Capítulo 13

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Min se veía frente al espejo probándose uno de los vestidos en color guindo, era realmente hermoso.


Por el espejo vio a Sora quien acomodaba el vestido anterior que se había probado, estaba por preguntar cómo se veía el que vestía en ese momento, pero vio que la mujer estaba riendo.


-qué es gracioso?- Min interesado caminó hacia su doncella.
-que a pesar de saber que es un chico, tiene la capacidad de intimidar al Duque.
-sé que no está cómodo con esto- dijo Min triste- y es muy normal, incluso me sorprende que no me delatara.
-usted cree que él se comporta así porque no acepta su condición del todo?
-no es así?
-absolutamente no! El señor Cho se vuelve un idiota a su lado! Se pone nervioso, tartamudea y se pone torpe. Qué hombre se tomaría la molestia de comprarle los vestidos más hermosos y costosos solo porque sí y sin aceptar lo que usted es? Tal vez le cueste trabajo pensar que es un chico, pero debió verlo en la boutique. Realmente es exigente, pidió le mostraran vestidos dignos de una princesa- rió ante el recuerdo- y esto lo dijo en secreto, seguro creyó que yo no lo podía escuchar porque estaba viendo otras cosas.



Min la miró sorprendido y su rostro se puso rojo.



-crees que esté interesado en mí?
-lo que creo es que no le es tan indiferente pero también creo que él no se da cuenta o no quiere aceptarlo.- Min suspiró, talvez solo eran ideas de la mujer.
-y tú Sora, no me odias por mentirte?


Min la vio preocupado, realmente le importaba la opinión de quien más que ser su doncella, era su única amiga. Sora sonrió y negó.


-cómo podría? Le debo tanto, de no ser por usted y los señores Lee,  no sé qué sería de mí y mis hijas. Ustedes nos dieron techo y comida cuando nadie más lo hizo, todo el mundo nos dio la espalda al fallecer mi esposo y es casi imposible que alguien contrate a una viuda con tres hijas pequeñas. Simplemente en mi corazón solo hay gratitud eterna.


Min la abrazó fuerte y agradeció la lealtad de la mujer, sin duda le confiaría su vida.


♡◇♡◇♡◇♡◇♡◇



Habían pasado ya algunos días, KyuHyun estaba analizando un par de propuestas sobre negocios que tenía pendientes pero le estaba costando concentrarse.


Terminó su trago y dejó el vaso sobre la mesa, cerró los ojos y se recargó en el respaldo de su silla.



Llevaba aproximadamente un par de semanas de que Sungmin había llegado a su casa y apenas lo había visto en un par de ocasiones, por sus empleados sabía que el chico no salía de la habitación más que para ir al comedor cuando le llamaban , KyuHyun por su parte había pedido le llevaran la comida a su estudio pues quería evitar el contacto con Sungmin y había una buena razón para ello.



Esos sueños extraños le seguían despertado en la madrugada, bañado en sudor y con una increíble erección y es que precisamente era el joven Lee quien lo ponía de esa manera pues lo último que podía recordar era a sí mismo haciendo el amor en su habitación con Min quien apenas cubierto por una sábana blanca, gemía su nombre y se movía bajo su cuerpo, suplicando.



No sabía qué pasaba, pero temía que al ver a Sungmin  su cuerpo lo traicionaría. Pero por otra parte tampoco quería que el joven sintiera que lo estaba evitando aunque así fuera. Se sentía culpable por como le había tratado y ese era motivo suficiente para excusarse de todos los obsequios y detalles que tenía con el joven Lee.


Estaba tan inmerso en sus pensamientos, que no se percató de que tocaban a la puerta hasta que esta se abrió y Min entró.


-estás muy ocupado?


KyuHyun lo miró analizando si estaba ahí realmente o sólo su imaginación le estaba jugando una broma.


-sólo te vine a preguntar si hay algún problema si salgo a caminar a los jardines?


El duque negó y observó a Min quien vestía uno de los vestidos que le había regalado, era color menta. Le miró a los ojos y Min sonrió ampliamente, pero las imágenes de sus sueños llegaron a su mente haciendo que se moviera un poco incómodo en su silla.


-gracias!! Quieres venir conmigo? Has estado trabajando mucho.


KyuHyun pensó en negarse, pero cuando Min estuvo frente a él, el “sí" salió de sus labios automáticamente. Deseó golpearse la cara, pero no podía retractarse.


-pediré que preparen una canasta.
-Sora ya lo hizo- respondió Min sonriendo.
-estabas muy seguro en que diría que sí?
-no, pero pretendía suplicar hasta que aceptaras.


Más tarde, después de llevar casi una hora deambulando por los jardines, decidieron descansar bajo la sombra de un árbol y comer algo de lo que Sora les había enviado.



KyuHyun había estado muy callado en el paseo, Min supuso que pese a que su relación había mejorado bastante,  aún había cierta incomodidad para el duque.


Min miraba pensativo una de las flores que había arrancado, sin ser consciente de que el duque lo observaba con detenimiento.


Cómo era posible que un hombre pudiera ser tan atractivo? Porque le gustara o no, aceptaba que el joven Lee era bellísimo, incluso mejor que cualquier otra chica que él hubiera visto.



Sus ojos grandes y brillantes, dando esa expresión de inocencia, su piel tersa al tacto, limpia y blanca.



Esos labios que exigían ser tomados, bajó su atención al cuello, se preguntaba si Sungmin sería sensible de esa zona, por su mente pasaba la idea de morderlo para descubrirlo, lo había rosado anteriormente pero no lo suficiente para descubrir que provocaría realmente en el joven Lee.


Y fue entonces cuando notó que su cara estaba ardiendo al igual que su cuerpo, se sentía ansioso y asustado pues tener aquellos pensamientos le hacían odiarse a sí mismo y cada día que pasaba podía controlarlo menos.












Continuará...


Se nos viene lo bueno? 😏 jajaja
Gracias por leer, espero sus comentarios. Bonito día!

[KyuMin] My dear lady. [TERMINADO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora