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⿻⃟་⃟❄️『No, la muerte no va separarnos』

Yo no creía en el amor, hasta que tú llegaste para plantar aquella preciosa flor en lo que se convirtió nuestro jardín.

Mi corazón se derritió el primer día en el que comprendí, que tú eras quien estuve buscando toda mi vida.

¿Y sabes algo? Tú eres con quien deseo pasar el resto de mi existencia.

Te amo, y no me importa que digan de esto, yo te adoro, jamás me cansaré de decirlo. 

Porque cuando creí que el amor no era para mi, llegaste y me mostraste todo lo contrario.

— 🌱 —

Los ojos azulados del americano se hallaban cristalizados, ante el solo pensamiento de que su amado se encontraba en ese estado tan deplorable.

Podía apreciar desde el otro lado del cristal, como Rusia presentaba dificultad para vivir. Verlo conectado a tantas máquinas que lo ayudaban a realizar ciertas funciones vitales, lograba que todo lo que llamaba sentido común se perdiera en lo más profundo de su ser. Se sentía un idiota,  por el simple hecho de no haber notado el mal estar de su pareja. Quería gritar, ahogarse en lo primero que encontrase.

—Soy un idiota... ¡soy un maldito idiota,  que no sabe apreciar a quién tiene a su lado!—

Ya no podía verlo así, ya que si seguía observando a el eslavo en aquel estado, se desmoronaría en pleno hospital. Decidió correr, esconderse en el baño de aquel lugar, cerrando con pestillo mientras un mar de lágrimas corrían por su rostro. Se preguntaba una y otra vez ¿qué había hecho mal?, ¿Acaso el amor no era para él? Sabía que nadie le iba a dar una respuesta, pero no podía evitarlo. Se colocó en posición fetal, abrazando con fuerza sus piernas, rogando a Dios que todo se tratase de un mal sueño.

¿Cómo fue que la nación más grande en el mundo hubiese caído en aquel estado tan deplorable? Verán, cuando eres el cuarto país mas contaminante que existe sobre la Tierra, y te niegas a recibir ayuda, ya que crees que puedes salir adelante por tu cuenta, es un grave error. Rusia, estaba experimentado un colpaso a nivel corporal, ya que todas los errores cometidos a nivel ambiental, se estaban manifestando de forma totalmente negativa en él. Los médicos no sabían con exactitud si pasaría la noche, ya que la gravedad en la que se encontraba el de habla rusa, era muy avanzada. Para empeorar las cosas, este había caído en coma, ya que su cerebro no había podido asimilar todo el daño por lo que había pasado su portador, logrando hacerlo entrar en ese estado.

— 🌱 —

Cuando probé la dulzura de tus labios por primera vez, el tiempo se detuvo por un instante, elimando a cada cosa que se encontrara cerca nuestro. Logrando crear un universo paralelo, donde residimos tú y yo.

Ahora, solo quiero tomar tú mano y pasear por aquel prado donde solemos pasar el rato.

Quiero abrazarte, y susurrarte al oído poemas que van dedicados a ti, mientas tú me cantas dulces melodías, con tu precioso timbre de voz.

Deseo recostarme a tú lado, repartiendo caricias en tu suave piel, a la vez que entrelazó mi mano con la tuya.

— 🌱 —

Los hermanos del eslavo se hallaban reunidos en la sala del hospital, esperando noticias por parte de los profesionales, ya que sentían como sus esperanzas decaían poco a poco. Entre ellos, se encontraba la joven Estonia, la cual se mantenía fuerte, animando a sus hermanos, tal como de si su difunto padre se tratase. Ella creía que necesitaba fingir sentirse firme ante esa situación, cuando en verdad, se estaba derrumbando por dentro. De pronto, esta noto la ausencia del norteamericano, pero decidió restarle importancia a esto, ya que se encontraba ocupada consolando a su pequeño hermano Georgia, el cual no paraba de llorar.