lo conozcas más como el General Fantasma.- Comentó con una sonrisa pícara. 

Y, nuevamente, quería que la tierra me tragase. Huir de aquel lugar de alguna forma. Dejé caer el perchero que tenía en mis manos y pestañeé varias veces mirando al chico.