Capitulo 1 _Tú_

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Odette.

La ciudad casi vacía me llena un poco de paz, en si me gusta la serenidad de una tarde absorta en mis pensamientos más profundos.
Creo que una persona merece ese momento de tranquilidad, el mismo que le ayuda a mejorar o tal vez fantasear con algo distinto.
Y, ser una rara no es ni nunca será mí mejor virtud es que ¿nunca nadie imagino una vida en su subconsciente totalmente diferente a la presente?
¿no? pf yo si y más cuando se trata de una muy bonita junto a Iam..

Si, es que Iam Statham es un gran cantante de rock con gran talento y pues no sé qué más de gran ...

Uf...

Bueno, a él le pertenecen mis más valiosos sentimientos.

— ¡Odette!

No me considero una loca ¿a qué chica no le ha gustado fantasear con que un famoso rockero sea su pareja?

¡no me podéis mentir ni de chiste! salvo que no sepan de la existencia del mejor.

— ¡rubia!

Mí risa resonó en todo el patio del departamento de mí amiga, ella por su parte me lanzo el periódico y la mire extrañada ¿desde cuándo lee eso? pues al prestar atención a la portada sonreí como una ganadora del Quini. La banda Holter estará presentándose esta noche en el bar Campeón.

¡Cerca de aquí!

— ¡no puedo creerlo!

— hazlo, porque iremos — suelta sin más.

Casi río sin gracia al oírla ¿cómo ibamos a asistir a tal sitio? ¡la entrada sobrepasa nuestro sueldo de semana!

— no Tami, no podemos, tal vez lo pasen por la TV.

Ansio ir ¡claro que sí ! pero lo más importante es pagar el alquiler, las compras para la comida de cada día, la bebida natural, las recargas de el autobús para trabajar o pasear y... otras cosas.

— oye, sé que no podríamos arriesgarnos así en gastar solo por ir a ver una banda pero no era mí plan — murmura con una leve sonrisa y enarco una ceja como hago usualmente y que a ella le causa risa — el amigo de mí hermano trabaja allí y nos hará pasar.

Si dijera que mí corazón no se sobresaltó mentiría y vaya que no me gusta hacerlo. No puedo si quiera pensar en cómo sería estar viendo en vivo a Iam, me deleito de tan solo imaginar La música, su voz, las melodías y grandes sinfonías que despejan cualquier problema, lo disminuyen para mí. Iam es mí escape, forma parte de mi alegría tan presente cada día.

— ¿segura?

— hace minutos nos ha enviado los pases.

— ¡y recién lo dices! — grito casi al punto de quedar difonica.

Es que ¡iremos al concierto de Holter!

No doy más de amor.

Algunos se preguntarán el por qué de tanto entusiasmo simplemente por asistir a un recital pero aquellos que alguna vez fueron a algún que otro concierto entenderán lo fascinante, esa pasión por la música inspirada en más allá que ello, en la destreza de saber disfrutar de un momento, tan solo unas horas en un paraíso lejano donde no hay lugar para nada más que no sea calma y amor.

Minutos después comienzo a pensar un temilla algo básico. Si hubiera imaginado que tendría la suerte de asistir a el show tal vez me habría comprometido a organizar mí maquillaje, el vestuario, calzado y demás para esta noche desde hace buen rato. Pero por esto no se puede pensar que por querer planear algo tan superficial como la apariencia refiere a que esa palabra me defina, puede que me guste vestir bien simplemente porque de alguna manera me hace más feliz.

Siempre tuyoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora