No podía dormir, estaba con la cabeza en otro lado, habían muchas cosas que me preocupaban. Intenté varias posiciones para conciliar el sueño, pero ni una me terminaba gustado.
- ¡MAMÁ!
Salí de la cama como bala cuando oí el grito de mi hija. Fui corriendo a su habitación y al llegar me la encontré siendo abrazada por su madre.
- ¡¿Qué pasó?! - Pregunté alarmado ya que en el suelo había un vaso de vidrio quebrado y la alfombra estaba mojada.
- Tenía sed y fue a la cocina, dijo que vio a un hombre en la ventana y se asustó - Yo me acerqué a ellas y mi hija me abrazó con fuerza - Bajé corriendo y me la crucé en la escalera, estaba aterrada.
- Y lo continua - Mi hija temblaba - Princesa, quédate con mamá - Ella no me quiso soltar - Vamos, hazlo, ¿si?
Lucy tuvo que separarla de mi, la abrazó y juntas se metieron a la cama.
- ¿Qué harás?
- Averiguar quién es el tipo que la asustó.
- Tal vez se lo imaginó.
- ¿Y si no? ¿Y si es un ladrón que quiere hacernos daño? - Lucy comprendió - Vuelvo en unos minutos.
La dejé y fui a mi habitación para sacar mi arma, por mi familia era capaz de todo con tal de protegerla. Con cuidado bajé a la cocina y fui revisando cada rincón para asegurarme que ese engendro del mal no haya ingresado.
Por suerte no hallé nada extraño dentro.
No me sentí conforme y salí al jardín para revisar los alrededores. El perro del vecino comenzó a ladrar por lo que supe que no estaba solo, había alguien rondando cerca de mi casa.
- ¿Por dónde Firulais?
El perro ladró en dirección a la calle, corrí para alcanzar al desgraciado y por la poca luz solo logré ver una figura a lo lejos.
Estaba huyendo.
No lo pensé dos veces y disparé en su brazo derecho, solo lo roce pero aún así cayó al suelo adolorido. Me fui acercando a su cuerpo y antes de llegar a él, el muy hijo de puta se levantó y sosteniendose la herida se escabulló entre las casas.
Maldije al perderlo de vista, pero tarde o temprano como vuelva a verlo cerca de mi familia o en casa de alguno de mis vecinos lo iba a refundir en una cochina celda, pero antes le daría una paliza donde deseará mejor no haber nacido.
- ¿Había alguien? - Preguntó Lucy cuando me vio entrar - ¿Natsu?
- Logró escapar - Dije, mi hija volteó a verme triste.
- Catalina, no te preocupes - Lucy la besó en la mejilla - Tú papá lo va a encontrar y nunca más volverá aquí, él conoce a esos tipos y no dejará que nada malo nos pase...
- Si, hija - Sonreí - Además no creo que vuelva por aquí, le di una lección para que no se atreva a acercarse otra vez a nuestra casa.
- ¿Y si vuelve?
- Jack, el perro del vecino, nos avisará, él me ayudó a espantar a ese tipo - Ella sonrió - Aquí todos te vamos a proteger.
- ¿Puedes dormir con nosotras?
- Si, Natsu. Catalina tal vez así logre dormirse, se sentirá más segura - Lucy y mi hija me hicieron un espacio - Tú la conoces, para ella eres como un escudo.
- Está bien - Sonreí.
...
A la mañana siguiente desperté a eso de las seis de la mañana, Catalina seguía dormida y su madre no estaba. De seguro Lucy hacía el desayuno. Me levanté con esmero de no despertar a mi hija y la abrigue para que no sienta frío.
En la sala encontré a Lucy sin duda ordenando el desastre que hicimos ayer al momento de ver la película. La saludé como todas las mañanas y ella respondió con un tono negativo, decaído.
- Iré a limpiar las habitaciones, ahí te dejé el desayuno - Señaló la mesa.
- Heartfilia - La sostuve cuando estuvo por perder el equilibrio al subir las escaleras - ¿Qué pasa? ¿No pudiste dormir bien?
- No, solo estoy estresada - Susurró - Puedo caminar yo sola.
- Te ves pálida - Me preocupe por su salud - Permite que te lleve a tu cama - Ella suspiró resignada y la levanté en mis brazos.
Subí escalón por escalón hasta llegar arriba, entré a su habitación propia y le dejé en la cama. Ella se acomodó y abrazó la almohada para descansar.
- ¿Tienes problemas con él?
- No, solo algunos disgustos pero ya nos arreglaremos.
- ¿Qué disgustos?
- Ya no importa, son tontos.
- Me importa - Ella giró su cabeza para verme - Yo no soporto más esto, hablaré con él para que no te vuelva a lastimar.
- ¡Natsu, no lo hagas! - Me detuvo cuando quise agarrar el teléfono junto a su cama - ¡Es mi problema, no el tuyo!
Dejé el telefono en su lugar y la observé serio, ¿Qué ocultaba? ¿Qué era aquello que no me quería decir?
- Dímelo.
- ¿Qué cosa?
- Lo que sea que haya pasado, quiero saberlo ya.
- No paso nada, ¿Por qué crees eso?
- Me lo dices ahora o yo mismo lo averiguo.
- No pasó nada, solo fue una simple discusión - Dijo con seguridad - ¡E-espera, B-basta! - se sonrojó cuando rompí los botones de su blusa - ¡Ya te dije que no paso nada!
Terminé de quitar esa molesta prenda y la dejé caer en el suelo. Lucy por reflejo se cubrió y se agacho para evitar que la vea.
- ¿Y esas marcas?
- ¡Nada! ¡No son nada!
La tuve que levantar y la obligué a bajar los brazos, por el contorno de sus senos habían unas manchas que no me agradaron.
- Déjame ver tu espalda.
- ¡Bueno, te lo diré pero detente! - Se movió de forma brusca cuando la quise dar vuelta.
- Te escucho.
- Él quiere un hijo - Yo quedé estático de asombro - Yo le dije que está bien, que se lo daría, pero cuando llegó el momento me arrepentí y bueno, a él no le gustó eso...
- ¿Te arrepentiste?
- Tú sabes, a la hora de hacerlo yo no quise - Explicó avergonzada - Le dije que no me sentía lista, que a Catalina no le gusta la idea de tener un hermanito, y eso tú y yo sabemos que es cierto.
- No, Catalina dijo que no quería un medio hermano, que no quería un cambio así en su vida.
- ¡Eso le dije yo! - Ella bajó la cabeza - Larcade se molestó conmigo, está cansado de que siempre lo rechace a la hora de "demostrarle" mi amor.
- ¿Y las marcas que traes? ¿Te las hizo cuando estaban por "Hacerlo"?
- No...
- ¿Entonces?
- Yo no quería, así que él perdió el control y trató de...
- ¡Maldita sea! - Grité con rabia.
- ¡Pero luego se disculpó!
- ¡Me da lo mismo! ¡De todas formas me va a oír!
.
.
.Continuará***
ESTÁS LEYENDO
|| Cuando el Peligro está en Casa "II°T" || 《 Fairy_Tail [Fanfic] 》
FanfictionNatsu es un adolescente de casi 19 años. Es un joven que no sabe el significado de "Responsabilidad". Un muchacho que solo piensa en mujeres y en fiestas. Solo le faltaba un año para ingresar a la Universidad cuando se enteró que sería papá. La noti...