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Kihyun ríe dentro de su cabeza ante la absurda idea de creer que la clave está en el tren de la estación abandonada. ¿Qué tenía que ver esa máquina vieja y oxidada con esto? Nada. Absolutamente nada. Sólo puede tratarse de una coincidencia, es lo único que su sentido común puede decirle. Eso o es que algo mal hizo otra vez, pero sinceramente no tiene ganas de rehacer todo de nuevo. Es más, ¿qué demonios es lo que tiene que hacer? En estos momentos parece que su cerebro decidió irse de vacaciones para olvidar todo lo que tiene que ver con la física. Ese metro debe llevar ahí unos cuántos años vete a saber por qué, pudriéndose junto con el tiempo, cumpliendo su rol de ser pura chatarra sin uso alguno. Sin embargo es cierto que esa pequeña casualidad lo deja un poco intrigado. Por muy estúpido que se sienta.

—Esto es ridículo—bufa Kihyun, sintiéndose un idiota por creer que de verdad esa caja de metal vieja esconde algo. Hoseok lo mira confundido, esa expresión de burla que presenta el menor lo desconcierta un poco, ¿qué está mal? Porque para él, alguien que apenas tiene conocimientos de acuerdo a estas cosas y ni de broma se aprende la ecuación de la teoría de la relatividad, está bien. No entiende nada de lo que está escrito, pero de seguro debe tener algún sentido.

—¿Por qué?—pregunta Hoseok.

—4155102M—el menor voltea a ver a su mejor amigo, quien está detrás de él—. Es el número del tren de la estación abandonada.

El mayor tarda un tiempo en responder, tratando de entender lo que Kihyun le está diciendo. Frunce su ceño mientras se cruza de brazo, queriendo pedir alguna explicación. Mira el resultado escrito en la pizarra, logrando visualizar los números que el estudiante de física le había dado. Ahí comprende un poco más lo que ocurre.

—¿Quieres decir que el metro es la respuesta?—cuestiona Hoseok.

—Absurdo, ¿verdad?

—Demasiado—Hoseok arquea sus cejas—. Por Dios, es una casualidad Kihyun.

¿O quizás no?

Lee estaba a punto de continuar, de no ser por un par de cosas que encontró en el metro cuando se subió que se cruza por su cabeza, deteniéndose y dándose un momento para analizar. Él y sus amigos recorrieron los vagones, bajo la esperanza de encontrar algo interesante como pertenencias de valor de antiguos pasajeros o quizás ese cadáver del que tanto hablan los rumores, aquello que le dio cierre a la estación. Hoseok había ido a la cabina de control, encontrando botones y palancas extrañas que no tiene un metro común y corriente. No entendía para qué servían, pero habían muchas cosas innecesarias allí. También encontró unas cuántas carpetas del año 2015, lo cuál lo volvía aún más extraño porque la estación había cerrado años antes al dicho. No pudo leer su contenido, pues lo habían llamado para irse porque algo extraño habían oído y no querían meterse en problemas.

Hoseok lo piensa un poco, dándole vueltas a lo que vio y a la conclusión que sacó Kihyun. Todo carece de lógica y sentido común, lo cuál es extraño porque su mejor amigo es lo que más utiliza y necesita en la física. No sabe qué más agregar, todo no es más que una simple casualidad. La espera del menor en que su mejor amigo diga algo se acaba, por lo que él decide hablar en su lugar.

—Se demostró que el viaje en el tiempo es matemáticamente posible—dice Kihyun dejando la tiza sobre un banco para sentarse al lado de su mejor amigo—. No sé cómo, dudo que nos enseñen esa parte aún.

—Te hubiesen ahorrado todo el estrés—Hoseok sabe que el menor cambia de tema para evitar que la situación se vuelva mucho más ficticia.

—Sí, pero de todas formas necesito saber cómo viajar—responde Kihyun.

Train of Time [Kiheon/Kiho] [Monsta X]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora