No Fue Mi Culpa. ♥ ➸ JaeYong℠ ❀

40♕Otro amor.

"Todas mis lágrimas han sido gastadas..."

Todavía no se acostumbraba a la tranquilidad y calma del lugar. Todo era tan tranquilo, que parecía irreal. Solo llevaba 2 días ahí, su nuevo hogar lejos de la ciudad, se acostumbraría pronto o eso era lo que esperaba, 3 meses desde que se separó de JaeHyun. En esos largos tres meses, su tía se había convencido de que necesitaba salir, por lo que lo llevo a cada plaza y tienda del pueblo.

Era algo muy hermoso.

También convivía bastante con Yeri, era divertido estar con su prima, pero le molestaba que lo siguiera tratando con si pisara cascaras de huevo alrededor de él, como si fuera algo peligroso.

Iban en el auto, no bastante convencido, pero irían a ver al tal psicólogo que lo atendería. No tenía nada, pero Johnny le compraría su videojuego y eso era algo que no podía rechazar.

Estaba acurrucado en la puerta del auto y viendo por la ventana, Johnny iba conduciendo y su tío en el asiento del copiloto, a lado de él estaba Mark pero no le prestaba mucha atención.

El viaje era silencioso e incómodo.

Otra cosa que sabía, era que Johnny y Mark no estarían con él en su nuevo hogar, tampoco Jaemin, ya que Johnny trabaja en la empresa, Mark y Jaemin viven en la ciudad.

Había investigado un poco, estaban a 150km de la ciudad, por el sur. El pueblo tenía un clima tropical con lluvias de verano, bastante comerciante y turístico.

No había muchas escuelas por ahí, tampoco medios de transporte extensos, pero contaba con buenos servicios. La mejor forma de ir a la ciudad era tomando 3 autobuses de una hora cada uno. Sí, eso también lo había investigado, sólo por curiosidad.

Estacionaron el auto en una calle sin mucha gente y muy bonita, donde había casas con piscinas y jardines tropicales como palmeras.

Salió del auto con pesar y sólo siguió a su tío por donde lo guiara. Tocaron el timbre y la puerta se abrió por un chico de cabello negro, joven, de apariencia casual y reservada, no parecía psicólogo, o eso pensaba Taeyong.

Los invitó a pasar con elegancia. La casa por dentro se veía normal, hasta que los llevo a una habitación rara donde ya todo se veía de oficina, se detuvo observando los reconocimientos y diplomas colgados en la pared.

-Taeyong-Lo llamó, su nombre pronunciado en sus labios le provocó escalofríos al menor. La observó con el ceño fruncido. No le tenía confianza.

❧❧

JaeHyun estaba en su casa, en la cocina, observaba por la ventana que daba al gran jardín verde, había decidido quitar las cortinas que lo cubrían, las cuales estaban polvosas. No podía sacar de sus pensamientos a Taeyong.

Era su día libre y era lo único que pensaba, prefería estar en la oficina atareado de trabajo, al menos así se distraía un poco.

Se pasó la mano por el cabello y luego abrió la alacena por un vaso, se sirvió agua, tomó un poco y luego la volvió a escupir.

El sol de mediodía iluminaba el agua y su rostro, abrió la llave y comenzó a remojarse el rostro. Se acercó al ventanal por el que a su hermano le encantaba admirar el cielo, entonces notó algo en la coladera. Un objeto brillante.

Confundido, prendió la lámpara de su celular para tratar de ver lo que brillaba, había algo en el fondo.

Se agacho y abrió la reja que ocultaba el fondo. Sacó unas cuantas herramientas a la mano y trató de alcanzarlo, pero no podía. Volvió a encender la lámpara. Metió sus dedos por la estreches del tubo. Logró tomar algo sin saber aún muy bien que era, parecía un aro, tiró de él con fuerza logrando sacar un objeto y algo de agua atorada ensuciándolo.