En un lugar demasiado tranquilo y elegante de Europa Central, uno muy peculiar para ser verdad, se puede observar un enorme castillo y varias torres, además de algunas casas de madera y metal, junto a muchas palmeras y demás áreas verdes.
La vista pasa a segundo plano y ahora se enfoca en una nave que va llegando. Esta tiene los colores de Hydra, incluso su insignia bandera: La hidra de seis tentáculos.
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De la nave, un soldado con un traje estilo anti-radiactivo o de sigilo, baja y trae una misteriosa caja de madera consigo, con la insignia de la antigua nación nazi impregnada.. Y que se la entregaría a un hombre que lleva una especie de alfombra verde, que cubre todo su cuerpo y cabeza.
Quien recibe el paquete, parecía también vestir una armadura medieval, con estilo oscuro, elegante, con mucho brillo y algunos detalles grabados.
Entregado el encargo, el emisor se retira, dejando una gran ola de humo en aquellos aires extranjeros. "Mission erfüllt", se escucha decir al soldado alemán, con la cámara enfocada en la silueta de espaldas y notando esta que estaba sirviéndose una copa de vino de su lugar natal, exactamente una cosecha del sesenta y cinco llamada Gewürztraminer, que tenía pinta de ser una de las mejores del país frío.
La atención regresa al lugar que fue testigo del contacto entre los dos misteriosos sujetos y revelando así que el de capucha verde no era un hombre, sino una máquina.. Una máquina que se uniría a una cantidad considerable de demás ejemplares, para gritar al unísono: ¡DOOM, DOOM, DOOM, DOOM, DOOM VIVIRÁ!
