⇝「Capitulo II」

4.8K 638 98
                                    

—Quiero a este.

—Joven, en los otros pasillos tenemos nuevos ingresos. — Dijo el guía al llegar a su lado. — Vamos para que vea a los nuevos y después decide cuál quiere.

—No, quiero a este.

—Este acaba de ser devuelto por no saber seguir órdenes. — Dijo el hombre que traía al esclavo del pelo.

— Le recomiendo ir al pasillo de los nuevos y recién entrenados.

—Dije que quiero a este.

—Joven, de verdad-

— ¿Dónde puedo dejar la queja de que no me están brindando un buen servicio? — dijo Jimin mirando a ambos hombres, quienes ahora tenían expresiones desconcertadas.

— He dicho que quiero a este.

Los hombres intercambiaron miradas y luego el guía miró a Jimin con una sonrisa forzada.

—Bien, sígame para hacer los trámites. — Dijo el guía y señaló a la salida. — Mi compañero alistará a su esclavo para que se lo pueda llevar tan pronto termine el papeleo.

Jimin empezó a seguir al hombre, pero antes de cruzar la puerta, se volteó y miró al hombre que "alistaría" al pobre esclavo.

—No quiero recogerlo con un rasguño más. — Dijo Jimin y el hombre lo miró con una ceja levantada. — Ahora es mí... posesión y lo quiero en buen estado. Es mío, así que cuídenlo.

El hombre asintió y levantó del brazo al arrodillado esclavo. Satisfecho, Jimin salió del pasillo y siguió al guía. Los trámites fueron más rápido de lo que esperaba y rápidamente vio como cruzaba el joven esclavo por la puerta del pasillo.

Ahora venía con la piel limpia y traía una camisa y pantalón color café. Venía caminando con la cabeza gacha y con las manos a la espalda, su cuerpo en total sumisión.

—Aquí tiene la información del esclavo C-301. — Dijo la mujer y le entregó a Jimin un folder con un par de papeles. — En caso de devolución, tráigalo consigo. Muchas gracias.

Jimin miró a su madre y ella asintió. Juntos empezaron a caminar al auto, el joven esclavo siguiéndoles los pasos. Jimin caminó hasta la puerta y la abrió para el chico. El esclavo frenó cuando vio la acción de su nuevo dueño.

—Vamos, entra. — Dijo Jimin con un tono amable y el esclavo se atrevió a mirarlo a los ojos un instante.

La sonrisa que vio en ese instante fue lo que lo impulsó a entrar al auto y tomar asiento. Se sorprendió aún más al ver a su dueño abrocharle el cinturón, como si fuera un niño... un niño libre.

Estaba acostumbrado a que lo transportaran en las cajuelas de los autos.

—Jimin... — Dijo su madre cuando ambos habían entrado al auto.

—Sácanos de aquí, mamá, por favor. — Dijo Jimin mientras se abrochaba el cinturón de seguridad.

Su madre no dijo nada, solo encendió el auto e inició el camino hacia su casa.

A mitad del camino, Jimin no aguantó más.

—Mamá detente... — Murmuró y su madre se orilló lo más rápido que pudo.

El auto no había frenado del todo cuando Jimin ya había salido de aquel y ahora vomitaba todo el contenido de su estómago a la orilla de la calle.

.・✫・゜・。..・。.・゜✭・

Liberame «JIKOOK» ┇ AdapDonde viven las historias. Descúbrelo ahora