8- Camuflaje

629 91 10
                                    

Después de esa noche todo fue tan diferente, los encuentros no pararon, a decir verdad, aumentaron a tenerlos casa noche.

Stiles seguía siendo tímido y algo callado y Derek cada vez intentaba algo nuevo.

El chico hasta ahora no había usado la palabra de seguridad, habían creado un lazo de confianza mutuo.

Y los que vivían en esa casa se daban cuenta de ello.

—¿Qué hay de comer hoy? —Jackson leía el periódico en una de las sillas del comedor.

—No estén de gorrón —Recibió un cucharazo en la cabeza. Jackson ni se inmuto ante el golpe de el de rulos.

—No te quejes que tú no haces la comida —le reclamó cambiando de página.

—Pero si te sirvo.

—Hablando de eso, ¿Por qué Derek no contrato más servicio? ¿Al menos te paga lo suficiente por ser el mil usos?

—Mi sueldo es lo suficiente para tu información y no suelo cuestionar la forma de vida de Derek.

­­­—Si sigue siendo tan araño se quedará solo —declamo.

—No creo que sea muy cierto...

—Hola chicos, buenos días —Stiles venia bajando las escaleras. Tallaba sus ojos con su mano libre. Tenía algunas ojeras, pero no estaban tan marcadas —¿Dónde está Derek?

Se tomo la libertad de referirse a él por su nombre cuando no estuviera presente.

—Salió por negocios dijo que checaría un nuevo material —le informo Jackson. Compartió miradas con Isaac presuntamente extrañados de que preguntara por el amo.

Stiles sentó a un lado suyo en la mesa.

—¿A qué es lo que se dedica? Bueno, la verdad no sé si se pueda saber esa información así que olviden mi pregunta.

Jackson e Isaac se volvieron a mirar con el entrecejo fruncido.

—¿Que no te lo dijo?

Stiles negó.

—Es juguetero. Él crea los mejores juguetes del país. Entre algunas que otras cosillas de decoración —Comió un bocado y lo trago apresuradamente —Es apasionado en lo que hace por lo que se toma la molestia de escoger el mismo los materiales que se van a usar en la fábrica.

—Ya veo...

Recordó aquella campana de viento que ahora colgaba en su respaldo. Bastante callada por ahora que se mantenían las ventanas cerradas por el invierno, pero eso pronto acabaría. Enero llegaría a su fin en algunos días y el mañana saludaría a febrero ya con climas más cálidos.

No se creía siquiera que ya había pasado casi un mes con su nueva vida. Un mes de no ver a su padre ni saber nada de su mejor amigo.

Los extrañaba. En aquellas noches en las regresaba a su habitación y se detenía un tiempo a mirar el techo, recordaba su vida en el campo junto a ellos.

Añorando esos días, con una mirada perdida al vacío recargo su cabeza en sus manos y suspiro.

Jackson e Isaac le miraban, pero Stiles estaba perdido en sus pensamientos.

—¿Qué le pasa? —susurro el invitado a la oreja de Isaac que se servía otra taza de café.

El rubio estiró los labios.

—No lo sé, en ese estado solo hay dos opciones —Jackson puso toda la atención en el asistente como si fuera el mayor experto —Está deprimido o se encuentra profundamente enamorado.

Innocent lust-SterekWhere stories live. Discover now