𝐁𝐎𝐍𝐄𝐒 𝐓𝐇𝐄 𝐂𝐑𝐎𝐖𝐍 ━━𝐩𝐨𝐫𝐜𝐨 𝐠𝐚𝐥𝐥𝐢𝐚𝐫𝐝

𝙀𝙓𝙊𝙍𝘿𝙄𝙊

Las miradas sobre mi cuando giraba sin parar hasta sentir los mareos presentes. La profesora dictaba severa cada movimiento y regañaba en francés. Unas gotas de sudor aperlaban mi rostro. Suspire y volví a quedar de puntas cuando ella lo cito.

Era un objetivo en esa habitación. El objeto de atención y criticas, cada uno de ellos esperaba que cometiera un error. En mi cabeza todo a mi alrededor parecía tambalearse, moverse sin mi acompañamiento o retorcerse como bucles extraños.

Mi cabeza ya me jugaba malas pasadas pero, lo que realmente quería ahora era desfallecer por un minuto. Quiero parar y como ese mismo pensamiento se entrometió en mi mente, la voz de la profesora igual. Alzó la voz y estuve a punto de dar un mal paso de la impresión. Sin embargo realice la siguiente posición sin prejuicios aparentes mientras lidiaba con los internos e ignore el dolor en mis pies.

Tristemente la danza ya no me otorgaba la misma libertad que de pequeña una vez sentí. Se convirtió en un deber, una obligación a repetir días tras día incansable y dolorosamente.

Gira, gira y gira.

No debo parar pero quiero detenerme.

Voltee y pude observar por escasos segundos la única mirada de entre todas que en verdad me importaba sorprender.

Mi abuelo me sonrió y me serenó con tan solo eso.

Me eleve y dando la espalda a todos pude volver a dibujar una sonrisa.

Si rompo el vidrio voy a tener que volar y no hay nadie para atraparme si me hundo.

Horror, mis ojos tan solo reflejaban el horror sobre este sentir tan brusco y aterrador. Quede sorda por un fuerte sonido que retumbo por todo aquel espacio oscuro, sobre mis pies no logre sostenerme por mas tiempo y caí de rodillas.

La sangre estaba entre mis dedos sin reconocer el porque.

El suelo era frío, demasiado e incluso quemaba mi piel y poco a poco se volvía morada hasta ennegrecer como el carbón. Tiemble y negué aterrada, mi cuerpo casi no me obedecía sufriendo de la parálisis, de sucumbir al frío.

Y la pesadilla continuaba con el ambiente convirtiéndose en hielo solido bajo mi cuerpo hasta trepar por mis piernas y calar en mis huesos. Grite, estaba sollozando y apenas lograba arrastrarme sobre mis codos con la esperanza de salvarme de este frío horripilante.

Sola, no conseguía luchar y atrapó mis piernas, congelando mi piel y calando hasta mis huesos. Entonces todo mi ser se oscurecía abrazando mi cintura estaba por alcanzar mi corazón y absorber mis pulmones. El dolor y la sangre cubría mis brazos por obligarlos a seguir pero, en un momento ya no logré distinguir que me había detenido y solo en mi torpe ilusión creía que estaba avanzando lejos de todo este funesto destino.

Cerca y demasiado lejos para escapar.

Mis cuerdas vocales dejaron de servir, gimotee y exhale una nube de hielo. El mismo en el que ahora desgarradoramente voy a convertirme.

Cierro los ojos y esperó dormir en este frío ataúd.

Lo esperó rendida sin más pero, algo no me deja irme. Un extrañó sentir que tira de mi hacia afuera hasta permitirme oír una voz.

Alguien.

Alguien que hizo brillar una luz y estoy congelada por el miedo en mi. Alguien me hace sentir viva y me hace añicos.

Abrí los ojos.

Paralizada observe el hueco grotesco que abrió su cabeza en aquel hombre a metros de mi y su uniforme se teñía de la sangre que brotó, por unos segundos en pie antes de derribarse muerto sobre su lecho. No podía dar crédito a mi acto cometido todavía, estaba perpleja y desesperada, ahora solamente quería llorar, gritar y vomitar.

No, no, no por favor.

¿Por qué... por qué no retrocedió? ¿Por qué no se detuvo?

El arma cayó bruscamente de mis manos y la debilidad en mis piernas finalmente hizo su trabajó para arrastrarme hacia el suelo. Ahogue un grito cubriendo mi boca del dolor en mi pierna y comencé a temblar sin control.

—No, no, no... —balbucee por lo bajo, apenas pude entenderme.

No quise que esto sucediera, pero... debía hacerlo.

Es una vida por otra, vives lo suficiente para aceptarlo o morirás porque la piedad es una cuchilla en tu cuello y una oportunidad para ellos.

Cerré los ojos, evitando así ver a hacia los suyos y por un instante desee estar en cualquier otro lugar, y jamás haber llegado tan lejos por alguien.

Por él.

¡Hola!
Sólo te diré
unas cosas antes
de que avances.

Contiene:
—saltos temporales
—mucho es de mi invensión
—no todo es fiel al manga/anime
pero contiene spoiler del manga
—podría ser cliché
—contenidos explícitos
advertencias en la descripción
principal de la historia

Ahora sin más,
gracias por llegar hasta aquí.