El futuro no está escrito [Juliantina]

Capítulo 1

LONDRES, INGLATERRA

"IMPORTANTE HEREDERA MALGASTA FORTUNA"
"DINERO, SEXO Y ALCOHOL. ASI LA VIDA DE JULIANA VALDES"
"V-COMPANY TIEMBLA ANTE DESALENTADOR FUTURO"
"SE FILTRAN FOTOS COMPROMETEDORAS DE FAMOSA HEREDERA"

Alexander Valdés lanzaba con furia los encabezados de los periódicos que hablaban sobre el penoso comportamiento de su única hija y heredera de la cadena hotelera más grande e importante del mundo.

-¿En donde esta tu hija?- Preguntó Alexander a su esposa Hailee con una mirada llena de furia.

-Esta en su recámara, pero por favor te pido que antes de subir te trates de calmar, es tu única hija y sabemos que puedes ser muy hiriente cuando estas enojado – La mujer lo detuvo antes de subir a las escaleras y le dedicó una mirada suplicante.

-No puedo, no me pidas que siga soportando su mal comportamiento. Se que no he sido un padre ejemplar y que nunca estuve en muchos momentos importantes de su vida, pero tu y yo sabemos que lo hice porque no tuve opción- Alexander se soltó del agarre de su esposa y se propuso a subir las escaleras de su mansión.

Alexander abrió bruscamente la puerta de la habitación de Juliana, abrió las cortinas y con un vaso le arrojó agua a la cara de su hija para que se despertara.

-¡¡¡Despiértate!!! Sales en 1 hora, alista tus maletas. El chófer te estará esperando afuera, si no estas lista en ese tiempo, aunque estés en pijama te vas al aeropuerto. – Gritó furioso Alexander, tratando con todas sus fuerzas controlarse y no meterla con ropa a la regadera.

Juliana aun no terminaba de procesar lo que había pasado, hace unos momentos estaba soñando plácidamente con modelos brasileñas y de la nada se encontraba con su padre gritándole con furia.

-¿Puedes calmarte un momento? La cabeza me va a explotar. - Pidió Juliana con una cara de dolor ante los eminentes gritos proporcionados por su padre.

Alexander estaba atónito, no podía creer el descaro de su hija. Apretando sus puños con fuerza y tratando de controlar su respiración se acercó a su hija,  y se sentó a un lado de ella en la cama.

-No me voy a calmar Juliana, intenté de mil maneras hacer que entendieras tu situación. Créeme yo también fui joven y quise divertirme, pero tú debes de entender que no eres una joven normal, tienes responsabilidades y un futuro del cual no puedes escapar. - Explicó su padre haciendo un último intento de que Juliana entendiera.

-Papá creo que no es momento para hablar de esto, ¿Puedes dejarme seguir durmiendo?- Lo miró la morena con los ojos entrecerrados por el sueño.

Su padre se levantó de la cama furioso y antes de salir por la puerta, volteó y le dijo:

-Como dije, sales en 1 hora. Intenté por las buenas que cambiaras, pero ahora ya no te pasaré ni una más, y tendrás que aprender por las malas a valorar todo lo que tienes.

Juliana escuchó lo último y supuso que la mandaría a la casa de campo como otras veces, o en su efecto a un centro de rehabilitación. Pero jamás se imaginó lo que su padre tenía en mente.

Escuchó que tocaron su puerta y esta vez era Lucy, una de las 5 nanas que la habían acompañado en su infancia.

-Buenos días July, tú madre me mandó para que te ayude con tu maleta, ¿Quieres llevar algo en particular? - Le preguntó su nana y no pudo evitar dedicarle una mirada de pena, puesto ella ya sabía lo que su padre tenía preparado para Juliana.

-Buen día nanny, no tengo idea de lo que tiene planeado mi papá, ¿Tú sabes algo?.- Preguntó Juliana aún acostada sobre su cama.

-Lo único que puedo decirte es que planea llevarte a un lugar en Estados Unidos, y que debes de apresurarte porque ya está el piloto esperándote. - Le dijo su nana tratando de hacer una maleta con las pertenecías de la morena.

De mala gana Juliana se levantó de su cama y caminó hacia el baño, aún se sentía mareada por el alcohol que había bebido en la fiesta de anoche. Decidió meterse a bañar porque conocía a su padre, y sabía que era un hombre de palabra y cumpliría lo que le dijo de llevarla en pijama si era necesario.
En 20 min estaba lista y bajaba por las enormes escaleras blancas de la mansión. Caminó hacia el enorme comedor de dieciocho sillas y encontró a sus padres desayunando.

-Buen día. - dijo a sus padres pero ninguno contestó, así que supuso que estaban molestos.

Jalo una silla del comedor y se sentó a desayunar, sabía que la comida la ayudaría a bajar los efectos del alcohol que aún hacía estragos en ella.

Su padre levantó la mirada y la miró fijamente y se dispuso a decir:

-Desayuna rápido que nos tenemos que ir, yo personalmente me encargaré de llevarte e instalarte.

-¿Podrías dejar el misterio y decirme de una buena vez a donde tienes pensado llevarme? No me gustan las sorpresas y lo sabes. -Le dijo la morena ya irritada por tanto misterio.

Alexander sonrió de lado y le dedicó una mirada a su esposa, y de la nada se levantó de la silla y salió caminando hacia su despacho, sin decir palabra alguna.

-Mamá yo se que me pasé anoche en la fiesta, pero creo que mi papá está exagerando con su actitud. Además yo no puedo irme así como así, tengo clases y además todos mis amigos están aquí. Por favor trata de hablar con él y en verdad te prometo que voy a cambiar. - Suplicó la morena viendo a su madre.

-Lo siento Juliana, pero no haré nada para que tú padre cambie de parecer. Te amo y quiero lo mejor para ti, y sé que quedándote aquí terminarás por arruinar tu vida, esos "amigos" que tienes son una mala influencia para ti. - Le dijo la mujer morena y de ojos color miel.

Juliana apoyó su cabeza en la mesa totalmente desanimada, y tras unos minutos su padre salió de su despacho y le dijo que ya era hora de irse. Le pidió que se despidiera de su madre y de Lucy, ya que pasaría un buen tiempo para que las volviera a ver.
Juliana abrazó a su madre y le dio un beso en la mejilla, e hizo lo mismo con Lucy que la estaba esperando en la puerta.

-Lucy te encargo mucho a mi mamá, no dejes que se quede tan tarde trabajando por favor.- le dijo Juliana y le volvió a dar un abrazo.

Juliana salió y se subió al Rolls Royce que los esperaba para llevarlos al aeropuerto, en donde el jet privado de la familia esperaba para llevarlos a su destino.

Partió de su casa sin imaginar en cómo su vida cambiaría en este viaje, aprendería a valorar las cosas por muy insignificantes que fueran, y le darían una lección de vida que jamás olvidaría.

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Hola chicxs, este es el primer fic que publico, como sabrán esta basado en Juliantina pero he cambiado un poco las cosas, ya me había cansado un poquitín de los nombres de los demás personajes y decidí cambiarlos.

Espero que esta historia les guste, porque de verdad me debatí mucho entre publicarla o no.

Se aceptan críticas constructivas, y consejos, si llego a tener algún error ortográfico por favor haganmelo saber.

Si les gusta por favor comenten, eso motiva mucho a seguir escribiendo.
Igual yo trataré de actualizar lo más pronto posible, bueno tan pronto como el trabajo me lo permita.

Nos estamos leyendo.