Amor a primera vista. (BTS)

CAPITULO 10: "¿¡Jimin!? ¿¡Park Jimin!? ¿BTS?"

*JADE*

 Ah pasado cerca de dos semanas; después de aquel día de mi cumple años, después de que sorpresivamente salí con Jimin muchas cosas cambiaron unas para bien, otras pues… un tanto para mal. Mi relación con Jimin digamos que mejoro mucho pero aún sentía la curiosidad de conocer cada rasgo de su cara y ver esos ojos que solo logre ver por menos de un minuto pero que marcaron una gran impresión dentro de mí. 

Me había cambiado de rota por algo más informal ya que mi turno había terminado. Caminaba por el pasillo de la oficina con el bolso colgando de mi hombro dispuesta para salir de aquí ya que hoy saldría con Jimin.

 -¿Ya de vas Jade? –Escuche que Do Yeon me llamaba y gire a verla-

 -Sí. ¿Por qué?, ¿Paso algo?

 -No, es solo que te venía a decir si querías salir conmigo y las chicas a ver la nueva película de T.O.P.

-Me mordí un labio- Lo siento… Jimin me invito a salir hoy.

 -¿No crees que estás pasando mucho tiempo con él?

 -Solo eh salido con él dos veces…

 -Como sea. –Se dio la vuelta al mismo tiempo que rodeo los ojos fastidiada y se dirigió al escritorio de Yoona-

 Confundida salí del edificio y comencé a caminar con la cabeza baja hasta el parque del rio han donde vería a Jimin.

¿Por qué Do Yeon esta así? La veo todos los días como para que diga que no le preste atención.

Luego comencé a recordar las últimas dos semanas, cada detalle se comenzó a reproducir en mi cabeza y me di cuenta de algo. Simplemente desde que vi a Jimin deje de hablarle de una manera que hasta a mí me sorprende, es cierto estábamos en casa juntas pero las cosas eran diferentes; yo siempre estaba pegada en el teléfono hablando con Jimin que no le prestaba ni la mínima atención a Do Yeon que mejor ella salía con Yoona o se iba a sé habitación y todo resuelto. En el trabajo era todo igual, yo estaba concentrada en mi trabajo y de vez en cuando me distraía pero Do Yeon estaba igual.

 Las lágrimas comenzaron a brotar de mis ojos. –Debo decirles soy muy sentimental- me di cuenta de que ahora estaba pisando césped y no el duro cemento gris, levante la mirada para encontrarme con lo que era el Río Han.

 ¿Cuánto tiempo estuve caminando?

Revise mi teléfono para darme cuenta de que había tardado una hora y media. Me apresure a buscar con la mirada a Jimin o bueno… a un hombre disfrazado de ladrón. Mi teléfono vibro y lo tome sin mirarlo colocándolo en mis oídos.

 -¿Sí? –Dije sin prestarle mucha atención-

 -Deja de buscarme y presta atención al teléfono. –Dijo en la otra línea y mis ojos se abrieron al tope, sin importar lo que me hubiera dicho seguí buscándolo desesperadamente con la mirada y su risa se escuchó retumbando en mis oídos- terca.

 -¿Dónde estás?

 -Te diré en cuanto dejes de llorar.